Objetivos de la clase de hoy concepción del inconciente: una herida en el amor propio de Occidente introducción al concepto de inconciente un caso clínico de Freud: Isabel de R. evolución de las ideas de Freud la introspección: aplicación y valor desarrollo psíquico y neurobiológico efectos cerebrales de la psicoterapia
Contexto histórico y cultural del descubrimiento de lo inconciente durante muchos siglos, la cultura del mundo occidental se basó en la creencia sobre la superioridad del hombre, y sobre su lugar central en todos los campos del pensamiento Freud señaló tres grandes heridas infligidas al amor propio de Occidente producidas por avances científicos que, cuestionaron dicho fundamento. Desafiando a los poderes instituidos, impactaron a la cultura en sus mismas bases 1ª herida: Copérnico demostró que la Tierra no era el centro del Universo ( ), y Galileo, que el centro del sistema planetario era el Sol, y no la Tierra. Su libro, basado en observaciones con telescopio, llevó al colapso a la teoría geocéntrica. Acusado de perjurio, tuvo que desdecirse para no ser quemado en la hoguera
Contexto histórico y cultural del descubrimiento de lo inconciente 2ª herida: teoría de la evolución de Darwin afirma la ausencia de diferencias fundamentales entre el hombre y los mamíferos superiores, en elementos como el pensamiento abstracto, o la conciencia de sí mismo propone que no es necesaria la intervención de un dios para la creación del hombre, considerada una especie supuestamente superior y privilegiada, creada a su imagen y semejanza Darwin, de alguna manera, cuestionó la posición de la iglesia católica respecto del pecado original, al decir : ”no hay pecado, hay evolución de las especies. No es un pecado ser monos desnudos, es un bello proceso de miles de años”.
Contexto histórico y cultural del descubrimiento de lo inconciente 3ª herida: el concepto de inconciente implica que hay un espacio en el psiquismo del que no se tiene conciencia; no es perceptible para sí mismo, y es eficaz la existencia de lo inconciente pone en evidencia que el hombre ignora lo fundamental de sí mismo… … y también, que sus sentimientos y conductas son determinados desde ese otro espacio psíquico, del que nada sabe es decir, el ser humano no solo ignora sobre sí mismo, sino que tampoco tiene dominio sobre sí. Por el contrario, es dominado por lo que ignora de sí mismo todo esto implica un descentramiento del ser. En cierto modo, “somos sidos” por nuestro inconciente, “somos” pero solo a merced de lo inconciente de cada uno en síntesis: no estamos en nuestro propio centro, no dominamos nuestros sentimientos, nuestra manera de ser, incluyendo los gustos, tendencias, y sobre todo, nuestras conductas!
Freud y el psicoanálisis a lo largo de cuarenta años de trabajo intenso, Freud investigó y desarrolló la teoría del psicoanálisis, asó como su método. Su primer publicación psicoanalítica, fue el libro “La interpretación de los sueños”, aparecido en 1900 (tenía 44 años) se hizo internacionalmente famoso en poco tiempo: en 1909, fue invitado a dar conferencias en la Universidad Clark de Massachusetts, Estados Unidos para esa época, la difusión de su labor hizo que recibiera pacientes de muchos países, entusiasmados por la perspectiva de poder entender qué les pasaba, por qué, y aliviar sus padecimientos Freud trabajó siempre con un grupo de colegas que intercambiaban experiencias y discutían sus ideas. Distinguió siempre, el debate de las ideas aportadas por el psicoanálisis, basando su justificación en los resultados de su aplicación sin embargo, estos mismos resultados fueron sistemáticamente negados por generaciones de críticos (de los que sigue habiendo hoy muchos), como evidencia del rechazo al impacto que produjo la concepción de lo inconsciente
El descubrimiento de lo inconciente I Sigmund Freud nació en Moravia, en Se recibió de médico en Viena, se dedicó al comienzo a la investigación neurofisiológica, haciendo algunos aportes originales también se interesó en el aspecto psicológico de las enfermedades mentales. Fue a París, donde estudió con Jean Martin Charcot; se entrenó en la aplicación de la hipnosis, utilizada en ese tiempo en el tratamiento de la histeria de regreso en Viena y comenzó a atender pacientes en su consultorio, utilizando la hipnosis y el método catártico observó que la posibilidad de hablar sin censura de los síntomas, aportaba considerable alivio a sus pacientes. A partir de ello, afirmó que la asociación libre era una herramienta fundamental, como parte del método psicoterapéutico
El descubrimiento de lo inconciente II Freud sustituyó a la hipnosis y la catarsis por la asociación libre, inaugurando así la técnica psicoanalítica propiamente dicha su aplicación lo llevó a descubrir que sueños y síntomas neuróticos tienen “un sentido”, un significado, vinculado con lo que denominó impulsos inconcientes, y con elementos de la historia subjetiva del sujeto esos significados, que no son concientes, pueden ser develados por medio del psicoanálisis por primera vez, se tuvo la posibilidad de entender el psiquismo, y, especialmente, el significado de las enfermedades mentales, junto con un método terapéutico para abordarlas
