H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la Oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973 Serie meditativa 01 cepam H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la Oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973 Serie meditativa 01 cepam

“La cuestión de la oración no es asunto meramente intelectual. Formulémosla crudamente por medio de una disyuntiva: ¿Constituyen mis omisiones una causa de ruina espiritual para mí mismo y para mis Hermanos, o es mi fidelidad la que daña a la comunidad en que vivo, al obligarla a dar vueltas a la rueda de un molino en el que no hay trigo que moler? Según sea mi respuesta, tendré que orientar mi vida en un sentido o en otro.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 398) “La cuestión de la oración no es asunto meramente intelectual. Formulémosla crudamente por medio de una disyuntiva: ¿Constituyen mis omisiones una causa de ruina espiritual para mí mismo y para mis Hermanos, o es mi fidelidad la que daña a la comunidad en que vivo, al obligarla a dar vueltas a la rueda de un molino en el que no hay trigo que moler? Según sea mi respuesta, tendré que orientar mi vida en un sentido o en otro.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 398)

“La oración se encuentra presente en todas las religiones. A este respecto, os confieso que estoy vivamente impresionado por la oración del mundo oriental, a pesar de que no tengo un conocimiento profundo de la misma. Cuando se entra en un templo budista o hinduista, se da uno cuenta de la importancia que dan a la oración.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 399) “La oración se encuentra presente en todas las religiones. A este respecto, os confieso que estoy vivamente impresionado por la oración del mundo oriental, a pesar de que no tengo un conocimiento profundo de la misma. Cuando se entra en un templo budista o hinduista, se da uno cuenta de la importancia que dan a la oración.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 399)

“Antes de hablar de la utilidad de la oración, habrá que hablar de su naturaleza trascendente o escatológica, que es su primera dimensión. Al final de los tiempos, la oración cambiará de forma: Dejará de existir la petición y, no obstante, la escatología será oración.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 407) “Antes de hablar de la utilidad de la oración, habrá que hablar de su naturaleza trascendente o escatológica, que es su primera dimensión. Al final de los tiempos, la oración cambiará de forma: Dejará de existir la petición y, no obstante, la escatología será oración.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 407)

“La oración es el comienzo, el balbuceo de un diálogo que pronto encontrará todo su esplendor. Es la esencia y el anticipo de la trascendencia. Así pues, en lugar de perder el tiempo preguntándonos si es útil o no, creo que debemos fijarnos en esta primera definición, que va también para los cristianos no consagrados en la vida religiosa o en el sacerdocio.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 408) “La oración es el comienzo, el balbuceo de un diálogo que pronto encontrará todo su esplendor. Es la esencia y el anticipo de la trascendencia. Así pues, en lugar de perder el tiempo preguntándonos si es útil o no, creo que debemos fijarnos en esta primera definición, que va también para los cristianos no consagrados en la vida religiosa o en el sacerdocio.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 408)

“El cristiano no es un hombre que «practica», sino aquél en quien se infunde la misma vida de Jesús; que vive por Jesús, por el Espíritu de Jesús. Ahora bien, si de veras lo anima el espíritu de Jesús, a medida que el cristiano vaya siendo más consciente de su bautismo, el Espíritu lo irá invadiendo todo en él. Acaba por empapar los criterios, la conciencia y todo el ser espiritual.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 409) “El cristiano no es un hombre que «practica», sino aquél en quien se infunde la misma vida de Jesús; que vive por Jesús, por el Espíritu de Jesús. Ahora bien, si de veras lo anima el espíritu de Jesús, a medida que el cristiano vaya siendo más consciente de su bautismo, el Espíritu lo irá invadiendo todo en él. Acaba por empapar los criterios, la conciencia y todo el ser espiritual.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Charla sobre la oración”, Circular del 10 de noviembre de 1973, Vol. XXV, N° 5, p. 409)

Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida