LAS POLÍTICAS PÚBLICAS DE JUVENTUD Revista de Estudios de Juventud, nº 94, septiembre 2011 Coordinador: Domingo Comas Arnau

Introducción Las políticas de juventud fueron una de las reivindicaciones democráticas en el último periodo del Franquismo y tuvieron un puesto destacado en la Transición, sobre todo desde el nacimiento de los primeros ayuntamientos democráticos. A lo largo de la democracia han ido perdiendo relevancia, hasta estos últimos años, en que han comenzado a emerger distintas reivindicaciones para luchar contra el uso excesivamente retórico de las políticas de juventud. Actualmente, se ha elaborado un discurso reivindicativo de carácter teórico y académico, y un desarrollo metodológico realizado por los profesionales del campo de la juventud. La actual crisis económica está proyectando estas reivindicaciones sobre el ámbito social, facilitando así que este tema pueda volver a la agenda política y mediática, en los próximos años. En el siguiente monográfico, distintos autores presentan los cauces por los que, a su juicio, deberían trascurrir las políticas públicas de juventud, de aquí al horizonte del año 2020.

¿Por qué son necesarias las políticas públicas de juventud ¿Por qué son necesarias las políticas públicas de juventud? (Domingo Comas) Esta reflexión fue iniciada en el año 2003 y a lo largo de estos años se ha tratado de poner en duda el consenso social, político y académico, sobre la consideración de que la juventud sólo es una etapa transitoria y no una categoría social. La actual crisis y sus graves consecuencias, desde el punto de vista de la limitación de derechos sociales que está conllevando, han puesto en evidencia que la negación de la juventud como extracto social es una falacia. Ahora, se propone reorientar las políticas de juventud, según las necesidades, y tratar de equilibrar aspectos estructurales y personales, es decir, conjugar las necesidades objetivas y las subjetivas. Los objetivos básicos son cuatro: condición juvenil, compromiso social, promoción del cambio y transición a la vida adulta.

Fomento de la juventud participativa: tratamiento constitucional, desarrollo legislativo y políticas públicas (Juan Manuel Goig y María Acracia) La construcción social demanda retomar la participación de la juventud, y ésta constituye un mandato constitucional, que en los últimos años ha adquirido un perfil propio en el ámbito de la UE. Para fomentar la participación juvenil es necesario generar una cultura participativa, mediante la estimulación de la creatividad, la libertad, la diferencia y la autonomía. Además, se han de formular e implementar programas dirigidos a los jóvenes. No meramente asistencialistas, sino que promuevan una acción comprometida, creativa y autónoma. Así mismo, se deben diseñar y aplicar programas que partan de la realidad de los jóvenes y no de la cultura adulta hegemónica, porque así se responderá a las necesidades reales de los jóvenes (generar compromiso y un vínculo afectivo, sentido de pertenencia, respeto por las culturas juveniles, etc.)

Principales retos de las políticas de juventud (Juan Manuel Camacho) Este artículo repasa las prioridades de las políticas de juventud, plasmadas en los Planes de Juventud, para describir los desafíos futuros. Desde una perspectiva de cambio de valores de las nuevas generaciones, se trata de desarrollar otras políticas de juventud que tengan en cuenta las aspiraciones de los jóvenes en ese contexto de transformación. La emergencia de los valores postmaterialistas entre los jóvenes debe impulsar cambios en la acción de las políticas de juventud, a través de mecanismos de participación más ágiles y directos. Los planes y programas impulsados por la Unión Europea ya van en esta dirección.

Los retos pendientes: la proximidad y la consolidación profesional (Pep Montes) Las políticas de juventud en España requieren un salto que consiga posicionarlas en el seno de las administraciones públicas, para así incidir más en la cotidianidad de los jóvenes. Hablamos de actuación estratégica y de calidad de la intervención. El balance general de las políticas de juventud en España es, desde la instauración de la democracia, positivo. Pero la escasez de recursos económicos con los que han sido dotadas y la distancia que hay entre su discurso teórico y la práctica cotidiana siguen siendo una barrera. Por tanto, nos encontramos en una encrucijada fundamental, ya que el límite de acción, con las actuales estructuras, está ya muy cercano, y las políticas de juventud se estancarán sin remisión si no se produce algún tipo de reacción. En este artículo, proponemos que esta reacción se centre en potenciar la proximidad como método de trabajo, y en la búsqueda de una mayor interlocución con los jóvenes, Además, se han de consolidar las estructuras departamentales de juventud y los equipos técnicos de gestión.

