Saber que Dios ama a sus seres creados. Sentir la confianza de que Dios ama incondicionalmente. Hacer que procuren la intimidad de esta relación.

I. La importancia de comprender el carácter y la naturaleza de Dios A.  El carácter de Dios es amor. Él ama a todas sus criaturas, aun cuando pequen. Como cristianos, ¿de qué manera se nos llama a amar aun a las personas más despreciables? B. Siendo que Dios nos amó, se anticipó a la necesidad e hizo un plan para salvarnos, antes de que fuera necesario. Cuando Dios conoció todos nuestros sucios secretitos, ¿por qué no borró directamente el planeta Tierra y comenzó de nuevo? ¿Qué nos dice esto acerca de su amor por los demás seres creados en el universo?

II. Un Dios creador (Sal. 19:1-3; Rom. 1:20, 21) A.  Dios no necesita una firma de relaciones públicas para promover su imagen. Podemos aprender mucho acerca de él por medio de la naturaleza que nos rodea (Sal. 19:1-3). ¿De qué modo usa Satanás la idea del Evolucionismo para arrojar dudas acerca del carácter y la naturaleza de Dios (Rom. 1:20, 21)? B. Pablo describe a los cristianos como criaturas recientemente creadas (2 Coro 5:17). Imagínate a Dios cuando sopló el primer aliento de vida sobre Adán. ¿Cuál sería el equivalente en nuestras vidas? ¿Cómo podemos experimentarlo? ¿Cuán a menudo necesitamos el "aliento" de Dios?

 El Dios que es vida en sí mismo es el único que puede restaurar la vida para nosotros. Él nos ama, no porque hemos ganado ese amor, sino porque él es amor en sí mismo, y sigue amándonos, a pesar de nuestro pecado. También quiere crearnos de nuevo y él es capaz de hacerlo, pues es el Creador. Como es un Dios santo, que no puede tolerar el pecado en su presencia, es capaz de santificarnos por medio de Cristo. Su conocimiento, que abarca todo, revela que el pecado no fue un accidente inesperado sino algo que él previó y para lo cual estaba preparado.

Esta semana comenzaremos nuestro estudio de la doctrina de la salvación, y lo haremos con el reconocimiento de que la fuerza impulsora de nuestra salvación es la grandeza y el amor de nuestro Dios. Nada fuera de Dios lo forzó a hacer lo que hizo por nosotros por medio de su Hijo. En cambio, es por causa de su misma naturaleza que él derramó su amor y su gracia hacia este mundo caído.

Compartimos, o esperamos compartir, varias de las características de Dios. Pero la naturaleza eterna de Dios es un aspecto que es exclusivamente de él. "Las palabras con que comienzan las Escrituras trazan un decidido contraste entre todo lo que es humano, temporal y finito, y lo que es divino, eterno e infinito" (1 CBA 219).

Dios es amor El amor es uno de esos aspectos de la naturaleza de Dios que necesitamos mucho que llegue a ser parte de nuestra naturaleza; y eso se despierta contemplando el amor de Dios por nosotros. "¡Hijos del Rey celestial! Tema para la más profunda meditación! ¡El incomparable amor de Dios para con un mundo que no lo amaba!

Dios es Creador "Así como en Génesis 1 se expone la naturaleza de la creación y el hecho de que el hombre fue originalmente formado a la imagen de Dios, así también el prólogo del Evangelio de Juan hace resaltar la naturaleza del Creador (vers. 1-4), y los medios por los cuales Dios se propuso que fuera posible la nueva creación del hombre a la imagen divina (vers. 5-14)" (5 CBA 874).

Dios es santo El servicio del Santuario estaba destinado a demostrar la naturaleza santa de Dios y sus provisiones para restaurarnos a sí mismo. "Pero el Santuario no estaba destinado a honrar al hombre, sino al Dios del cielo. Él había dado indicaciones específicas acerca de cómo debía hacerse todo. Le enseñó al pueblo que era un Ser grande y majestuoso, y que había de ser adorado con reverencia y temor" (4 TS 66).

Así como el arco iris se forma en las nubes por la combinación de la luz del sol y de la lluvia, así también el arco iris que rodea el trono representa el poder combinado de la misericordia y la justicia. No solo debe sostenerse la justicia, pues esto eclipsaría la gloria del arco iris de la promesa que está encima del trono; el hombre solo podría ver la penalidad de la ley, Si no hubiese justicia ni castigo, no habría estabilidad en el gobierno de Dios. La mezcla de juicio y misericordia es lo que hace la salvación plena y completa".-"Comentarios de Elena G. de White" (6 CBA 1.071)

Comenzamos el estudio de la expiación con la comprensión bíblica de Dios. Nuestro Dios es único. El hecho de que es un Dios triuno en sí mismo será de gran importancia en la comprensión de la expiación.

El reconocimiento de que él es amor en su misma naturaleza, proporciona la razón para salvar a los pecadores en una decisión divina, libre de intereses egoístas.

La santidad de Dios lo distingue de sus criaturas y explica su reacción contra el mal y el pecado. Pero el hecho de que él es santo, no significa que es tan absolutamente diferente que no podemos aproximamos a él.

La santidad de Dios se manifiesta en su acercamiento a sus criaturas inteligentes para santificadas. Él mora con ellos. Fue este maravilloso Dios quien, antes de la creación del mundo, decidió sacrificarse a sí mismo por la salvación de sus criaturas pecadoras.