 La base de la crisis griega es una deuda de aproximadamente millones de euros, que el país simplemente no está en condiciones de pagar.  La explicación más simple es que durante muchos años el país estuvo gastando más dinero del que producía y financiando ese gasto a través de préstamos.  Grecia ya hacía eso antes de adoptar el euro. Y la llegada de la moneda común en 2001 no cambió las cosas, como en teoría debía suceder.  Y sumado a problemas de corrupción y evasión fiscal, reconocidos por la propia Grecia, esto terminó provocando un déficit muy superior al 3% del PIB contemplado en las reglas de moneda común.  Préstamos no declarados a la eurozona, por su parte, también llevaron a que la deuda excediera significativamente el 60% acordado como límite por los países de la eurozona: actualmente se estima en 177% del PIB.

 El problema, solo se volvió urgente cuando la crisis financiera global limitó el acceso griego al crédito, lo que motivó la intervención de los otros países de la eurozona temerosos del impacto de una cesación de pagos.  Aunque, para muchos, las medidas de austeridad impuestas como condición para financiar un rescate financiero, terminaron agravando la situación.

 El primer paquete de ayuda financiera fue aprobado por la UE y el FMI en mayo de En ese momento se pusieron a disposición del gobierno griego millones de €.  Pronto, se hizo evidente que no sería suficiente, por lo que un 2º rescate elevó la cifra a millones de €. Y, en ambos casos, con la condición de una serie de medidas de austeridad.  Estas han provocado recortes del gasto público, mayores impuestos y reformas al sistema de pensiones y el mercado laboral. Pero el actual gobierno, que llegó al poder a inicios de año con una plataforma anti- austeridad, ha estado intentado renegociar algunas de esas condiciones de cara a un nuevo paquete de rescate estimado en millones de euros adicionales.

 Algunos economistas consideran que las medidas no han hecho nada por mejorar la situación o las perspectivas de Grecia. 1. Se estima que la economía griega se ha reducido en un 25% desde el inicio de los programas de austeridad, lo que ha acentuado su dependencia en créditos externos. 2. El impacto de las medidas ha sido brutal: su tasa de desempleo del 26% es la más alta de toda la Unión Europea y entre los jóvenes ya supera el 60%. 3. Ya son millones los ciudadanos griegos que están viviendo bajo la línea de pobreza. Esta situación fue, de hecho, lo que llevó al poder a Syriza, el partido que mejor supo recoger el descontento generado por las medidas de austeridad.

 El escenario más temido al inicio de la crisis –una cesación de pagos– empezó a hacerse realidad el martes por la noche, cuando Grecia no logró honrar un pago de unos millones de euros adeudados al FMI.  Grecia se convirtió así en el primer país desarrollado en entrar en mora con el FMI y su impago en el más grande en la historia del organismo multilateral. Y el mismo martes también se venció el último programa de ayuda financiera.  Ya antes, Tsipras anunció que dejaría la decisión final en manos de la ciudadanía, mediante un referéndum. Aunque la ventaja del "No" se ha ido reduciendo después que Atenas impusiera un "corralito financiero" (evitar retiros masivos)  El primer ministro griego deja claro la posibilidad de una negociación.  La canciller alemana, Ángela Merkel, dijo que hay que esperar el resultado del referéndum antes de pensar en reabrir una negociación.

 La pregunta sometida a referéndum es específica y está redactada en un lenguaje bastante técnico, no particularmente fácil de comprender.  "¿Debe ser aceptado el acuerdo propuesto, que fue presentado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional en el Eurogrupo del y consiste de dos partes, las que constituyen su propuesta unificada?“  Y luego se ofrecen dos simples opciones: sí o no.  Los puntos centrales de la propuesta son una ampliación de la base del IVA y una reducción drástica del número de personas que pueden optar a un retiro anticipado, también demandan más acciones para reducir la evasión fiscal y acabar con la corrupción.  El gobierno griego, sostiene que son humillantes y por lo tanto inaceptables.  Y para ellos la cuestión es mucho más simple: es si los griegos deben seguir padeciendo más medidas de austeridad o no. Mientras que los otros líderes europeos, empezando por Merkel, insisten en que la pregunta es otra, aunque igualmente sencilla. Afirman que lo que los griegos decidirán el domingo es si quieren que su país siga siendo parte del euro o no.

 Nadie lo sabe con certeza. No existe ningún precedente y el mismo vicepresidente del Banco Central Europeo, Victor Constancio, dijo que no había ninguna ley que ordenara la expulsión de la eurozona en caso de default.  El gobierno griego insiste en que no está intentando abandonar la moneda común  Los principales líderes europeos, sin embargo, lo han dicho claramente: la votación del domingo es sobre conservar el euro o no.  Si el Banco Central Europeo decide detener completamente el crédito hacia Atenas, las autoridades griegas no tendrían más opción que empezar a imprimir su propia moneda para intentar mantener su economía funcionando.  Y el "Grexit", como se ha dado en llamar a la salida de Grecia del euro, sería una realidad.

 Una Grecia insolvente implicaría importantes pérdidas de dinero para varios países europeos.  Además, también está el riesgo de un contagio político.  Si la salida del euro se muestra como una opción viable e incluso beneficiosa para Grecia, otras naciones podrían verse tentadas a seguir el ejemplo.  La salida del euro podría además forzar la salida de Grecia de la UE. Pero todo dependerá de la voluntad política e imaginación que muestren los líderes europeos.

 Son dos países relativamente pequeños y ambos han tenido formas muy diferentes de afrontar la crisis financiera y económica.  En Islandia, su economía quedó totalmente devastada por un sistema financiero hiperatrofiado, para superar la crisis se optó por no salvar a la banca y dejarla quebrar, se introdujeron controles monetarios, de devaluó y no se impusieron medidas de austeridad salvajes. Sobre todo, a pesar de los disturbios, se escuchó la opinión de los ciudadanos celebrando referendum.  Grecia siguió una receta totalmente opuesta. Se optó por mantener con vida a bancos moribundos con dinero público, se optó por incrementar la deuda pública en proporciones gigantescas y se optó por aplicar drásticas medidas de austeridad.