Cuarta carta de Paulo Freire “De las cualidades indispensables para el mejor desempeño de las maestras y los maestros progresistas”

HUMILDAD Exige valentía, confianza en nosotros mismos, respeto hacia nosotros y los demás. Ayuda a reconocer: nadie lo sabe todo, nadie lo ignora a todo. Nos hace escuchar con atención a quien nos busca. Es un deber humano y un gusto democrático nada estilista. Me ayuda a no encerrarme en mi verdad. Florece en la seguridad insegura de los cautos.

AMOROCIDAD Hacia los alumnos y hacia el proceso de enseñar. Debe ser un “amor armado” de lucha. Pero no exige en inventar en mi otra cualidad como la valentía de luchar, al lado de la valentía de amar. La valentía implica miedo. Y en la medida en que reconozco que como educador soy un político, también entiendo mejorar las razones por las cuales tengo miedo y percibo cuanto tenemos aun por andar para mejorar nuestra democracia.

TOLERANCIA Es la virtud que nos enseña a convivir con lo diferente. A aprender con lo diferente. Y a respetarlo.

DECISÓN Es necesaria en el trabajo formador del docente. Toda opción que sigue a una decisión exige una evaluación en el acto de comparar para optar por un de los polos, personas o posiciones. La indecisión es una debilidad moral o incompetencia profesional, delata INSEGURIDAD. El educador/a democrático no puede anularse, ni ser arbitrario en sus decisiones.

SEGURIDAD Requiere competencia científica, claridad política e integridad ética. No se puede estar seguro de lo que uno hace si no tiene cómo fundamentarlo, o si no tiene por lo menos algunas ideas de lo hace, porqué lo hace y para qué lo hace.

PACIENCIA E IMPACIENCIA La virtud esta en vivir la permanente tensión entre ellas, sin que jamás se de una aislada de la otra. Junto con esta forma de ser y de actuar equilibrada y armoniosa, se impone otra cualidad: LA PARSIMONIA VERBAL.

LA PARSIMONIA VERBAL Esta implicada en el acto de asumir la tensión entre paciencia – impaciencia. El discurso del paciente es comportado, mientras que el del impaciente va mas allá de lo que la realidad soporta. Ambos recursos corresponden a la preservación del STATU QUO. El primero por ir mas allá de la realidad y el segundo por ir mas allá del limite de los soportable (madres y padres).

ALEGRIA DE VIVIR Virtud fundamental para la práctica educativa democrática. Pero sin esconder la existencia de la tristeza en la vida. Me prepara para estimular y luchar por la alegría de la escuela.

Es vivir la humildad, la amorocidad, la valentía, la tolerancia, la ética, la justicia, la tensión entre paciencia e impaciencia, la parsimonia verbal contribuyendo a crear la escuela alegre, feliz.

No ser educador progresista es la posición mas cómoda, pero también la posición de quien renuncia a la lucha, a la historia, al conflicto. No hay vida ni existencia humana sin pelea ni conflicto.

Por eso el docente progresista une a la diversidad de intereses no antagónicos, y hacen defensa de sus derechos de : libertad docente a hablar, a mejorar condiciones de trabajo pedagógico, a tiempo libre remunerado para capacitarse, a criticar a las autoridades sin miedo a ser castigados o no mentir para sobrevivir.

Es preciso que luchen para que estos derechos sean reconocidos Es preciso que luchen para que estos derechos sean reconocidos. A veces es preciso que se luche con el sindicato y a veces en contra de él. Pero es preciso que se luche como administración progresista contra las rabias de los retrógrados, de los tradicionalistas entre los cuales algunos se juzgan progresistas y de los neoliberales para quienes la historia termino en ellos.

Eliana Victoria Rufer 2° Educación Primaria Taller de Práctica II 2013