A N F U D I B A M ASOCIACIÓN NACIONAL DE FUNCIONARIOS DE LA DIRECCIÓN DE BIBLIOTECAS, ARCHIVOS Y MUSEOS FUNDADA EL 27 ABRIL 1990 PERSONALIDAD JURÍDICA DEL REGISTRO DE ASOCIACIONES DE FUNCIONARIOS Nº AFILIADA A LA A.N.E.F. Y POR SU INTERMEDIO A LA C.U.T. R.U.T. Nº TELÉFONO FONO FAX AVDA. LIBERTADOR BERNARDO O’HIGGINS 651 (EDIFICIO BIBLIOTECA NACIONAL) DIRECCIÓN POSTAL: CLASIFICADOR 1400 CORREO CENTRAL SANTIAGO DE CHILE CORREO ELECTRÓNICO: BREVE DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO DE LEY DE MINISTERIO DE CULTURA DIRECTORIO NACIONAL ANFUDIBAM 10 de Mayo del

Creación del Ministerio de Cultura El Presidente de la República anunció en dos cuentas anuales al País del 21 de Mayo (años 2011 y 2012) la creación de un Ministerio de la Cultura y el Patrimonio. La primera reunión de la ANFUDIBAM y la Dirección de la DIBAM fue el 18 de enero del año 2011, en la que sólo se nos informó de la intención de elaborar un proyecto de ley sobre Ministerio de la Cultura y del Patrimonio. Señalamos en dicha oportunidad nuestra visión, acordada en la Asamblea del año 2010 sobre la necesidad de un Ministerio de Cultura y la necesidad también de diferenciar las dos áreas de la política cultural: fomento e industria creativa (representada por el CNCA) y el patrimonio (representada por la DIBAM). Las condiciones previas, en las cuales la ANFUDIBAM desde el principio y en forma permanente señaló a la Dirección, para que esta discusión sea democrática, fueron: – El no desmembramiento de la DIBAM – La participación del conjunto de los funcionarios mediante mecanismos de encuentros, seminarios, etc. – La dictación de una nueva ley de planta que mejore e incorpore a los trabajadores permanentes de la institución, sea planta, contrata u honorarios. Posteriormente, en diversas instancias se repitió el mismo planteamiento. Permanentemente se informó por nuestros canales de comunicación la situación señalada, siendo las últimas relevantes: noticias de fechas 14 de enero y 21 de enero del El proyecto (MENSAJE ) crea un Ministerio de Cultura, en el Ministerio funcionaría un Consejo Nacional de la Cultura y el Patrimonio (como órgano de “representación” de la sociedad civil), y bajo el Ministerio se crean las siguientes instituciones: el Instituto de Fomento de las Artes e Industrias Culturales y la Dirección del Patrimonio Cultural, respectivas continuadoras del CNCA y la DIBAM. 2

Reestructuraciones de servicios del Estado Entendemos que este proyecto, que materializa los afanes de reestructuración de servicios del Estado, como los casos: el IND, el ex MIDEPLAN, SERNAGEOMIN, SUBTEL, SENAME, etc., tienden a realizarse sin participación de sus trabajadores y evitando que éstos incidan en ella. Es más, como en los casos señalados, algunos proyectos de ley o la reestructuración ya hecha mediante ley vigente, como la transformación del MIDEPLAN en el Ministerio de Desarrollo Social, se hizo y hace con perjuicio a la dignidad de los trabajadores y la función pública, al reducir sus plantas, haber sufrido enorme cantidad de despidos, dejar precarizados sus puestos laborales. Dicho afán responde a una visión neoliberal de un Estado al servicio de los intereses lucrativos privados, a fin de hacerse con las áreas propias que son de interés público. La ANEF ha decidido, idea reafirmada en su última Asamblea Nacional, coordinar a todos los trabajadores de los organismos afectados, y exigir la participación y defensa de la dignidad y estabilidad de los trabajadores. En este sentido, la ANFUDIBAM desde un principio se ha unido en coordinación con los compañeros de ANFUCULTURA para enfrentar esta embestida privatizadora, creación de personas jurídicas de derecho privado dañina para los trabajadores, y seguiremos adelante en el Congreso y en todas las instancias con las autoridades, el mundo social, la opinión pública y la organización y movilización permanente de sus asociados. 3

Qué pasa con la actual DIBAM Terminaría la DIBAM y seguiría su continuadora: la Dirección del Patrimonio Cultural, que dependería del nuevo Ministerio. Las entidades fundadoras (BN, AN, los museos nacionales), pasan a un segundo plano y se siguen regulando casi de la misma manera en el DFL La organización de la continuadora de la DIBAM materializará su función a través de la Secretaría de Monumentos Nacionales y tres “sistemas” distintos: Bibliotecas Públicas, Archivos y Museos. Se crea un Fondo del Patrimonio Cultural para el financiamiento de programas, proyectos y actividades de conservación y puesta en valor de bienes patrimoniales, y documentación, investigación y difusión del patrimonio material e inmaterial. El fondo se repartirá por licitaciones públicas, concursos públicos “y otras modalidades” que establecería un reglamento. Se declara que la ley de presupuesto autorice la existencia de funcionarios a contrata con funciones directivas en un número no mayor al 7% del total de personal a contrata del Servicio. 4

