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Vínculo ¿Qué es el vínculo? Las bases y la relación con la resiliencia.

¿Qué es vínculo? La definición de vínculo es “La unión o atadura de una persona o cosa con otra”(Real academia). El vínculo en termino psicológico se define como la presencia en las buenas y en las malas de un tercero, él ofrece siempre escuchar sensiblemente y un vínculo efectivo que no excluye los límites que puedan ser necesarios, los elogios y celebraciones por los logros obtenidos, el acompañamiento en las nuevas circunstancias que se puedan dar. En síntesis, ser alguien con quien el sujeto puede contar (Fonagy, 1999).

Una persona que fue expuesta a alguna situación difícil necesitará contar con alguien y, al mismo tiempo sentir que sus esfuerzos, su competencia y su autovaloración son reconocidos y fomentados. De esta situación nace la base o los pilares de la resiliencia. Situaciones en las que una persona pueden generar resiliencia

Bases o Pilares de Resiliencia Autoestima consistente. Capacidad de relacionarse. Creatividad. Introspección. Independencia. Iniciativa. Humor. Moralidad. La capacidad de pensamiento crítico

Los pilares de la resiliencia son los puntos claves en los que el vínculo tiene que bombardear con expresiones y comentarios positivos, debemos tener en cuenta que no sólo los individuales pueden ser resilientes; también las familias, los grupos y las comunidades pueden serlo (Grotberg, 1995). Bases o Pilares de Resiliencia

Vínculo y la relación con la resiliencia El vínculo tiene una relación muy estrecha con la resiliencia ya que ella se produce en función de procesos sociales, y en menor escala individuales, no se adquiere “naturalmente” en el desarrollo; depende de ciertas cualidades del proceso interactivo del sujeto con los otros humanos.

–La resiliencia es un producto de la trama vincular con los otros seres humanos, comenzando desde el nacimiento con los padres, luego con otras personas que se vuelven ‘significativas’ para el sujeto, por el amor y el reconocimiento que le expresan, que le sirven de modelo para sus identificaciones, le transmiten sus experiencias sabiduría y se adaptan a las nuevas necesidades del sujeto para entender en que medida influyen diversos factores en la construcción de la resiliencia (Boris Cyrulnik, 2001). Vínculo y la relación con la resiliencia

Esta relación es importante en la aparición o no de resiliencia en los sujetos y depende de la interacción de la persona con su entorno; es la presencia del otro en el sentido de sostén del impacto y es lo que da lugar a que el ‘shock’ obtenido pierda su eficiencia traumática y adquiera cualidad. Este proceso se hace en presencia y junto al otro, también es claro que ambos se modifican porque algo de lo irrepresentable adquiere una representación que nunca tuvo. Vínculo y la relación con la resiliencia

La investigación de A. Melillo hecho a niños pobres (2001) “Se observo que todos los sujetos que habían resultado resilientes tenían por lo menos, una persona (familiar o no) que los habían aceptado en forma incondicional, independientemente de su temperamento, aspecto físico o su inteligencia”.

“ La aparición de resiliencia depende de la interacción de la persona y su entorno humano”

Alcance del vínculo en la resiliencia Las necesidades del vínculo en el desarrollo humano para que haya resiliencia y la importancia del vínculo en la resiliencia.

Resiliencia: - Sobrepasar las adversidades Necesidades del vínculo en el desarrollo humano: - Relaciones interpersonales Ej. Madre- Bebé; Padre-Bebé

Importancia del vínculo en la resiliencia. –“Otro significativo” (Cyrulnik, 2001) – “Me han querido, luego soy digno de ser querido, conservo entonces la esperanza de encontrar alguien que me ayude a reanudar mi desarrollo” (Munist, Santos, Kotliarenco, Suárez- Ojeda, 1998)

 El vínculo permite que las personas ante situaciones difíciles puedan tener a un compañero que trabaje mano a mano con ellos, de forma tal que su ayuda, dedicación y esfuerzo permitan sobrepasar las adversidades, aprender de ellas y si en otro momento volviera a pasar lo mismo pueda ser superado nuevamente.

