La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

Lección 6 para el 11 de noviembre de 2017

Presentaciones similares


Presentación del tema: "Lección 6 para el 11 de noviembre de 2017"— Transcripción de la presentación:

1 Lección 6 para el 11 de noviembre de 2017
ADÁN Y JESÚS

2 En el capítulo 5 de la epístola a los romanos, Pablo se dirige al origen del mayor problema del hombre (el pecado) y su solución. ¿Cómo se introdujo el pecado en el mundo? ¿Qué solución proveyó Dios? ¿Qué le motivó a hacerlo? La justificación por la fe. Romanos 5:1-5. El amor de Dios por los pecadores. Romanos 5:6-11. La entrada del pecado. Romanos 5:12. La ley y el pecado. Romanos 5:13-14, La transgresión de Adán y el don de Dios. Romanos 5:15-19.

3 LA JUSTIFICACIÓN POR LA FE
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios” (Romanos 5:1-2) ¿Qué quiere decir que hemos sido justificados? Hemos sido declarados justos. Hombres y mujeres sin pecado, cuyas vidas están en armonía con la Ley de Dios. ¿Cómo hemos sido justificados? No por ninguna buena obra que hayamos hecho, sino por haber aceptado por la fe a Jesús. ¿Por qué mecanismo legal ha sido esto posible? Jesús pagó la culpa de nuestros pecados muriendo en la cruz. Su vida perfecta se nos acredita a nosotros. Somos justos porque Él es justo.

4 LA JUSTIFICACIÓN POR LA FE
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios” (Romanos 5:1-2) Según los versículos 3-5, ¿cómo podemos llegar a gloriarnos en la esperanza? Las tribulaciones producen paciencia Aún en el sufrimiento, el creyente conserva la fe y no pierde de vista la esperanza. La paciencia produce prueba El que pacientemente soporta las tribulaciones desarrolla un carácter aprobado. La prueba produce esperanza Al permitir que el Espíritu desarrolle en nosotros la paciencia que produce un carácter aprobado, somos afirmados en la esperanza de la salvación que Jesús pone a nuestro alcance.

5 EL AMOR DE DIOS POR LOS PECADORES
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8) ¿Cómo nos muestra Dios su amor? Dio el primer paso para la reconciliación. Murió por nosotros cuando aún éramos pecadores. Romanos 5:6-8 Él odia el pecado y, en su ira, lo destruirá completamente. Por su amor, nos ofrece ser salvos de esa ira, para no ser destruidos por nuestro pecado. Romanos 5:9 Jesús nos reconcilió por su muerte y resurrección. Porque Él vive, nosotros somos salvos. Romanos 5:10-11

6 LA ENTRADA DEL PECADO “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron” (Romanos 5:12) Dios creó al hombre para que fuera eternamente feliz en Su compañía. No hubiéramos necesitado otra muestra de amor, si el pecado no hubiera traído la muerte sobre nuestra raza. La caída de Adán, como representante de la humanidad, hizo necesario que se pusiese en marcha el plan de redención (que Dios había preparado de antemano como remedio ante una eventual caída). La muerte es la herencia que el pecado ha dejado a la raza humana. Nada podemos hacer para remediarlo, porque todos hemos pecado (Romanos 3:23).

7 LA LEY Y EL PECADO REINÓ EL PECADO REINA LA GRACIA
“Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia; para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro” (Romanos 5:20-21) REINÓ EL PECADO REINA LA GRACIA Desde Adán hasta Moisés Desde Moisés hasta el fin del pecado Antes de la ley Romanos 5:13-14 Después de la ley Romanos 5:20 Por Jesucristo Romanos 5:21 Había pecado, por tanto, había Ley (aunque no se hubiese explicado plenamente) Los hombres conocieron más plenamente en qué consiste el pecado (por tanto, el pecado abundó) Sobreabundó la gracia La Ley de Dios es eterna. Su transgresión es pecado. Dios desarrolló su Ley más plenamente en el Sinaí para que los hombres fueran conscientes de su pecado, y buscasen así la gracia que podía librarles de su condenación: Jesús, el Mesías.

8 LA TRANSGRESIÓN DE ADÁN Y EL DON DE DIOS
“Pero el don no fue como la transgresión; porque si por la transgresión de aquel uno murieron los muchos, abundaron mucho más para los muchos la gracia y el don de Dios por la gracia de un hombre, Jesucristo” (Romanos 5:15) LA TRANSGRESIÓN EL DON Como seres humanos, de Adán no recibimos nada más que la sentencia de muerte. No obstante, Cristo intervino y recorrió el terreno donde Adán cayó, soportando todas las pruebas en nombre de los seres humanos. Él redimió el desgraciado fracaso de Adán y su caída y, por consiguiente, como nuestro Sustituto, nos puso en un lugar privilegiado delante de Dios. Por lo tanto, Jesús es el “don de Dios”. La justificación no se gana. ¡Llega como un regalo! Murieron muchos (v. 15) Abundó la gracia (v. 15) Vino el juicio para condenación (v. 16) Vino para justificación (v. 16) Reinó la muerte (v. 17) Reinaremos en vida (v. 17) Vino la condenación (v. 18) Vino la justificación de vida (v. 18) Muchos fueron constituidos pecadores (v. 19) Muchos serán constituidos justos (v. 19)

9 “Únicamente mientras contemplamos el gran plan de la salvación podemos apreciar correctamente el carácter de Dios. La obra de la creación era una manifestación de su amor; pero el don de Dios para salvar a la familia culpable y arruinada, es lo único que nos revela las profundidades infinitas de la ternura y compasión divina “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”. Juan 3:16. A la par que se mantiene la ley de Dios, y se vindica su justicia, el pecador puede ser perdonado. El más inestimable don que el cielo tenía para conceder ha sido dado para que Dios “sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús”. Romanos 3:26. Por este don, los hombres son levantados de la ruina y degradación del pecado, para llegar a ser hijos de Dios” E.G.W. (Testimonios para la iglesia, tomo 5, pg. 690)


Descargar ppt "Lección 6 para el 11 de noviembre de 2017"

Presentaciones similares


Anuncios Google