Son de los pocos alimentos que cuando los llevamos a la boca todavía están vivos. La gran cantidad de nutrientes vivos que contienen los germinados los convierten en el alimento más adecuado para corregir las carencias provocadas por la alimentación moderna, deteriorada por los procedimientos industriales. Los germinados son una excelente opción para la alimentación cuando escasean las verduras y hortalizas ya sea por el clima o falta de suelo. Los germinados, además de ser el alimento vivo más antiguo, son un manantial de clorofila, enzimas, vitaminas y aminoácidos (proteínas). Las semillas, al germinar, liberan los nutrientes que almacenan en su seno a modo de estallidos, adquiriendo así un altísimo valor alimenticio, es decir, multiplican sus propiedades.

Todo el sentido de la vida de una semilla es producir una nueva planta y, a su vez, la vida y la energía de una planta tienen como finalidad crear semillas. En una semilla está contenido el nacimiento de los futuros árboles, plantas y vegetales. Todo está dentro de la semilla: corteza, savia, flores y frutos, para llegar a madurar hasta su plenitud. El gran valor nutritivo de la semilla obedece a que ella, en su interior, posee las fuerzas vitales necesarias para construir toda una generación de plantas. Las semillas germinadas son ideales para personas que hacen dieta, para niños en edad de crecimiento, para los mayores, para los vegetarianos, los atletas, para quienes tienen una actividad física o mental considerable durante el día y no siempre comen bien.

El volumen y contenido de agua pasa de ser un 5% o un 12% en semilla a un 70% en el germinado. El agua activa las enzimas que ya están presentes en la semilla y se sintetizan nuevas enzimas: Las sustancias de reserva son predigeridas y se transforman en aminoácidos, algunos de los cuales son imprescindibles para el ser humano. Las sales minerales se multiplican. Las grasas se convierten en aminoácidos y el almidón en maltosa y dextrina, azúcares más simples que exigen menos esfuerzo al aparato digestivo.

Se origina la clorofila como resultado de la fotosíntesis, una reacción química que permite transformar sustancias inorgánicas en orgánicas y el almacenamiento de la energía solar. Los ácidos y toxinas que de forma natural defienden a la semilla, se descomponen. que sean una fuente excelente de vitaminas, minerales y oligoelementos de muy fácil asimilación por el cuerpo humano. Todo el complejo vitamínico se repro-duce en grandes cantidades; esto hace

Las semillas resultan indigestas para el ser humano. Comiendo alimentos vivos estamos más conectados a la vida en general. Germinado significa activo, productivo, útil y nutritivo. Cuando comemos semillas germinadas incorporamos todas estas energías a nuestro cuerpo y a nuestra vida. La germinación es una predigestión de las semillas orquestada por la naturaleza. Al ser un alimento predigerido, supone una economía energética para el cuerpo. Debido al alto contenido de enzimas, sus sustancias activas llegan a aprovecharse en su totalidad. Aumentan las defensas naturales. Ayudan a reducir el exceso de peso. Se trata de un alimento más nutritivo y vital al mínimo precio. Estaremos seguros del origen y la calidad de nuestra alimentación. Se puede vigilar su crecimiento y calcular el día que habrán alcanzado el máximo sabor y energía.

Nos permite participar en el cuidado del planeta y sus recursos. Es muy recomendable para los niños, mujeres embarazadas y las personas que no toleren las legumbres cocidas. Contiene clorofila. Por efecto de la clorofila, la respiración celular aumenta, el metabolismo celular se activa, mejora la defensa, la resistencia y la capacidad regeneradora de la célula; el metabolismo funciona de manera más económica y los procesos naturales de curación se activan. Ayuda a la desintoxicación del cuerpo Las vitaminas, los minerales y los oligoelementos son sustancias reguladoras imprescindibles para que se puedan producir todas las reacciones químicas de nuestro cuerpo y para la correcta absorción de todos los nutrientes. Dan vigor y mejoran la vida sexual, retrasan el envejecimiento.

1) Frasco de vidrio de boca ancha. 2) Manta de cielo, gasa o cualquier tela que no sea tóxica y facilite la ventilación. 3) Una liga o cordón que sujetará la tela en la boca del tarro. 4) Semillas, de preferencia de la misma especie para el mismo recipiente. 5) Agua purificada.

Consultar las tablas de semillas al final de la presentación para saber las cantidades a usar y las horas de remojo y germinación de cada especie. Escoger semillas de preferencia de cultivo ecológico, ya que están libres de sustancias químicas y son granos equilibrados lo que facilitará su germinación. Dar un ligero lavado a las semillas.

Introducir las semillas en el recipiente La cantidad de semillas que se utilicen dependerá del volumen que aumenten al ser germinadas, desde cuatro cucharadas hasta una taza. Añadir agua pura hasta la mitad y cubrir el recipiente con la tela. Dejar remojar las semillas el tiempo necesario, unas semillas sólo necesitarán cuatro horas y otras hasta quince horas.

Una vez que se haya escurrido bien, colocaremos el recipiente en un lugar oscuro y ventilado. Vaciar el agua. Pasado el tiempo, inclinaremos el recipiente a 45° para que el agua salga sin dificultad.

Los germinados se deben enjuagar varias veces al día Los germinados se deben enjuagar varias veces al día. Para esto, sin destapar el recipiente, introduciremos agua hasta que esta salga clara y así se eliminen los desechos. Para escurrir volver a inclinar el recipiente a 45° y regresar al lugar oscuro. Manipular los germinados lo menos posible.

Después de tres o cinco días, dependiendo de la semilla, los germinados estarán casi listos. Enjuagar una última vez y dejarlos ahora fuera del lugar oscuro para que la luz active la clorofila. No exponerlos al rayo directo del sol pues se pueden cocinar. Una vez que se tornen verdes se podrán sacar del frasco para ser comidos o almacenados.

Antes de consumirlos o guardarlos hay que retirar las cascarillas de la semilla. Para pelar los germinados llenamos el frasco a la mitad de agua, se agita suavemente los germinados con los dedos. Casi todas las cáscaras saldrán a flote y otras se asentaran. Sacar cuidadosamente los germinados y ponerlos en un colador, tapar con un trozo de tela limpio y dejarlos escurrir por dos horas. Bien limpios y secos, los germinados pueden almacenarse en una bolsa sellable de plástico o un frasco limpio con tapa en el refrigerador de siete a diez días.

Los germinados necesitan un constante aporte de agua, CUIDADO Los germinados necesitan un constante aporte de agua, CUIDADO!! en exceso no podrán utilizar el oxígeno, se detendrá la germinación y comenzará la putrefacción. Hay semillas que no se podrán germinar en frasco si no directo en tierra. Hay germinados que se recomienda comer en poca cantidad y usarlos como condimento. Las verduras de la familia de las solanáceas, contienen alcaloides, sustancias que pueden resultar toxicas, por lo que no es aconsejable germinar las semillas de berenjena, patata, tomate y pimiento. Las enzimas y la mayoría de las vitaminas se destruyen si se calientan a más de 40°C. El ser humano y los animales domésticos son las únicas criaturas que toman el alimento sin sus enzimas naturales, puesto que se nutren de platos cocinados.

Los geminados aumentan sus propiedades cada hora de su crecimiento por lo que se recomienda consumirlos por lo menos después de 72 horas del inicio de la activación de la semilla. Las propiedades de los germinados son capaces de mantener nuestra buena salud, siempre y cuando el resto de nuestra dieta se complemente con alimentos adecuados. Las semillas son alimentos muy concentrados y muchas veces no llegamos a asimilarlas por completo por no comerlas de la manera adecuada. La semilla seca contiene sustancias inhibidoras de enzimas, las cuales previenen la germinación prematura de la semilla y el efecto que tienen en los humanos es que al consumirlas se reduce la absorción de ciertos minerales y proteínas causando así deficiencias nutricionales. Si decidimos no germinarlas, debemos de todas maneras remojarlas antes de consumirlas para desactivar estas sustancias.

