Antonio López Torres. Diego José López García.
La creación del nuevo organismo PNUMA. La Asamblea General adoptó el 15 de diciembre la resolución por la que se aprobaba la creación de un programa para la salvaguarda del entorno con un Consejo que lo dirige formado por 58 Estados entre los cuales se incluyeron Alemania y los restantes países del Pacto de Varsovia de la Conferencia de Estocolmo. El nuevo organismo se denominó oficialmente Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Su primer director elegido por unanimidad fue Maurice strong que había sido anteriormente el secretario general de la conferencia de Estocolmo. Se decidió que la sede del PNUMA fuera la ciudad de Nairobi (Kenya) para favorecer la cooperación económica de los países subdesarrollados del entorno.
Las labores inmediatas y sectores de actuación del PNUMA. Con presupuesto para los cinco primeros años que sobrepasa escasamente los cien millones de dólares, el PNUMA sólo puede colaborar a la resolución de los problemas graves ecológico que suceden en el mundo. La labor más inmediata que se propone es la coordinación de todos los esfuerzos e iniciativas en favor del medio ambiente que surgen en los distintos organismos de las propias Naciones Unidas. También ha seleccionado ocho sectores a los que piensa dedicar especial atención: el petróleo, los vehículos de motor, el hierro y el acero, el tratamiento de las sustancias minerales, los productos químicos y farmacéuticos, la pasta de papel y el papel, las industrias agrícolas, el ocio y el turismo.
El programa Earthwatch, para el control de la contaminación mundial. En 1974 el PNUMA realizo una asamblea para regular la contaminación en los países tanto en mínimos como en máximos. En 1950 la ONU potencio los estudios demográficos, para mejorar los censos de población y coordinar investigaciones. Los primeros hitos de esa política fueron las dos primeras Conferencias Mundiales de la Población, celebradas en Roma y Belgrado, en 1954 y 1965 respectivamente. El secretario general de las Naciones Unidas, Kurt Waldheim anuncio que en 1974 sería proclamado Año Mundial de la Población, con la posibilidad de celebrar durante el mismo la III Conferencia Mundial de la Población.
Propuesta y reticencias al plan de mayor control de la natalidad. En la tercera conferencia se proponía un plan de acción mundial. La mayoría de los países del tercer mundo se mostraron reacios a la propuesta, porque lo consideraban un planteamiento neomaltusianista que atribuía a la superpoblación el origen del subdesarrollo, cuando el verdadero problema se encontraba en los países pobres. Los países industrializados del bloque occidental propusieron como propuesta demográfica a corto plazo que se rebajar para 1985 el índice de crecimiento demográfico del 2 al 1,7%, gracias a un índice de crecimiento de la población del 0,9% en los países desarrollados y del 2% en los subdesarrollados. Este plan solo seria posible con una aceptación psicológica y social. Las motivaciones demográficas para apoyar el Plan.
Las variadas motivaciones de oposición al Plan. La propuesta del Plan Mundial de la Población provocó la oposición de un amplio sector de la Conferencia, incluyendo países tan dispares como la República Popular China, la Unión Soviética, los países socialistas de Europa y la mayor parte de los países latinoamericanos, africanos y asiáticos, así como el propio Vaticano. Como era fácil de prever, las resoluciones de la Conferencia insistió más en la necesidad de una mayor igualdad y mejor distribución de los recursos naturales