H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976 Serie meditativa 02 cepam H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976 Serie meditativa 02 cepam

“¿Pudo ser la espera mesiánica de María menor que la de los santos de su tiempo? ¿No es ella como el Concilio lo ha reconocido la «Hija de Sión», es decir, la personificación viviente de este «pequeño resto» del pueblo elegido, que conserva la virginidad de su fe en Dios salvador y en su alianza de salvación?».” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278) “¿Pudo ser la espera mesiánica de María menor que la de los santos de su tiempo? ¿No es ella como el Concilio lo ha reconocido la «Hija de Sión», es decir, la personificación viviente de este «pequeño resto» del pueblo elegido, que conserva la virginidad de su fe en Dios salvador y en su alianza de salvación?».” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278)

“Quien dice fe, no dice visión. La fe es siempre un conocimiento imperfecto y parcial en el claro-oscuro de su conciencia de creyente, María debía de preguntarse muchas veces lo que sería el Mesías esperado. Sintiéndose más que nadie fuertemente solidaria con su pueblo, y por tanto, necesitada de salvación. Vivía para Dios en la confianza de que no tardaría mucho en enviar a «su Cristo». El tiempo estaba cercano.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278) “Quien dice fe, no dice visión. La fe es siempre un conocimiento imperfecto y parcial en el claro-oscuro de su conciencia de creyente, María debía de preguntarse muchas veces lo que sería el Mesías esperado. Sintiéndose más que nadie fuertemente solidaria con su pueblo, y por tanto, necesitada de salvación. Vivía para Dios en la confianza de que no tardaría mucho en enviar a «su Cristo». El tiempo estaba cercano.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278)

“En el mismo umbral del Nuevo Testamento nos encontramos ante esta mujer maravillosa, fruto a la vez de la mejor tradición de Israel, con gracias dadas por Dios a este pueblo a lo largo de la historia, y, además, de una predestinación singular y personal.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278) “En el mismo umbral del Nuevo Testamento nos encontramos ante esta mujer maravillosa, fruto a la vez de la mejor tradición de Israel, con gracias dadas por Dios a este pueblo a lo largo de la historia, y, además, de una predestinación singular y personal.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 278)

Resplandece en ella la presencia de Yahvé, colmándola de sus favores. Poco después se le felicita como a la creyente por excelencia (Lc 1, 45). Tal es la doble vertiente de su misterio: escogida por Dios y amparada por su amor; pero también, fiel al Señor, que le habla a través de los acontecimientos de su vida. Piadosa judía, sin otro lenguaje para responder al mensaje divino que el propio del Antiguo Testamento. ” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 279) Resplandece en ella la presencia de Yahvé, colmándola de sus favores. Poco después se le felicita como a la creyente por excelencia (Lc 1, 45). Tal es la doble vertiente de su misterio: escogida por Dios y amparada por su amor; pero también, fiel al Señor, que le habla a través de los acontecimientos de su vida. Piadosa judía, sin otro lenguaje para responder al mensaje divino que el propio del Antiguo Testamento. ” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 279)

“Un día, el Dios a quien ama con todo su corazón, con toda su alma, con todas sus fuerzas, le comunica que tiene una vocación maternal con respecto al Mesías. Es un anuncio que comienza por una invitación a la alegría: «Alégrate, tú que gozas del favor de Dios». Yahvé la colma de su amor, y le asegura una presencia especial: «Te cubrirá con su sombra».” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 281) “Un día, el Dios a quien ama con todo su corazón, con toda su alma, con todas sus fuerzas, le comunica que tiene una vocación maternal con respecto al Mesías. Es un anuncio que comienza por una invitación a la alegría: «Alégrate, tú que gozas del favor de Dios». Yahvé la colma de su amor, y le asegura una presencia especial: «Te cubrirá con su sombra».” (H. Basilio Rueda Guzmán, “Un nuevo espacio para María”, Circular del 8 de septiembre de 1976, Vol. XXVI, N° 4, p. 281)

Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida