“Éste es el Cordero de Dios” DOMINGO II - Ciclo B T. Ordinario BARTHIMEUS, Instituto para el Progreso Humano.

ORACIÓN COLECTA DE LA MISA DEL DOMINGO II T. Ordinario – B “Dios todopoderoso, que gobiernas a un tiempo cielo y tierra, escucha paternalmente la oración de tu pueblo, y haz que los días de nuestra vida se fundamenten en tu paz”

“Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad”. Salmo (39)

Juan 1, 35 - 42 “En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en Jesús que pasaba, dice : Éste es el Cordero de Dios.

Juan Bautista nos enseña cómo mostrar a otros dónde está la verdad. Todos necesitamos que alguien nos señale el camino. Hoy, ese rol que desempeñó Juan Bautista, lo puedes desempeñar tú. Necesitas ser veraz como Juan, que no dudó en decir a sus propios discípulos : “Éste es”.

Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús. Jesús se volvió hacia ellos y, al ver que lo seguían, les pregunta : ¿Qué buscan?

Los dos discípulos nos muestran cómo actuar para conocer a Jesús. Si obras como ellos, Jesús te preguntará : ¿Qué buscas? OYERON y ACTUARON. Siguieron a Jesús. OYERON y CREYERON. Supieron reconocer quién era el Maestro. OYERON y se ACERCARON. No se conformaron con saber de lejos sobre Jesús.

Ellos le contestaron : Rabí (Maestro), ¿dónde vives?

Supieron responder a la pregunta de Jesús. Le respondieron con otra pregunta, como diciéndole : nos interesas, queremos conocerte mejor. ¿Para qué le preguntas a alguien dónde vive? Porque te interesa. Porque quieres localizarlo. Porque quieres volver a encontrarlo. Porque quieres conocerlo mejor. Jesús es la Vida misma. Querer saber dónde “vive” Él, es querer saber cómo tener la Vida verdadera.

Él les dijo : Vengan y lo verán Él les dijo : Vengan y lo verán. Entonces fueron, vieron dónde vivía y se quedaron con él aquel día; serían las cuatro de la tarde.

Vengan y lo verán No me puedes conocer de “oídas”. Quédate conmigo. Sé mi amigo, conóceme, acompáñame No me puedes conocer de “oídas”. Quédate conmigo. El que permanece con Jesús es el que puede dar fruto.

Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús; encuentra primero a su hermano Simón y le dice : Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo). Y lo llevó a Jesús.

El Señor se encargará del resto. Parte de ser capaz de dar fruto es empezar a decirle a otros : He encontrado al Mesías. Empezar a ayudar a otros a encontrar al Señor. Sembrar en otro el deseo de conocer a Jesús. Hacer lo que hizo Juan Bautista, decirle a otro “Jesús es el Señor. El Señor se encargará del resto.

Jesús mirándolo le dijo :Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas (que traducido significa Pedro)”. Palabra de Dios

Si llevamos a otro a Jesús, como hizo Andrés con su hermano Nosotros no somos Juan Bautista ni tenemos discípulos, pero tenemos hermanos, parientes, vecinos, compañeros. Si llevamos a otro a Jesús, como hizo Andrés con su hermano Simón Pedro, ya el Señor se encargará de hacer una historia con él. Porque “Toda vida es una vocación”. P.P. 15., Pablo VI

Que la alegría siempre esté contigo Tob.5,10 Señor, conocerte para amarte es lo que más deseo en esta vida. Ayúdame a lograrlo. Que la alegría siempre esté contigo Tob.5,10 BARTHIMEUS, Instituto para el Progreso Humano.