TEMA 9: MOTIVACIÓN Y FRUSTRACIÓN PSICOLOGÍA

LA MOTIVACIÓM Definiciones MOTIVOS. Son las causas, factores o impulsos internos que mueven a un sujeto a ejecutar una conducta. Tres términos relacionados con la motivación: NECESIDAD: es la situación en que algo falta (carencia) o sobra (exceso) a un sujeto para alcanzar un estado adecuado. IMPULSO: es la tendencia que, desde dentro, empuja a la acción y que el sujeto siente en forma de atracción o de repulsión. OBJETIVO: es la finalidad de la acción, lo que se pretende conseguir con ella.

LA MOTIVACIÓN Clasificación de los motivos humanos Clasificación clásica (Hull). Distingue entre: Motivos primarios: son los asociados a las necesidades biológicas. Son innatos y no adquiridos. Entre ellos: hambre, sed, sueño y sexo. Motivos secundarios. Son los determinados por las circunstancias de la vida en sociedad. Son aprendidos o sociales. Pueden, en consecuencia, ser cambiantes de una cultura a otra. Entre ellos: motivación de logro (ambición de alcanzar metas socialmente valoradas), el amor y la afiliación (necesidad de crear lazos afectivos con otras personas), el deseo de diversión o de conocimientos, la ambición de poder o de poseer bienes materiales, etc. Según Maslow los motivos sociales o secundarios no impulsan la conducta de los individuos si antes no se encuentran cubiertas sus necesidades primarias. Allport defiende que una vez aparecidos los motivos socioculturales alcanzan una autonomía funcional en relación con los puramente biológicos. Los motivos secundarios gozan de gran poder motivador.

TEORÍA REPRESENTANTES PRINCIPALES IDEAS TEORÍA HOMEOSTÁTICA O TEORÍA DEL EQUILIBRIO HULL Los motivos psicológicos son meros instrumentos al servicio de la satisfacción de las necesidades biológicas: Necesidad-desequilibrio-impulso-conducta TEORÍA DE LAS NECESIDADES MURRAY El impulso fundamental es la motivación de logro, es decir, el afán por vencer los obstáculos y alcanzar objetivos valorados individual y socialmente. TEORÍAS DEL INCENTIVO ODDS SKINNER La conducta como medio para la obtención del placer y la evitación del dolor. TEORÍAS PSICOANALÍTICAS FREUD Los impulsos o pulsiones del inconsciente (sexuales y de autoconservación) dirigen nuestra conducta, nuestro pensamiento y nuestros sueños. TEORÍAS COGNITIVAS TOLMANN FESTINGER La disonancia cognitiva origina un impulso a eliminarla que conduce a la acción. TEORÍAS HUMANISTAS MASLOW ROGERS Los motivos vienen determinados por la tendencia a la autorrealización personal. Triángulo de Maslow.

LA FRUSTRACIÓN: definición y causas La frustración es el resultado de la perturbación de un proceso motivacional en virtud de deficiencias, obstáculos o conflictos. La frustración puede ser debida a tres tipos de causas: Deficiencias internas. Es la situación que se da cuando las aspiraciones exceden las propias capacidades, o al menos el sujeto así lo cree. Obstáculos externos. El desarrollo de la acción es impedido por algún hecho o situación ajeno al sujeto que se ve obligado a renunciar a su propósito. Conflicto. El sujeto siente dos impulsos contrarios, que le empujan hacia acciones incompatibles entre sí. El conflicto se resuelve eligiendo una posibilidad y renunciando a la otra, lo que conlleva una cierta cantidad de sufrimiento inevitable; no obstante el mayor sufrimiento se da cuando el sujeto se ve incapaz de renuncias y por tanto de elegir.

Clases de frustraciones: Lewin y Miller Frustración por barrera. Se da cuando un sujeto no puede alcanzar su objetivo debido a un obstáculo, que puede ser interno o externo. Frustración por conflicto. Los conflictos motivacionales pueden ser de cuatro tipos: Atracción-atracción. Hay dos opciones y las dos atraen de la misma o muy parecida manera. Evitación-evitación. Hay dos opciones que desagradan, pero para evitar una debemos elegir la otra. Atracción-evitación. La misma opción nos atrae y nos repele a la vez. Múltiple atracción-evitación. Hay dos o más opciones y todas atraen o repelen al mismo tiempo.

Frustración y agresividad Las distintas teorías psicológicas dan tres tipos de respuestas a la cuestión de la relación entre frustración y agresividad. Psicoanálisis clásico: la agresividad es consecuencia directa de la frustración (McDougall). Según Dollard y Miller allí donde hay frustración aparece necesariamente agresión (física o verbal, directa o desplazada), y viceversa: no hay agresión sin frustración previa. Etología (Lorenz, Eibl-Eibesfeldt y Tinbergen): hay un instinto de agresión innato en los animales y en el hombre. La frustración puede ser desencadenante de la agresión, pero no la causante de ella. Otras escuelas insisten en el origen ambiental de la agresión y en la pluralidad de respuestas posibles ante la frustración: esta puede producir agresión, pero no la produce necesariamente; también puede generar otro tipo de conductas inadaptadas o simplemente provocar que el organismo busque su adaptación al medio de otras maneras, variando sus metas o su forma de alcanzarlas.

Conductas alternativas y tolerancia a la frustración Podemos agrupar las formas de reaccionar frente a la frustración en cuatro grandes categorías: Agresión. El sujeto ataca a quien cree causante de su frustración o desplaza su agresividad hacia otros. Largo indirecto. El sujeto no cambia de objetivo, pero sí la forma de obtenerlo. Propuesta de metas alternativas Evasión/depresión. El sujeto se refugia en conductas inmediatamente gratificantes y que no le supongan ningún esfuerzo, a veces recupera hábitos pasados ya superados (regresión), o bien se sume en un estado de profunda inactividad y tristeza (depresón). Se habla de tolerancia a la frustración para hacer referencia a la capacidad que un sujeto tiene de aceptar las frustraciones impidiendo que afecten de forma grave a sus hábitos de conducta y organización emocional, a la vez que propone metas o caminos alternativos que anulan o reducen los efectos de la frustración. Se entiende que una persona posee mayor grado de madurez emocional cuanto mayor es su grado de tolerancia a la frustración.