COMPETENCIA DE APRENDER A APRENDER: TAREAS Y ESTUDIO EN CASA 1 de diciembre de 2011 ORIENTADORA: PURI INDURAIN

INTRODUCCIÓN En la Etapa Primaria nuestros hijos/as se encuentran con el desafío de empezar a hacer las tareas, responsabilizarse de ellas y empezar a estudiar. Les facilitará el presente, pero lo más importante, les prepararemos para afrontar los estudios a realizar en el futuro, que requieren más tiempo y dedicación. Los hábitos de estudio tienen, indudablemente, una relación con la capacidad de aprender. Las tareas escolares son muy importantes porque pueden mejorar el razonamiento y la memoria de los niños, fomentan el buen criterio en el uso del tiempo, les alientan a independizar su aprendizaje y a responsabilizarse por su trabajo.

COMPETENCIAS BÁSICAS: La LOE recoge las propuestas de la Unión Europea y propone las ocho competencias básicas (Comunicación lingüística, Matemática, Conocimiento e interacción con el mundo físico, Tratamiento de la información y competencia digital, Social y ciudadana, Cultural y artística, Aprender a aprender, Autonomía e iniciativa personal). Son una oportunidad de mejora de los resultados escolares. A vuestros hijos/as al finalizar esta etapa, en 6º de EP, se les evaluarán estas competencias en su expediente académico. Dentro de estas ocho está “la competencia de aprender a aprender”: Aprender a aprender implica la conciencia, gestión y control de las propias capacidades y emociones desde un sentimiento de competencia y eficacia personal. La competencia de aprender a aprender implica desarrollar aspectos cognitivos y emocionales: en lo referente al aspecto cognitivo: comporta tener conciencia de la importancia de la atención, la observación, la comprensión, la planificación y organización de las actividades,… en lo referente al aspecto emocional: para afrontar cualquier aprendizaje el niño o niña debe estar motivado, debe tener expectativas de conseguir éxito en una tarea, se esforzará por alcanzarlo. Tiene confianza en su capacidad y este sentimiento estimula su esfuerzo.

ORIENTACIONES: ¿Cómo podéis favorecer esta competencia en el contexto familiar con las tareas y el estudio? UNA BUENA PLANIFICACIÓN El tiempo es uno de los grandes valores de la vida. Las investigaciones han demostrado que administrar eficientemente el tiempo es un factor importante para el éxito académico. Establecer horarios. Un horario de estudio bien planificado permite atender todos los intereses y necesidades en una secuencia, proporción y equilibrio adecuado. Permite establecer prioridades (empezar por asignaturas de más dificultad) Jerarquizar/ordenar la tarea o actividades. La experiencia le indicará a qué materias debe dedicarles más tiempo. Dedicar diariamente el mismo tiempo y a la misma hora. Planear y determinar los tiempos para el descanso. También los alumnos cuya familia pone límites al tiempo frente al televisor, logran terminar un volumen mayor de tarea. Por lo tanto, favorece la autodisciplina (para muchos niños la tarea representa la primera oportunidad en su vida de programar el tiempo y trabajar bajo el control del reloj. La meta es integrar la tarea al ritual de la vida diaria. Al mismo tiempo se busca hacer de ese momento la oportunidad para trabajar individualmente, cada cual en lo suyo. Estamos potenciando AUTONOMÍA, ATENCIÓN, CONCENTRACIÓN…, planificación y organización de actividades.

Idealmente la madurez física e intelectual del niño aumentará gradualmente hasta hacer posible que el niño sea capaz de efectuar un trabajo con atención constante y sostenida de aproximadamente 30 minutos a los 8 años de edad. Posibles incidencias: Dificultades de planificación. La estrategia es determinar un horario diario para el estudio. Si un niño no puede concentrarse al hacer la tarea podéis establecer períodos cortos de trabajo y descanso y los vamos prolongando poco a poco. Así el niño irá aprendiendo a sostener cada vez más su atención. Cualquier estímulo atrae su atención y pierde el tiempo. Su rendimiento está siendo escaso y tardará más tiempo en realizar sus tareas. Para ayudarle es necesario eliminar los estímulos (televisión, hermanos alrededor, consolas…). Es recomendable que haga las tareas más difíciles cuando se encuentre más descansado y que estudie a la misma hora para conseguir un buen rendimiento cerebral. En estos casos, se aconseja que intercale el estudio con momentos de descanso para que el niño recupere la concentración. Y para comenzar su trabajo ORDEN. Del orden exterior se desprende el orden interior, que el niño tenga encima del escritorio o mesa sólo los libros que va a utilizar. Que estén los lápices y otras materiales a mano.

2 – RESPONSABILIDAD E INDEPENDENCIA Los niños deben aprender a trabajar solos. Favorezca a su hijo a ser responsable y trabajar independiente. La responsabilidad e independencia son cualidades importantes para el éxito escolar, y para que vaya adquiriendo seguridad. También incrementa su autoestima. Después de los ocho años no debería necesitar ayuda de los padres, solo supervisión. Así además fomentaremos el aprendizaje activo, que supone hacer y responder preguntas, resolver problemas… Lo importante es dar apoyo suficiente, lo que significa estar allí cuando vuestro hijo necesita, explicar aquello que no ha podido entender y proporcionarles todos los materiales necesarios. Y una pauta general, cuando necesita algo, lo mejor es llegar al punto donde pueda resolver el problema por sí mismo, responder a las preguntas que le vayan llevando a una solución. Contestar a sus preguntas es una forma de estimular su razonamiento. El razonamiento sirve para relacionar experiencias pasadas con las actuales, sacar conclusiones, formar conceptos y aplicarlos en otras teorías.

3. PROCESO DE ESTUDIO Aquí se aconseja llevar a cabo unas técnicas: a. Lectura rápida del texto. b. Lectura comprensiva en la que va realizando subrayado de ideas principales y secundarias. c. Esquema/mapa conceptual como el esqueleto del tema en el que de forma sintética se recojan las palabras claves. d. Resumir, les ayuda a expresar con sus palabras lo estudiado. e. Memorización comprensiva.

La MEMORIZACIÓN es uno de los aspectos de más interés en las técnicas de estudio. Ésta es como un gran armario en el que encontramos mejor las cosas si las tenemos ordenadas de una forma lógica. Tengamos en cuenta que se recuerda mejor aquello que se ha comprendido. La memoria funciona como un gran archivador, donde es importante: a. registrar: esta fase es como una primera lectura, donde es conveniente que se subraye, realizar esquemas, resúmenes… b. retener: si se quiere retener correctamente hay que prestar atención, para lo que se necesita concentración, aislarse de ruido, gente, televisión… c. rememorar: esta es la parte más importante y consiste en recordar lo que se ha memorizado, para lo que el orden, notas, subrayado y esquemas van a ser fundamentales. No es lo mismo entender el tema que memorizarlo. La falta de concentración y de una técnica adecuada también dificulta el estudio. En estos casos la intervención se hace mejorando la atención y la concentración usando reglas nemotécnicas y repasando el tema. Podéis preguntar el tema a vuestros hijos para comprobar si lo sabe.

DESDE LA DIMENSIÓN EMOCIONAL: Nos encontramos con la importancia de la motivación hacia las tareas. En la infancia los niños no se conocen. Las impresiones que tienen de sí mismos las reciben a través de los mayores. Un niño al que se le repite que es desordenado terminará pensando que lo es y terminará como tal, respondiendo así a una expectativa que se ha generado a partir de su conducta. Si nuestro hijo se comporta como desordenado deberemos creer en su capacidad para dejar de serlo y hacerle llegar nuestro ánimo y confianza en una mejora progresiva, favoreciendo por nuestra parte que así sea. Es importante que el niño conozca sus errores y limitaciones pero también lo es que descubra su capacidad para cambiar. La autoestima está muy unida a la motivación. Si nos sentimos seguros de nuestra capacidad y tenemos una buena opinión de nosotros mismos, seremos capaces de afrontar retos por difíciles que parezcan, es decir, nos sentiremos motivados para enfrentar las dificultades.

El componente afectivo de la motivación lo constituyen las emociones El componente afectivo de la motivación lo constituyen las emociones. Hoy en día son muy frecuentes las referencias a la vertiente emocional de la inteligencia. La capacidad para regular nuestras emociones se encuentra muy ligada a la motivación. ¿Cómo conseguir estimular la motivación? Con un ambiente estimulante Despertando en vuestro hijo la curiosidad y el deseo de saber planteándole retos, compartiendo actividades con él, juegos educativos, enseñándole y dejándole que nos enseñe. Hacerle entender que él es competente, está preparado para superar las dificultades y fallos cometidos hasta ahora. Reforzar con elogios todos los esfuerzos que realiza por mejorar por muy pequeños que sean. Requerir día a día con constancia, afecto y firmeza el cumplimiento exacto del plan de trabajo. Interesarse por sus estudios sin agobiarlo con preguntas como ¿has hecho ya toda la tarea? Mejor le decimos ¿me enseñas que has hecho hoy?

Este proceso es lento y en un principio es posible que haya que imponer cierta autoridad y disciplina para que el chico cumpla diariamente con un plan de trabajo. Ello supone: supervisar las tareas para ver si las ha realizado, preguntarle el tema y comprobar que ha estudiado, ver con ellos los cuadernos de trabajo. Poco a poco en la medida en que van alcanzando logros, se sentirá competente y satisfecho de sí mismo y su motivación aumentará convirtiendo el esfuerzo en un hábito. Este será el momento de “soltar amarras” pero manteniendo el apoyo y ayuda para cuando lo necesite. En esta dimensión es positivo poner algunas metas y ayudarle a que se esfuerce por superarse.

PAUTAS PARA RECORDAR 1- PLANIFICACIÓN DE UN HORARIO DE ESTUDIO. 2- FAVORECER LA ATENCIÓN CONSTANTE. 3- POTENCIAR SU RESPONSABILIDAD/INDEPENDENCIA. 4. ESTUDIO Y REPASO. 5. REFORZAR SUS ESTUDIOS. 6. EXIGIR CADA DÍA DEL PLAN DE TRABAJO CON AFECTO Y FIRMEZA.

Paralelamente a esta charla se ha realizado una sesión de Tutoría en el contexto aula de vuestros hijos/as y en coordinación con el Tutor/a. En dicha sesión se han enfatizado con vuestros hijos/as todas estas orientaciones. En la charla formativa del curso pasado (Educar en el AUTOCONTROL) del 14 de abril de 2011, os entregué un díptico que podéis volver a consultar, ya que también el autocontrol afecta de manera frontal al proceso de enseñanza-aprendizaje, y se complementa con este tema. Considero imprescindible y fundamental una comunicación-colaboración continua padres-tutor/a para conocer la evolución de vuestros hijos/as en su aprendizaje y en sus resultados.

FINAL Las tareas son una estrategia didáctica que favorecen la competencia de “aprender a aprender”. El Consejo Escolar de Navarra aprobó el 21 de junio de 2011 un informe sobre las tareas escolares en el que se destaca que en Nuestra Comunidad Docente existe el consenso de que las tareas escolares sirven para inculcar en el alumno el valor en el esfuerzo personal y la responsabilidad en su formación y educación. Las tareas escolares sirven para promover la participación e implicación de la familia en el proceso de aprendizaje de sus hijos e hijas y de la comunicación entre familias y colegio.