La lectura en el nivel superior Aportes a partir del Texto de Paula Carlino

Objetivos para hoy -Advertir la importancia de enseñar a leer, a los fines de ayudar a que los estudiantes participen de la cultura discursiva de la disciplina. -Reconocer la complejidad del proceso de lectura en el nivel superior, a los fines de poder contribuir con ella a través de buenas prácticas de enseñanza.

Conceptos claves Alfabetización académica Lectura interactiva y recursiva Selección, interpretación y abstracción Heteroregulación - Autoregulación Función epistémica de la lectura Co responsabilidad en la lectura Orientaciones didácticas: Resumen Guía de estudio “El texto da pistas que guían el proceso de lectura pero también es cierto que los contenidos que pasan a primer plano dependen de lo que busca y sabe el lector” (Carlino, 2005: 70).

“Lectores y textos poseen “repertorios” –conjunto de valores, conocimientos y convenciones culturales- que deben intersectarse para construir significado. Cuando los repertorios del lector y del texto no coinciden, “el lector es incapaz de interactuar significativamente [con el texto]” (McCormick, 1996; Haswell, 1999).

¿Cómo utilizamos los textos de estudio para llevar al estudiante desde la heteroregulación a la autoregulación (lector autónomo)?

¿Qué decisiones tomamos los profesores al planificar la enseñanza? ¿Qué textos leen habitualmente los estudiantes en su vida cotidiana? ¿Sus características? ¿Con qué sentido? ¿Qué textos les proponemos que lean en nuestras asignaturas? ¿Qué decisiones tomamos los profesores al planificar la enseñanza? ¿Con qué sentido? ¿Sus características? ¿Qué textos deberán leer en su desarrollo profesional? ¿Con qué sentido? ¿Sus características?

Lectura del texto: Contribuciones de la obra de Vygotski: la ZDP y el andamiaje

Planificación de la enseñanza Actividades de aprendizaje Comunidad discursiva Objetivos Contenidos Coherencia Actividades de aprendizaje Tiempos y espacios Técnicas de enseñanza

-Propósito de lectura -Conocimientos previos -Pistas que ofrece el texto Se conjugan para otorgar significado a un texto y comprenderlo

Actividades 1. En función de las lecturas realizadas respondan: ¿Por qué los universitarios necesitan el apoyo de sus docentes cuando leen? ¿Cuáles son las operaciones que se realizan según los modelos de los procesos de lectura? ¿En qué consiste el pasaje de la dependencia a la autonomía en la lectura de los universitarios?   2. Individualmente, o con alguien de la misma asignatura, planifiquen una/s consigna/s de lectura para proponer a sus alumnos de la asignatura, incorporando consignas de algunos de los siguientes tipos: Preguntas sobre el texto Preguntas que obligan a leer e interpretar más allá del texto Preguntas sobre la práctica Preguntas que llevan a construir otro texto Preguntas que llevan a comparar resúmenes Preguntas que llevan a cuestionar los fundamentos del autor Consignas que llevan al estudiante a formular las preguntas

“Los hay que se pasan toda la vida leyendo sin haber llegado nunca a ir más allá de la lectura, se quedan pegados a la página, no se dan cuenta que las palabras no son más que piedras puestas para atravesar la corriente de un río, si están es para que podamos llegar a la otra ribera, la otra ribera es lo que cuenta. Si no es que, Si no es que qué, Si no es que estos ríos no tienen dos riberas, sino muchas, que cada persona que lee es, ella misma, su propia ribera, y que es suya, sólo de ella, la ribera donde habrá que llegar”. Fragmento de La caverna (Saramago 1922-2010)(Traducción libre del catalán)

"De todos los instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin duda, el libro. Los demás son extensiones de su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista; el teléfono es extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada, extensiones del brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una extensión de la memoria y de la imaginación". (J. L. Borges)

