Género Policial

Surge como género cinematográfico en la década del ´30 tal vez como reacción a la moralina reinante en la puritana sociedad estadounidense. Se transforma paulatinamente en un espacio de denuncia social y durante los ´50, en pleno apogeo del maccarthismo, un ámbito de defensa de los derechos sociales. Ligado al medio literario, especialmente a las ediciones por entregas llamadas pulp, porque se realizaban en papel barato, sin terminar de procesar. El carácter “negro” de este género remite a la perspectiva de su enfoque. Representa una mirada profunda, amarga, escéptica y desilusionada sobre la sed de poder y la corrupción ligada a él, la pasión ciega, la injusticia estructural y otras miserias humanas.

Las historias narran variados hechos delictivos, criminales y las peripecias que conllevan su esclarecimiento. Reflejan, en general, las características violentas, corruptas, oscuras del contexto social representado a partir de una cosmovisión pesimista y de cierto fatalismo. La violencia y la amenaza de muerte parecen signar constantemente el devenir de los sucesos y la conducta de los personajes. La resolución de la historia afronta, en general, circunstancias inevitables y trágicas, porque la muerte es ambas cosas.

Cine Negro Estadounidense: Dentro de esta categoría genérica imprecisa señalemos algunas clasificaciones históricas a tener en cuenta: Policial de enigma: Ligado a las novelas policiales, inglesas en general, cuyos protagonistas son investigadores que utilizan métodos intelectuales como la abducción (conjeturas espontáneas), la inducción y la deducción. Sherlock Holmes – Hércules Poirot Film Noir Francés: Relacionado con el realismo poético de la década del ´30, sus “héroes” son personas que han cometido delitos y no pueden reinsertarse en la sociedad porque las normas dominantes los expulsan de diferentes maneras. El muelle de las brumas – Le jour se lève Cine Negro Estadounidense: Sus protagonistas son ex policías devenidos detectives privados, asqueados de la corrupción policial y la connivencia criminal de la institución con las esferas del poder. Hammet – Chandler - Macdonald

Estructura Narrativa – Film Noir / Cine Negro Se basa en los tres actos clásicos, inicio – desarrollo – desenlace, no necesariamente en un orden lineal. El conflicto transita hechos “reñidos” con las normas sociales dominantes. La estructura de personajes presenta como eje al antihéroe de pasado oscuro, con personalidad y motivaciones difusas, pero con una dimensión ética distintiva y diferenciada del entorno corrupto. La presencia ineludible de la mujer fatal, quien se torna irresistible aunque inevitablemente peligrosa y poco confiable. El desenlace conlleva el esclarecimiento del hecho criminal, pero no deviene en un final “feliz” sino en la confirmación inevitable de la fatalidad pesimista.

Estrategias del Relato La distribución de la información puede conformar equívocos o “pistas falsas” en la organización del relato. Dichas pistas deben tener coherencia y nunca se dejan “sueltas” para no menguar la consistencia del relato. La focalización, el saber acerca de la historia, se alterna entre los personajes. Éstos conocen más que los espectadores y que el protagonista. El suspenso, por lo tanto, es un recurso dominante ya que genera tensión y demora en la resolución del enigma.

Los espacios donde se despliega la historia son urbanos, a veces marginales y de cierta peligrosidad. La fotografía transita claves bajas, las penumbras y el uso de fuertes contrastes. Abundan las escenas nocturnas. El uso del blanco y negro puede abordar diferentes significaciones. El sonido aporta espesor, densidad y complejidad al relato. A veces su uso no diegético añade climax y tensión. El montaje conforma la temporalidad del relato más adecuada a la historia narrada. Sus cambios de ritmo narrativo son claves en la conformación del relato.