Cuna y primer ambiente socializador donde se forma y se educa el ser humano. El vínculo en la crianza: La familia

La presencia de apoyo incondicional por lo menos de una persona competente y emocionalmente estable. Factores identificados para desarrollo de características:

La autoestima La autoestima del individuo se desarrolla a partir del amor y del reconocimiento del bebé por parte de su madre y de su padre. (Melillo, 2006)

La autoestima La misma es fruto del cuidado afectivo consecuente del niño y es alimentada y fomentada por una relación familiar “ cálida, nutritiva y apoyadora, aunque no necesariamente presente en todo momento” (Greenspan, 1997) con al menos uno de los padres.

Tipos de apego parental Apego evasivo: niño aprende a responder como si la presencia de aquellas personas que le son esenciales le importara poco. Conducta es en respuesta a padres o madres que no toleran la expresión de sentimientos positivos o negativos. Como adulto, establecerá relaciones frías y distantes, dispuesto a que nada le afecte y aparentando no tener emociones.

Tipos de apego parental: Apego resistente o ambivalente: niño expresa exageradamente sentimientos negativos ante la ausencia de la madre, con angustia y pero al mismo tiempo pegajoso buscando consuelo. Combinación de enfado y protesta junto con el deseo de ser consolado resulta como respuesta a unos padres que respondían sólo a sus expresiones emocionales de forma intermitente y prestaban más atención a sus manifestaciones de sentimientos negativos que a los positivos.

Tipos de apego parental Como adulto se muestra dramático y excesivamente emocional con muestras simultáneas de deseo de consuelo (pegajosos) y enojo. Apego seguro: niño puede expresar abiertamente sentimientos de necesidad de consuelo y de angustia sin tener que exagerar. Se le puede tranquilizar efectivamente de forma proporcional al estrés que experimenta en el momento. Maneja sus emociones de forma balanceada.

Tipos de apego parental Su conducta es respuesta a la atención adecuada de unos padres que respondían de forma balanceada a sus expresiones y que estaban disponibles para cubrir sus necesidades emocionales. El niño se sabe valorado y atendido en su justa medida, y no tiene que exagerar sus sentimientos para lograr una respuesta de atención por parte de los padres. Como adulto desarrollará relaciones y estados emocionales de forma segura. (Fuentes, 2005)

Provee muestras de afecto físicas y verbales. Reconoce y realza éxitos y habilidades. Provee oportunidades de desarrollo de destrezas. Provee un ambiente de cultivo, cuidado y amor hacia el niño y entre sus integrantes. Provee un apoyo de referencia ético, moral y espiritual. Características de familias que fomentan la resiliencia

Desarrolla fuerte relación con el niño. Valora y alienta la educación. Maneja el estrés eficazmente. Pasa tiempo positivamente con el niño. (Hawkins, 1996)

Reconoce los problemas y limitaciones: –Se comunican abierta y claramente sobre ellos. –Registran los recursos personales y colectivos existentes. –Organizan y reorganizan estrategias y métodos. –Revisan y evalúan sus logros y p é rdidas. Características de familias que fomentan la resiliencia

Características de familia que fomentan la resiliencia La pr á ctica del manejo de problemas como modelo para los hijos se logra a trav é s de: –Actitudes demostrativas de apoyos emocionales. –Conversaciones en las que se compartan l ó gicas. –Conversaciones donde se construyan significados compartidos acerca de la vida. (Melillo, 2005)

El vínculo en la crianza: la madre Primera figura proveedora del niño para todas sus necesidades. Las características para la base de la resiliencia del niño inician su formación desde esta relación inicial con la madre.

El vínculo en la crianza: la madre Siendo la madre la primera en suplir las necesidades del niño, es entonces primer objeto de amor y de protección frente a los peligros externos. Algunas de sus funciones frente a su bebé son “moderar la angustia que surge como reacción inicial frente a la adversidad traumática, ayudarlo a adaptarse al medio extrauterino, mediar entre el medio social y el bebé para neutralizar los estímulos amenazantes y construir una base de seguridad a la que Bowlby & Ainsworeth llaman apego seguro que deriva de una base emocional equilibrada, posibilitada por un marco familiar y social estables.” (Marrone 2001 en Melillo 2006)