POSICIÓN ANFUDIBAM Somos partidarios de un Ministerio de Cultura, que impulse la política cultural de Chile, en forma democrática y respetando la diversidad cultural. Si el gobierno no quiere darnos el espacio para debatir, vemos aquí una oportunidad, y lo haremos nosotros creando desde la sociedad civil nuestros espacios y demandaremos de la institucionalidad y el Congreso respeto a nuestras posiciones, a fin que sean consideradas en las eventuales normas futuras que se dicten y en mejores escenarios para los trabajadores. Sin embargo, tal como se plantea el proyecto, éste no garantiza los principios que se dicen proteger, teniendo en cuenta que se mezclan ambas áreas del quehacer: producción de cultura y protección del patrimonio cultural, concretándose en la realidad de un sistema neoliberal, mayor preponderancia de uno (el más lucrativo, la industria) por sobre el otro (la protección del patrimonio). Tampoco es viable este proyecto, porque no se preocupa de los trabajadores de las instituciones públicas involucradas y hay groseros guiños de privatización de las funciones públicas en estas áreas (artículo 46 del proyecto de ley orgánica del Ministerio de Cultura). Nuestra posición es de rechazo, tal como se está planteando este proyecto de ley, nacido exclusivamente de los equipos tecnocráticos del gobierno de turno. La historia de este proceso de institucionalización cultural y patrimonial, desde nuestra posición, está detalladamente documentada en nuestros medios de comunicación disponibles en la web, por lo que, a pesar de pretender ilustrar una participación activa nuestra por parte de la Dirección, ésta nunca accedió a nuestros planeamientos para generar un debate con todos los funcionarios en un encuentro institucional previo y un estudio de una ley de planta en el proyecto. No hay en el proyecto una planta funcionaria que dignifique la función pública, postergada en la DIBAM por veinte años. Las autoridades no han conversado ni ofrecido nada interesante y con seriedad de concretarse, desde el punto de vista de condiciones laborales, a la ANFUDIBAM ni al conjunto de los trabajadores de la DIBAM. 5

Cuales son las cuestiones sustantivas que hacen inviable el proyecto nacido antidemocráticamente 1. A pesar que se declara la observancia de tres principios muy loables: diversidad, participación, conservación y difusión del patrimonio cultural; estas no son viables en este proyecto, porque: – El proyecto no nació ni de la participación activa del conjunto de los trabajadores ni de los actores de la cultura y el patrimonio cultural. – No garantiza la diversidad (por ejemplo, ni los pueblos originarios ni las agrupaciones de ciudadanos extranjeros en Chile, están representados en el Consejo Nacional de la Cultura y el Patrimonio). – Participación: los miembros del Consejo de la Cultura y el Patrimonio, órgano colegiado que representaría a la sociedad civil, quienes aprueban la política que propone el ministro y ejecutan las instituciones de las respectivas áreas, son generados preponderantemente, en forma directa e indirecta, por los poderes públicos y no por la sociedad civil, protagonista y beneficiaria de nuestro patrimonio cultural. – La conservación y difusión del patrimonio cultural estaría muy influenciado con lo que los intereses económicos privados determinasen a través de las políticas de donaciones culturales, y la relación interesada con el lucro privado, al facultarse al Ministro de integrar y participar en corporaciones privadas “sin fines de lucro” (la misma receta en la municipalización de la educación en Chile). – Sin perjuicio que hay descentralización y desconcentración, aquello no garantizará la ansiada regionalización y el desarrollo desde las regiones, desde el punto de vista de la política cultural sin contar con el debido financiamiento para la puesta en marcha o la previa discusión sobre qué es lo que se quiere con una entidad así para la diversidad de las regiones y territorios en Chile. 6

continuación 2. El área del patrimonio será subsumida y menos valorada desde el nivel de la subsecretaría, por la fuerza centrípeta de la industria cultural, y ésta a su vez, por la industria del entretenimiento. 3. No aborda el proyecto, con seriedad, el área del derecho de autor y de los derechos conexos, como un área especializada de la cultura y el patrimonio cultural de un país, cuya entidad orgánica cambia de dependencia a estar bajo el alero del Ministerio, en su misma calidad de Departamento. Tampoco hay cambios de fondo en materia de monumentos nacionales, sólo orgánicamente hay cambio de dependencia del CMN que pasa a depender de la Dirección del Patrimonio (continuadora de la DIBAM). 7