“El ser humano aprende en la medida en que participa en el descubrimiento y la invención. Debe tener libertad para opinar, para equivocarse, para rectificarse, para ensayar métodos y caminos, para explorar. De otra manera, a lo más, haremos eruditos y en el peor de los casos ratas de biblioteca y loros repetidores de libros santificados. El libro es una magnífica ayuda, cuando no se convierte en un estorbo. Si Galileo se hubiese limitado a repetir los textos aristotélicos (como uno de esos muchachos que ciertos profesores consideran “buenos alumnos”), no habría averiguado que el maestro se equivocaba sobre la caída de los cuerpos. Y esto que digo para los libros, también vale para el maestro, que es bueno cuando no es un obstáculo; lo que parece una broma pero es una de las calamidades más frecuentes”. (Ernesto Sábato)

Algunos desafíos en puerta - Co responsabilizarnos en los procesos de lectura de los estudiantes en las asignaturas. -Diferenciar las competencias lectoras que se ponen en juego al leer un texto lineal y un hipertexto o hipermedia. -Diseñar propuestas de enseñanza que les permitan a los estudiantes ingresar en la cultura académica y discursiva de cada asignatura. -Reconocer las exigencias que implica la lectura en la Universidad para diseñar alternativas metodológicas acordes a ellas.

La palabra, Pablo Neruda La palabra, Pablo Neruda. Interpretar el lenguaje figurando relacionando estructuras y significados Texto Todo lo que usted quiera, sí señor, pero son las palabras las que cantan, las que suben y bajan… Me prosterno ante ellas… Las amo, las adhiero, las persigo, las muerdo, las derrito… Amo tanto las palabras… Las inesperadas… Las que glotonamente se esperan, se escuchan, hasta que de pronto caen… Vocablos amados… Brillan como piedras de colores, saltan como platinados peces, son espuma, hilo, metal, rocío… Persigo algunas palabras… Son tan hermosas que las quiero poner todas en mi poema… Las agarro al vuelo, cuando van zumbando, y las atrapo, las limpio, las pelo, me preparo frente al plato, las siento cristalinas, vibrantes, ebúrneas, vegetales, aceitosas, como frutas, como algas, como ágatas, como aceitunas… Y entonces las revuelvo, las agito, me las bebo, me las zampo, las trituro, las emperejilo, las liberto… Las dejo como estalactitas en mi poema, como pedacitos de madera bruñida, como carbón, como restos de naufragio, regalos de la ola… Todo está en la palabra… Una idea entera se cambia porque una palabra se trasladó de sitio, o porque otra se sentó como una reinita adentro de una frase que no la esperaba y que le obedeció… Tienen sombra, transparencia, peso, plumas, pelos, tienen de todo lo que se les fue agregando de tanto rodar por el río, de tanto transmigrar de patria, de tanto ser raíces… Son antiquísimas y recientísimas… Viven en el féretro escondido y en la flor apenas comenzada… Qué buen idioma el mío, qué buena lengua heredamos de los conquistadores torvos… Estos andaban a zancadas por las tremendas cordilleras, por las Américas encrespadas, buscando patatas, butifarras, frijolitos, tabaco negro, oro, maíz, huevos fritos, con aquel apetito voraz que nunca más se ha visto en el mundo… Todo se lo tragaban, con religiones, pirámides, tribus, idolatrías iguales a las que ellos traían en sus grandes bolsas… Por donde pasaban quedaba arrasada la tierra… Pero a los bárbaros se les caían de las botas, de las barbas, de los yelmos, de las herraduras, como piedrecitas, las palabras luminosas que se quedaron aquí resplandecientes… el idioma. Salimos perdiendo… Salimos ganando… Se llevaron el oro y nos dejaron el oro… Se lo llevaron todo y nos dejaron todo… Nos dejaron las palabras. “La palabra”, Confieso que he vivido, Pablo Neruda (Buenos Aires, Losada, 1974)