PRESERVEMOS LAS SEMILLAS

GRANOS DE CEREAL AVENA TRIGO ARROZ MAIZ CEBADA CENTENO 1 taza 12 hrs. remojo 1-2 lavados por día 2-3 días de maduración TRIGO 1 taza 12 hrs. remojo 2 lavados por día 2-3 días de maduración RENDIMIENTO 3 TAZAS ARROZ 1 taza 12-15 hrs. remojo 2-3 lavados por día 1-3 días de maduración GRANOS DE CEREAL MAIZ 1 taza 12 hrs. remojo 2-3 lavados por día 2-3 días de maduración RENDIMIENTO 1 TAZA CEBADA 1 taza 6-10 hrs. remojo 2-3 lavados por día 1-2 días de maduración RENDIMIENTO 4 TAZAS CENTENO 1 taza 12 hrs. remojo 2 lavados por día 2-3 días de maduración

SEMILLAS LEGUMINOSAS LENTEJA ALFALFA GARBANZO FENOGRECO FRIJOL MUNG 3-4 cuch. Sopreas 12 hrs. remojo 2-3 lavados por día 4-5 días de maduración 1 TAZA RINDE 6 TAZAS ALFALFA 4 cuch. Sopreas 4-6 hrs. remojo 2-3 lavados por día 4-6 días de maduración RENDIMIENTO 6 TAZAS GARBANZO 2 cuch. Sopreas 8-12 hrs. remojo 3-4 lavados por día 2-4 días de maduración 1 TAZA RINDE 3 TAZAS SEMILLAS LEGUMINOSAS FENOGRECO 2-3 cuch. Sopreas 4-8 hrs. remojo 2 lavados por día 3-6 días de maduración FRIJOL MUNG 3-4 cuch. Sopreas 12 hrs. remojo 3-4 lavados por día 3-6 días de maduración ½ TAZA RINDE 3 TAZAS FRIJOL AZUKI 3-4 cuch. Sopreas 12 hrs. remojo 3-4 lavados por día 3-5 días de maduración

SEMILLAS OLEAGINOSAS PECANS AJONJOLÍ ALMENDRA GIRASOL LINAZA CALABAZA 1 taza 4-8 hrs. remojo No germinar AJONJOLÍ 1 taza 6-8 hrs. remojo 3-4 lavados por día 2-3 días de maduración 1 TAZA RINDE 2 TAZAS ALMENDRA 1 taza 10-12 hrs. remojo 2-3 lavados por día 1-2 días de maduración SEMILLAS OLEAGINOSAS GIRASOL 2 tazas 4 hrs. remojo 2 lavados por día 3-4 días de maduración RENDIMIENTO 6 TAZAS LINAZA 1 taza No remojar Germina en tierra 0-5 días de maduración CALABAZA 1 taza 4 hrs. remojo 2 lavados por día 1-2 días de maduración

SEMILLAS CRUCÍFERAS MOSTAZA RÁBANO BERRO COL NABO 2-3 cuch. Sopreas No remojar 2-3 lavados por día 4-5 días de maduración RÁBANO 1 cuch. Sopera 4-6 hrs. de remojo 2-3 lavados por día 4-5 días maduración BERRO 2 cuch. Sopreas No remojar 2-3 lavados por día 4-5 días maduración SEMILLAS CRUCÍFERAS COL 2 cuch. soperas 4-6 hrs. de remojo 2-3 lavados por día 4-5 días maduración NABO 1 cuch. Soprea 4-6 hrs. de remojo 2-3 lavados por día 3-5 días de maduración

Bibliografía: http://es.scribd.com/doc/7787457/Martin-Luisa-Germinados http://es.scribd.com/doc/113802272/Semillas-y-Germinados-Dr-Jensen