COMUNICACIÓN CONYUGAL Y FAMILIAR Escuela para Padres Septiembre 2017 Mtro. Eduardo Herrera Ramírez
TODOS DESEAMOS LA FELICIDAD Nuestra Principal meta en el vida es SER FELICES
"Dios quiere nuestra felicidad, nos creó para ser felices no sólo en la Vida Eterna, sino también en esta". Hay diferentes caminos para alcanzar esta felicidad; una de ellas es el matrimonio, que busca la felicidad en pareja, en una sana relación con los familiares y en la procreación para FORMAR UNA FAMILIA
LA COMUNICACIÓN CONYUGAL Los seres humanos comunicamos todo el tiempo, de manera verbal o no verbal. En una pareja el diálogo y la comunicación resuelven barreras y dificultades cuando se realizan de la manera correcta.
Los hijos, particularmente en la niñez y la adolescencia, aprenderán a comunicarse según lo aprendan de sus padres
La buena comunicación y el buen diálogo en pareja DISPOSICIÓN Adecuado espacio físico Actitud y disposición corporal Elegir bien el momento, el lugar, si conviene platicarlo habiendo más personas presentes (particularmente los hijos) El “tono” de nuestra voz Evitar los momentos de reacción CONTENIDO Pensar un poco lo que queremos decir antes de comenzar a hablar Es indispensable saber lo que quiero transmitir Cuáles son las mejores palabras para decirlo En el diálogo hay “ida y vuelta”, hablamos y escuchamos adecuadamente
“Aprendemos a hablar alrededor de los 3 años de edad. Aprender a comunicarnos es tarea del resto de nuestros días”
El Diálogo por excelencia: LA ORACIÓN
LA COMUNICACIÓN FAMILIAR
Nunca demos por hecho que, al haber una buena comunicación en la pareja, automáticamente la comunicación con los demás miembros de la familia es adecuada. Aprendimos a comunicarnos con la experiencia, así que entablamos relaciones diferentes según la persona con la que hablamos.
Condiciones para una buena comunicación familiar Sea que hablemos de “uno a uno” o con toda la familia debemos cumplir con los principios básicos: Tolerancia Respeto Amor Dignidad Honestidad Comprensión
El Tema de los “Abuelos” Pongamos particular atención a nuestra forma de comunicarnos con nuestros padres, sobre todo si nos ayudan en la tarea de educar a nuestros hijos. Respetemos sus decisiones y dialoguemos constantemente con ellos.
Recordemos que, también en familia, la Oración es el Diálogo por Excelencia
“No olvidemos que las buenas intenciones no bastan”
Ejercicio Práctica de comunicación conyugal/familiar/personal