Autonomía y empoderamiento de los jóvenes (Bartolomé Agudo y Ramón Alborna) Hay que insistir en la necesidad de posicionar las políticas de juventud en el eje central de las políticas públicas de ciudadanía. El foco debe dirigirse a la capacitación de las personas y la articulación de los mecanismos necesarios para una mayor igualdad de oportunidades y cohesión social. Para todo lo anterior es fundamental reconocer el papel de los y las jóvenes en la construcción y en la transformación de sus comunidades. En éste marco, las prioridades de los organismos responsables de la política de juventud deberían situarse en la autonomía y el empoderamiento de las personas jóvenes. Se trata de dar instrumentos necesarios para que la juventud pueda ser más autónoma, a nivel individual pero también colectivo. Ese empoderamiento supone facilitar conocimientos y herramientas para participar como un colectivo con potencial de transformación social.

De la práctica del simulacro a la sistematización de la práctica (José Andrés Castaño y Teresa Zinkunegi) Este artículo revisa otro anterior elaborado por la Diputación Foral de Gipuzkoa, para reclamar que las políticas de juventud siguen teniendo poco peso en el conjunto de políticas públicas. Se aboga por la integración de los distintos enfoques en una única política encaminada a posibilitar el ejercicio pleno de los derechos de las personas en cada ciclo vital. De esta manera, tendríamos un sistema de promoción de la infancia, adolescencia y juventud. Un Sistema de responsabilidad pública con una serie de servicios de proximidad de carácter universal adaptados a cada etapa vital. La segunda parte del artículo explica la importancia del trabajo en red y cómo se ha estructurado este sistema en los diferentes niveles: político, técnico y de los propios usuarios. Además, se describe el catálogo de servicios recogidos en el Sistema y se detalla la puesta en práctica del mismo, identificando los retos a superar para alcanzar su consolidación.

¿Cómo convertir las intervenciones locales en políticas de juventud ¿Cómo convertir las intervenciones locales en políticas de juventud? (Ximo Cádiz y Mariam Cardona) Tras los distintos debates y enfoques sobre políticas de juventud: integrales, afirmativas, de emancipación, públicas, privadas, equilibradas, etc.; es hora de poner en cuestión los resultados finales de las políticas dirigidas a los jóvenes, ya que la partida la han ganado las políticas de juventud que hace el mercado. Se han de poner en duda los valores centrales de la sociedad actual, su modelo económico, su uso de recursos, su relación con la naturaleza, las relaciones personales derivadas, la convivencia, la participación y la propia democracia. Desde muchas perspectivas, estamos llegando a límites que nos obligan a caminar hacia ese cambio cultural y moral necesario, y las políticas de juventud deben ir en esa dirección. En ese sentido, se ha de comenzar desde lo más básico: los municipios.

Evaluación de las políticas públicas: elemento en la participación de los jóvenes (Rebeca Cano) Este artículo muestra la necesidad de que los jóvenes sean actores activos, con participación directa en la evaluación de las políticas públicas de juventud. Asimismo, trata de mostrar cómo la evolución del concepto de juventud y la de las propias políticas públicas ha contribuido a su actual estructura. Desde un punto de vista didáctico, existe una necesidad de emprender una evaluación de políticas públicas, y de cómo deben llevarse a cabo, para determinar las principales fases y actividades.

Las políticas públicas de juventud en Europa: cuatro casos y doce propuestas (Alfredo Quintana) Por último, analizamos las políticas de juventud de cuatro ciudades de distintos puntos de la UE: Turku, Módena, Colonia y Varsovia. Las políticas desarrolladas no son significativamente distintas a nuestro país, pero lo interesante son las condiciones en que se desarrollan. ¿Quién se encarga exactamente de ellas, cuál es su target, qué relación establecen con las políticas educativas, qué nivel de transversalidad conllevan, son más activas o más reactivas, se preocupan más o menos por el proceso de emancipación, se encargan de las políticas económicas, se centran especialmente en subgrupos como mujeres e inmigrantes, y qué relación establecen con instituciones religiosas? A partir de este análisis, se establece una serie de propuestas que pueden contribuir a la mejora de las políticas de juventud en España, en relación con los nuevos planteamientos que propone la UE, para el periodo 2010-2018.

Anexos Se incluyen además en esta revista: El Dictamen de la ponencia del Senado en torno al “Libro Blanco de la Juventud en España 2020”. Las conclusiones del Grupo de Trabajo del INJUVE sobre “Juventud Española 2020”. Y la resolución de la Comisión Europea sobre la cooperación en el ámbito de juventud de 27/11/2009.

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