continuación 4. No aborda la importancia ni se hace cargo de la necesaria modernización de las instituciones fundadoras de la DIBAM, como la BN, AN, MNHN, MHN, MNBA, en la creación y ejecución de la política del patrimonio cultural (al DFL N° 5200 se proponen muy pocos cambios de fondo y sigue casi igual que hace 83 años). 5. No aborda el tema laboral, desde el punto de vista de la estabilidad y dignificación de los trabajadores de la DIBAM y el CMN, cuestión postergada por la Dirección; quien paradójicamente ha estado de acuerdo en su discurso con que sí existen malas condiciones laborales remuneracionales en esta Institución. 8

Qué pasa con los trabajadores Se entregan al Presidente de la República amplias facultades mediante la autorización para dictar los DFL que corresponda, dentro de un año: – Fijar la fecha de término de las actuales instituciones y la fecha de funcionamiento de las nuevas: el Instituto de Fomento de las Artes y las Industrias Culturales (actual CNCA) y la Dirección del Patrimonio Cultural (actual DIBAM). – Fijar la planta del Ministerio, Instituto y Dirección, por el encasillamiento del personal del CNCA y/o de la DIBAM. Del mismo modo la Dirección del Patrimonio y el Instituto de Fomento se conformaría con personal de la DIBAM y eventualmente del CNCA. – Traspasar sin interrupción de la función, funcionarios de planta y contrata en igual grado y calidad, teniendo en cuenta el estamento y la especialización. La interrupción no estará dada por el traspaso y/o encasillamiento, pero sí podría darse por causales legales, conforme a las reglas generales (en las contratas, por ejemplo, el vencimiento del plazo anual, calificación lista 4,etc.) – La planta que fije el Presidente puede conformarse con personal de planta y contrata. En el caso de las plantas antiguas, se interpreta por nosotros y dada la experiencia de otros servicios re-estructurados, que desaparecerían si se encuentran vacantes los cargos al hacer los traspasos y encasillamientos. – La conformación de la dotación total de las nuevas instituciones se autoriza a hacerla por el Presidente sin respeto al límite en dotación del 100% de la institución: de 80% de planta y 20% de contrata. – No hay término de funciones de trabajadores, por motivo de traspasarlos y encasillarlos, ni deberían existir menores beneficios ni pérdida de antigüedad. – Una vez encasillados, la provisión de cargos en la institución se hará conforme a las reglas generales del estatuto Administrativo. – Se autoriza al Presidente para modificar el presupuesto de los servicios creados por el traspaso de fondos desde las antiguas a aquellas. 9

SÍNTESIS El proyecto de Ley no fue generado con la participación activa del conjunto de los trabajadores. Es sólo un cambio de nombre y perfeccionamiento de la posición dominante del sector económico privado, con respecto a las instituciones que generan y ejecutan la política de patrimonio cultural. Esto se relaciona con la política y proyecto en discusión en el Congreso de donaciones culturales con importantes beneficios tributarios para los contribuyentes-donantes. A pesar de la descentralización y desconcentración y regulación de las áreas sustanciales de la DIBAM, ésta no variará la relación de centralismo en el desarrollo de la política cultural-patrimonial y postergará a un segundo plano a las instituciones fundadoras, por ejemplo, a la Biblioteca Nacional de Chile que cumple este 2013, 200 años. El sector de patrimonio se verá desmedrado por la influencia de la política de industria cultural. Entrega al Presidente, como ha sido el modelo de los últimos años de otros servicios: ex MIDEPLAN, IND, etc., la determinación de las condiciones laborales de los trabajadores de las instituciones, sin posibilidad de discusión con los afectados, postergando los mejoramientos justamente reclamados, que apuntan a estabilidad en el empleo de la real dotación permanente de la DIBAM y mejoramiento sustancial de las remuneraciones de sus trabajadores, la que se vería reflejada en una ley de planta funcionaria nueva. La ANFUDIBAM convoca a una Asamblea extraordinaria a fines de mes, a fin de establecer los inmediatos pasos a seguir para responder y hacer respetar nuestra posición, intereses y derechos. La ANFUDIBAM, en estas condiciones solicita no aprobar el proyecto de ley, por los parlamentarios de ambas cámaras. 10

NO A ESTE PROYECTO DE LEY DE MINISTERIO DE CULTURA, INCOMPLETO Y ANTIDEMOCRÁTICO, QUE AUN NO HA INGRESADO AL PARLAMENTO. SÍ A UNA LEY QUE SEA FRUTO DE LOS TRABAJADORES Y LOS ACTORES DE LA CULTURA Y DEL PATRIMONIO EN BENEFICIO DE TODOS LOS SECTORES DE CHILE 11