Históricamente la protección social a las personas socialmente excluidas ha sido ejercida en 5 momentos: Caridad 1. Caridad 2. Beneficencia 3. Seguro Social 4. Asistencia Social Pública 5. Bienestar Social

Haciendo un recorrido por la historia veremos que: En la edad media: La atención a las personas necesitadas giraba en torno a la caridad, esta caridad era ejercida por los ciudadanos dando limosna, los municipios mediante albergues y casas de misericordia, o las organizaciones religiosas con sus hospitales eclesiásticos. En la edad moderna: Se aspira al ideal del hombre nuevo a través de la educación, la cultura, la invención, el individualismo. La ayuda a los necesitados no es un tipo de acción para ganarse el cielo, sino que la eliminación de la pobreza constituye un fin en si mismo, ya que una sociedad con mendicidad es lo más alejado del humanismo.

Tomando cuerpo la Beneficencia Pública desde los Municipios. La beneficencia supone una forma de superación de la caridad. Pero no hay que olvidar que la ´beneficencia está basada en el simple altruismo o generosidad del benefactor. … Es en la edad moderna donde se ponen las bases de una organización pública para la atención a los más pobres.

Edad Contemporánea: A partir de la Revolución Francesa, con la nueva sociedad que surge desde los principios de: igualdad, fraternidad y libertad, comienza a considerarse al marginado como un ciudadano más, con derechos y deberes. Aparece “la asistencia social”. El Estado se ocupa de los problemas de los pobres y marginados como una obligación inherente a su propia concepción y no como una tarea residual. Es una acción Benéfico – Asistencial que da respuesta a necesidades de tipo material y de primera necesidad, no intenta mejorar la situación de amplios sectores marginados de la sociedad, ni cambiar estructuras que les permitan abandonar esta marginación.

Esa filosofía no es aceptable, sin embargo sirvió para humanizar la situación de grupos marginados, aunque sin atacar las raíces de sus problemas. Es importante señalar, que este tipo de acciones palió en alguna medida el abandono y miseria que sufrían grandes sectores de la población, contextualizadas en un momento histórico, sin duda fueron importantes en su momento.

No debemos olvidar que “ese afán” de intervención de los grupos sociales dominantes sobre los marginados, constituye el fundamento que explica que la caridad, la beneficencia y la asistencia, se configurasen históricamente como instrumento de control social; esto es, como un medio más para reforzar los intereses de grupos dominantes a fin de evitar los riesgos que podrían representar los menos favorecidos.

El origen de los Seguros Sociales se encuentra en la revolución industrial del siglo XX. Ante el individualismo posesivo, surge la cuestión social y el socialismo como doctrina, que pone más acento sobre la igualdad. El Seguro Social se fundamenta en el ahorro colectivo que efectúan las mismas personas que pueden llegar a ser pobres a causa de riesgos imprevisibles (enfermedad, incapacidad laboral, desempleo, etc.) o previsibles (vejez, jubilación). El Seguro Social

Asistencia Social Pública (años 70) Es una actividad de naturaleza pública, financiada con cargo a ingresos públicos en base a principios de solidaridad, de quienes viven en una comunidad organizada, complementaria de los seguros sociales, que se realiza a favor de los económicamente débiles, no sólo los indigentes a quienes se dirige la beneficencia.

1)Insuficiencia de Recursos. 2)La pretensión de atender no sólo las necesidades básicas, sino el mantenimiento del nivel vital en cada individuo. 3)Su carácter residual y complementario respecto a los seguros sociales. 4)La gratuidad de las prestaciones, sin perjuicio de la exigencia de determinadas contraprestaciones. 5)La financiación exclusiva a cargo de los presupuestos generales del Estado. Las características que conformaban la asistencia social eran:

-A comienzos del siglo XXI se empiezan a producir cambios cualitativos importantes. -Aparecen valores de solidaridad, que cambian las diferentes formas de acción, “la caridad producía beneficencia y la solidaridad produce servicios sociales”. Este cambio de la caridad a la solidaridad, de la beneficencia a los servicios sociales es fundamental en la evolución histórica de la atención a los ciudadanos. HACIA EL ESTADO DE BIENESTAR

En esta dimensión podemos definir la solidaridad como “El reconocimiento práctico de la obligación natural que tienen los individuos y los grupos humanos de contribuir al bienestar de los que tienen que ver con ellos, especialmente de los que tienen mayor necesidad”

CARACTERÍSTICAS DEL ESTADO DE BIENESTAR Todos los ciudadanos tienen los mismos derechos a lograr un determinado estado de bienestar, por ello, cuando existen colectivos que no pueden acceder a estas cotas, ponen en marcha mecanismos correctores que tratan de solucionar esa situación. Se interviene para modificar el medio social y mejorar las condiciones de vida para determinados colectivos. Son acciones que pretenden el bienestar social, poniendo en marcha una acción transformadora de un modo sistemático y técnico.

NUESTRA EXPERIENCIA -A mediados del 2011, al iniciar nuestra gestión al frente de la Beneficencia de Arequipa, el encargo recibido del señor Alcalde, Dr. Alfredo Zegarra, era el de superar las condiciones en las que venían siendo atendidos los albergados en nuestros programas e intentar darles un contenido más humano. -Ello nos llevó a reflexionar sobre el modelo de intervención de la Beneficencia y qué resultados transformadores se obtenían y que favorecían en la mejora de esas condiciones injustas que los categorizaron como marginales.

Reconociendo nuestras limitaciones y las prácticas sociales de un modelo asistencialista, sostenido en esa perversa actitud de las Instituciones Públicas: “Dejar hacer, dejar pasar”, fuimos modelando una visión que hoy marca el rumbo de nuestra sesquicentenaria Institución: “DE LA CARIDAD AL BIENESTAR CON ENFOQUE DE DERECHOS” Es decir cómo llevamos a nuestra respuesta social a instrumentos de los derechos humanos, con sus principios de responsabilidad y rendición de cuentas; el de universalidad, no discriminación y equidad; el de procesos participativos de toma de decisiones y el reconocimiento de la interdependencia entre todos los derechos.

QUÉ MÁS ENCONTRAMOS 1.Respuestas eminentemente reactivas, partiendo que las circunstancias a la vida, a la suerte, donde creen que los demás deben ayudar, creen que las cosas salen solas, hay una dependencia emocional y económica, actitudes negativas y pesimistas, se quejan por todo, son pasivos ante los hechos y las circunstancias. 2.El desafío es ser transformadores.

Los residuos son aquellas cosas que fueron usadas y descartadas, las que tuvieron y ahora no lo tienen. La imagen de lo desechable tiene su referente primordial en la forma de vida moderna, que puso en movimiento un constante aumento de seres humanos despojados de dignidad. Una vez categorizados, nadie quiere tener que pensar más en ellas. Lo excluido ya no pertenece a lo que es; y, además lo sobrante lo hacemos invisible no mirando ni pensando en ello. Eso nos lleva a que nuestro compromiso es ampliar el rostro humano, ampliar sus capacidades para llevar, cada uno, la vida que considere deseable, promover un desarrollo humano y sostenible, donde todos se puedan sentar a la mesa y llevarse algo a la boca. ¡SER PROTAGONISTAS! DE LA INVISIBILIDAD AL PROTAGONISMO

Estas reflexiones nos llevaron a marcar el eje de este evento: 1)Una discusión sobre cómo abordar nuestra respuesta social. 2)Cómo fortalecer nuestras capacidades con el emprendimiento, la innovación en una visión empresarial.

Gracias por su atención