Primera acogida Atención de mujeres por VIF

Orientaciones prácticas para una Primera Acogida

Cuatro claves para el trato adecuado en primera acogida :

¿Cuál es el objetivo de la primera acogida?

LO QUE NO DEBE HACER EN UNA PRIMERA ACOGIDA Transmitir responsabilidad a la víctima por sus comportamientos: “¿por qué no te defendiste?; ¿por qué no lo contaste antes?... Darle razón ante razonamientos de culpabilidad: asentir cuando la víctima señala que tiene la culpa (verbal o no verbal). Cuestionar el relato: “¿está de lo que está diciendo?...” Apurar a la víctima en su relato: “necesito que me cuente porque tengo otra persona esperando” Expresar alarma o angustia: palabras, gestos o actitudes

Minimizar las experiencias o emociones de la víctima: “por lo menos no fue una violación”; “al menos fue tu marido y no un desconocido” Ignorar sus sentimientos: “cálmese y deje de llorar que no se entiende…” Contar sus propias experiencias: “a mí también me pasó algo parecido…(agente social se explaya en su relato)” Intentar hacer entrar en razón con consejos o explicaciones complejas: “no se preocupe la institución judicial actúa de acuerdo al mandato institucional…” Mostrar actitud degradante u hostil hacia la víctima: “¡Ya, nos vamos tranquilizando!” Demandar a la víctima más información de la que puede dar: “necesito que me cuente todo, para entenderla…”

¿ Cuáles son las principales informaciones que la víctima necesita recibir?

CONDICIONES QUE FAVORECEN EL TRATO ADECUADO A LAS VÍCTIMAS

En la primera acogida es importante: ESCUCHAR ACTIVO Y REFLEJAR: la mujer necesita ser escuchada con atención y respeto, devolverle de una manera clara lo que ella comunica. EVITAR LOS CONSEJOS: es mejor preguntar qué necesita, que está dispuesta a hacer, se puede sugerir alternativas, pero es la mujer quien decide lo más conveniente para ella. No preguntar detalles innecesarios. Dejar de lado nuestros prejuicios. Que nombre la violencia como tal y pueda identificar el nivel de gravedad de la relación de abuso. Valorar su acción de solicitar apoyo y comprenda que es el primer paso para iniciar la salida de una relación de violencia.

En la primera acogida es importante: ACEPTAR SU AMBIVALENCIA: hay mujeres que se sienten vinculadas afectivamente a sus agresores, coexistiendo el amor, miedo y la rabia. Este es un desafío para quienes les apoyan, cuesta aceptar que les den otra oportunidad, no obstante, no estamos para que ellas, hagan lo que nos parece mejor, sino para que decidan informadamente. No se debe juzgar ni quitar el apoyo a una mujer que no este preparada aún para salir del abuso. ATENDER A LAS PROPIAS CREENCIAS: debemos revisar permanentemente nuestra ideas, vivencias y juicios frente al abuso para no influir negativamente en las mujeres. MEDIDAS DE AUTOCUIDADO: a veces puede resultar muy fuerte lo que escuchamos, es muy importante que tomes contacto con las instituciones y organizaciones de tu comunidad para poder derivar. Ayudar hacer actividades recreativas, mantener contacto con la naturaleza, no asumir más de lo que puedes dar, tener sentido del humor.

¿Por qué la mujer llega a pedir ayuda? La situación familiar hizo crisis. Violencia más severa o más frecuente. Involucra a otros, hijos/as son golpeados o son testigo de VIF. Intervención de terceros, madres o padres. Problema es evidenciado con otras personas o profesionales. Aparición de sintomatología física y mental.

¿Cómo se encuentra la mujer cuando pide ayuda? Estado ansioso, temerosa y percibe un ambiente amenazante. Confusión, dolor físicos y psicológicos. Dificultad de concentrarse y responder adecuadamente o focalizarse en el tiempo Dificultad para comprender e integrar la información. Alteración conductual de hiperactividad o paralización.

Gracias