Diseño de interacción

El diseño de interacción es la disciplina encargada de definir cómo se utilizan los productos y servicios interactivos. Su objetivo es asegurar que los usuarios consigan realizar, de la forma más sencilla y gratificante posible, las tareas para las que se ha creado un producto.

¿Qué entendemos por productos interactivos? Aplicaciones de teléfonos celulares (apps), páginas web, programas informáticos, videojuegos… Es decir, software.

El diseñador de interacción * Trabaja para definir cómo tiene que funcionar el producto para que sea útil y usable. * Debe diseñar el producto desde el punto de vista del usuario, no desde el punto de vista técnico ni artístico. * Debe interiorizar y entender los objetivos, tareas, necesidades y deseos que los usuarios tienen cuando están usando el producto. * Se trata de diseñar una secuencia de uso que encaje con cómo piensa la persona, independientemente de cómo está trabajando internamente el computador o dispositivo que hace funcionar el producto.

Principios del diseño de interacción Contrariamente a lo que se podría pensar, los principios no se centran solamente en dispositivos tecnológicos, sino que se aplican en diversos campos como arquitectura, ingeniería, paisajismo, antropología, diseño gráfico, diseño de interiores, mercadeo digital, entre muchos otros.

Cuando se trata de productos de software, el diseñador de interacción plasma la mayor parte de su trabajo en mockups, que son representaciones esquemáticas de las pantallas.

Los elementos gráficos creados por el diseñador gráfico servirán para revestir los mock-ups creados por el diseñador de interacción.

Antes de crear un primer mockup es necesario preguntarse: ¿Qué funcionalidad es la más importante? ¿Qué funcionalidades se mostrarán como secundarias? ¿Qué funcionalidades podemos eliminar porque no aportan valor? ¿Podemos definir una manera de acceder a las distintas funcionalidades que sea consistente y no obligue al usuario a aprender cosas nuevas a cada paso? ¿Podemos usar alguna solución presente en otros productos y aceptada por la mayoría de usuarios, que haga que el proceso de aprendizaje sea más rápido? ¿Cómo aprovechamos lo que el usuario ya sabe para que cuando use nuestro producto pueda aplicar ese conocimiento? (ejemplos: el color rojo se asocia a peligro, el botón de “x” sirve para cerrar un pop-up, un ícono de una papelera se asocia con la acción de borrar…). ¿Cómo minimizamos los errores del usuario? ¿De qué manera le permitimos revertirlos cuando los cometa?

Es recomendable hacer las primeras versiones de los mockups en papel, ya que se trata del método más rápido para esbozar distintas alternativas. Una vez tenemos el mockup claro, podemos usar un programa para pasarlo al computador.

El diseño de interacción debe hacer productos pensando en las necesidades de la persona que los usará. * Un conjunto de mockups se convierten en un prototipo interactivo cuando se conectan entre sí, permitiendo la navegación. * Los prototipos interactivos simulan el funcionamiento del producto y por lo tanto, pueden testearse con usuarios reales.