H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976 Serie meditativa 04 cepam H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976 Serie meditativa 04 cepam

“La escena nos ofrece, junto con el aspecto gozoso y reconfortante para el corazón de María, una visión que Simeón señala como la del «siervo paciente de Yahvé». El Mesías llevará a efecto su obra en medio de sufrimientos y contradicciones. Simeón bendice a la sagrada familia, y dirigiéndose a María le dice: «¡y a ti misma una espada te atravesará el alma!» (Lc. 2, 34-35).” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 295) “La escena nos ofrece, junto con el aspecto gozoso y reconfortante para el corazón de María, una visión que Simeón señala como la del «siervo paciente de Yahvé». El Mesías llevará a efecto su obra en medio de sufrimientos y contradicciones. Simeón bendice a la sagrada familia, y dirigiéndose a María le dice: «¡y a ti misma una espada te atravesará el alma!» (Lc. 2, 34-35).” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 295)

“Ha habido una tendencia a considerar que en la Virgen se dio una perfección acabada y estática. No, el Evangelio nos enseña algo muy distinto. María no es aquella criatura que lo sabe todo, que lo tiene todo y que lo daba todo a los demás sin recibir nada de ellos. Es más bien la persona que ha vivido siempre a la escucha de Dios que habla por boca de los hombres.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 296) “Ha habido una tendencia a considerar que en la Virgen se dio una perfección acabada y estática. No, el Evangelio nos enseña algo muy distinto. María no es aquella criatura que lo sabe todo, que lo tiene todo y que lo daba todo a los demás sin recibir nada de ellos. Es más bien la persona que ha vivido siempre a la escucha de Dios que habla por boca de los hombres.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 296)

“Jesús ha cumplido los doce años, momento en el que el niño israelita alcanzaba la mayoría de edad religiosa. Según la Ley, desde ese momento, le correspondía una respuesta personal, y por tanto se le admitía a que tomase parte en las fiestas de la Pascua, del Pentecostés judío y de los Tabernáculos, fiestas que se celebraban en Jerusalén.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 297) “Jesús ha cumplido los doce años, momento en el que el niño israelita alcanzaba la mayoría de edad religiosa. Según la Ley, desde ese momento, le correspondía una respuesta personal, y por tanto se le admitía a que tomase parte en las fiestas de la Pascua, del Pentecostés judío y de los Tabernáculos, fiestas que se celebraban en Jerusalén.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 297)

“En la pérdida en el Templo, Jesús quiso dar a entender a sus padres, particularmente a María, que se debía a su Padre y que le prestaba una obediencia incondicional en el cumplimiento de su misión. Ella, su madre carnal, debe desaparecer poco a poco para dejar absolutamente libre la vía de la obediencia al Padre y la revelación a Israel.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 301) “En la pérdida en el Templo, Jesús quiso dar a entender a sus padres, particularmente a María, que se debía a su Padre y que le prestaba una obediencia incondicional en el cumplimiento de su misión. Ella, su madre carnal, debe desaparecer poco a poco para dejar absolutamente libre la vía de la obediencia al Padre y la revelación a Israel.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 301)

“Es a través de la meditación evangélica que habrá que intentar el encuentro con el mejor retrato posible de María. Un retrato inagotable: todas las generaciones lo han contemplado con gozo y han descubierto algunos nuevos rasgos en este sublime modelo de sencillez. Pues, la sencillez es la característica fundamental de María.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 303) “Es a través de la meditación evangélica que habrá que intentar el encuentro con el mejor retrato posible de María. Un retrato inagotable: todas las generaciones lo han contemplado con gozo y han descubierto algunos nuevos rasgos en este sublime modelo de sencillez. Pues, la sencillez es la característica fundamental de María.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 303)

Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida