Hay tres clases de triangulación o intervención de terceros en conflictos, según Milia: 1. Informal la intervención del tercero es difusa, se limita a mejorar la comunicación entre las partes, sin poder vinculante –investigación y buenos oficios-. 2. Formal la intervención es concreta y explícita, aunque no puede forzar una solución, poder vinculante mediano; aquí ubica el autor la mediación –respeto moderado del oponente- y la conciliación –respeto bajo-. 3. Rígido el respeto entre los oponentes es bajo, el tercero tiene potestad formal y posee un poder vinculante fuerte –arbitraje- o total –juez-.
Hay otra forma clásica de clasificar los términos relacionados con la resolución de conflictos: 1. Mediación presencia de un tercero para acercar a las partes en conflicto y conducirlas a una negociación. 2. Negociación encuentro entre las partes en conflicto. Presupone la voluntad de encontrar un acuerdo positivo. 3. Arbitraje las partes delegan su poder de decisión en una tercera, que suele tener autoridad moral o prestigio reconocido. La decisión del árbitro es vinculante. 4. Recurso a la Ley una parte, ambas o una autoridad competente deciden recurrir a la aplicación de la Ley.
Dos tipos de mediación En la práctica de la mediación general (no sólo la mediación intercultural) vienen apareciendo dos tipos, dos corrientes de mediación: una ha buscado el camino de la institucionalización, la otra ha querido la autonomía de la mediación. Veamos ambas corrientes a partir de una doble distinción: según el origen de los mediadores y según el modo de acción (a partir de J.F. Six).
a) A partir del origen 1- Los establecidos desde lo alto: funcionarios, Defensor del Pueblo, defensores del cliente, del usuario... 2- Los que se ponen en marcha desde la base: los que se proponen en asociaciones libres, por los ciudadanos. El mediador institucional trabaja, al mismo tiempo, para su institución y para los clientes de esa institución. Todas las instituciones comienzan a procurarse intermediarios. Un peligro es la burocratización de la mediación institucional. El mediador ciudadano nace en los grupos sociales para atender las necesidades de la comunidad. No tiene poder, sólo autoridad moral. No decide, sino sugiere.
b) Según su modo de acción Los mediadores institucionales resuelven problemas técnicos. Su función es decidir en el laberinto de las leyes. El mediador ciudadano es sólo ciudadano, sin poder. Su presencia, su acogida, su atención, me puede hacer avanzar en el problema que tengo conmigo o con otros. No resuelve conflictos, pero pone las condiciones para que las personas encuentren, con sus medios, salida a su conflicto. Por eso, la formación para ser un buen mediador ciudadano no es sólo técnica (como la de psicólogos, juristas, trabajadores sociales). Ser mediador ciudadano es un arte de la relación que nunca acaba de perfeccionarse. Por eso, la forma de actuar necesita tiempo.
Según Carlos Giménez, los mediadores y mediadoras interculturales tienen especificidades respecto a otros profesionales y otros tipos de mediación: La naturaleza etnoculturalmente diferenciada de las partes. Las partes involucradas tienen bagajes o identidad cultural diferenciadas. Y las diferencias se suelen dar en contextos de desigualdad y tensión. La incidencia de la diferenciación etnocultural en la relación existente entre las partes. Toda mediación actúa sobre una relación, y todo conflicto social tiene un carácter relacional. El mediador intercultural tendrá en cuenta las distintas ideas, valoraciones y percepciones de los actores sobre el conflicto. La relevancia del bagaje cultural del mediador. El perfil más idóneo del profesional de la MI es el de una persona “bicultural”, lo que asegura el conocimiento de los marcos de referencia que se relacionan. La interculturalidad como objetivo. Entendida como un proyecto que busca establecer relaciones interpersonales y sociales en las que no se discrimine, y en las cuales las partes se reconozcan mutuamente.
DOS CARACTERÍSTICAS DE LA MEDIACIÓN CULTURAL: POSICIÓN DE TERCERO. CREAR PASARELAS ENTRE DOS UNIVERSOS. “El mediador no es un sabio ni un experto. Es capaz de suscitar terceros espacios de transición, pasarelas que acercan a quienes están alejados unos de otros… …O ayuda a tejer vínculos dentro del propio individuo” (J.F. Six, 1999)
La finalidad de la acción profesional del mediador intercultural (dimensión que comparte con otros tipos de mediación) no es la de buscar solución a los conflictos, sino la de crear las condiciones adecuadas para que sea posible la relación entre los actores y la asunción por éstos de un nuevo espacio en el que convivir y acercarse. El mediador no es entonces el que busca soluciones, aunque esta posición la asume el mediador en ocasiones al aportarle un beneficio simbólico muy poderoso: ser reconocido por resolver los problemas, convertirse en un todopoderoso que consigue cosas para “su gente”.
La dificultad entre las partes no es propiedad del mediador, sino responsabilidad de ellas. La contribución del mediador es, en tanto que especialista en la comunicación, favorecer un cauce por el que una y otra parte son capaces de recuperar su relación y decidir juntos qué hacer, es decir, dar ellas la solución. El trabajo del mediador no debe valorarse, en consecuencia, por los resultados, sino por su habilidad para mejorar la calidad de la comunicación y del encuentro.
LAS 3Ds Ejes para abordar la mediación La Diversidad Cultural la tensión y el conflicto son inherentes a la relación entre personas con identidades culturales diversas. La Diferencia Sexual mujer y varón encarnan, desde su experiencia, un significado al ser mujer, al ser varón. La Desigualdad Social con frecuencia en la migración se huye de la desigualdad social, y la sociedad receptora recibe también desde la desigualdad.
3 CONDICIONES PREVIAS RECONOCER QUE HAY UN CONFLICTO CONSIDERAR A LA OTRA PERSONA COMO INTERLOCUTORA VÁLIDA DISPONIBILIDAD PARA NEGOCIAR, PARA CONTAR CON LA OTRA PARTE
La tarea del mediador pasa por tres fases básicas: Deconstrucción del conflicto. Reconstrucción de la relación. Co-construcción de la solución.