El caso de Isabel de R. I 1892: Freud atiende a una joven de 24 años, que desde 1890 padecía de síntomas diagnosticados como histéricos. Como datos de la vida de su paciente Freud dio importancia la hecho de que su padre había fallecido un tiempo antes, y que su madre, que había tenido enfermedades crónicas, se había operado de los ojos Isabel tenía importantes dolores en las piernas, caminaba mal, inclinada hacia adelante, y manifestaba gran fatiga al hacerlo. No expresaba pesar, angustia o preocupación por su dolencia: parecía casi alegre, mostrando la típica “belle indifférence” de la histeria se quejaba de dolor al caminar: su hiperalgesia, de intensidad fluctuante, era sobre todo en la parte anterior de los muslos. Se irradiaba a la totalidad de las piernas, y Freud observaba que, cuando se apoyaba y descansaba, disminuía sin desaparecer al ser palpada al examen clínico, sus gestos no expresaban dolor: a Freud le parecía que expresaba, casi, cierto placer. Y que la paciente prestaba atención al dolor, pero al mismo tiempo, estaba como concentrada en alguna otra cosa en esa época, Freud utilizaba todavía la catarsis y la hipnosis como métodos terapéuticos. Apenas comenzaba a entender las características de la trama inconciente, que fue describiendo de a poco, mientras desarrollaba el nuevo método con que abordar dicha trama
Isabel de R. II según la creencia médica de la época, la histeria era constitucional; el desencadenante de la sintomatología podía ser un motivo banal cualquiera pero Freud empezó a pensar que los síntomas somáticos simbolizaban algo de la vida anímica de la paciente, a la manera en que un jeroglífico representa ideas. Es decir: que los síntomas se vinculaban con lo que la paciente espontáneamente contaba, de ella misma y de su vida se dedicó a buscar afanosamente dichas relaciones. Comenzó a utilizar el diván, pensando que sería útil para trabajar sobre el componente psíquico, favoreciendo que, al no poder mirarlo, la paciente se conectara más con ella misma y menos con él. Isabel se acostaba, y hablaba, con la consigna de hacerlo sin juzgar ni controlar lo que iba diciendo ella hubiera querido estudiar una disciplina científica y dominar el arte musical, proyectos más características de los hombres, en esa época. Desconforme con ser mujer, se rebelaba contra la idea de sacrificar sus inclinaciones para casarse su madre padecía de una afección ocular, y de estados “nerviosos” desde su infancia: ambos cuadros habían influido para que Isabel se ligase más intensamente al padre el padre desarrolló una enfermedad cardíaca por la que ya no se pudo levantar. Isabel lo cuidó hasta su muerte; dormía en la misma habitación, levantándose inclusive durante la noche para atenderlo
Isabel de R. III en esa época comenzó a padecer de dolores en la pierna derecha, y tuvo que guardar cama unos días. Pero recién dos años después, se presentó francamente su enfermedad la hermana mayor se casó con un hombre que parecía tener un futuro brillante, pero que no estaba dispuesto a proporcionarle a la suegra, las consideraciones que las hijas le habían brindado hasta ese momento. Hizo que vivieran en una ciudad lejana; para Isabel, eso aumentaba la soledad de su madre se oponía al cuñado en toda ocasión posible, mientras observaba y lamentaba la neutralidad de su hermana en el conflicto poco después se casó la segunda hermana; el nuevo cuñado estaba bien dispuesto a atender a la madre de ellas, algo que Isabel apreció mucho y la reconcilió con la idea del matrimonio. Nació un sobrino por el que tuvo preferencia; en el mismo año, la enfermedad de su madre se agravó: Isabel no se separó de ella hasta la operación poco después, las tres familias se reunieron en unas vacaciones, y a partir de ese momento, Isabel fue la enferma de todo el núcleo la segunda hermana se embarazó, pero desgraciadamente falleció por una enfermedad cardíaca, haciendo pensar que la había heredado del padre
Isabel de R. IV en una sesión, Isabel hizo una primera alusión a un hombre extraño a la familia: un joven, que la había acompañado a su casa, desde una reunión. Recordaba el diálogo y los sentimientos de atracción que sintió mientras regresaba para cuidar a su padre al llegar, encontró al padre empeorado, por lo que se hizo duros reproches. Experimentaba un choque entre el sentimiento amoroso, el dolor por el padre y las autocríticas, que le plantearon un conflicto por este choque, la representación erótica quedó expulsada, y el afecto transformado en dolor físico, según el mecanismo de una conversión ocasionada por la defensa en otra sesión, Freud consiguió que Isabel recordara algo más: que, justamente donde el muslo más le dolía, era donde su padre apoyaba la cabeza cuando le renovaba los vendajes. En la pierna izquierda, el dolor era menos intenso Freud pensó que los dolores de la pierna derecha se ligaban a recuerdos con el padre, y el de la pierna izquierda, con la hermana fallecida. Además, que se intensificaban con el recuerdo de ciertas situaciones y no de otras, además de disminuir o desaparecer al terminar de hablar y analizar lo evocado la disminución o desaparición de los síntomas evidenciaba que el método analítico, que la hacía hablar de sus conflictos, y se combinaba con una interpretación de los mismos, se mostraba eficaz, Freud pensaba que estaba en lo correcto
Isabel de R. V los silencios eran interpretados como productos de la retención de recuerdos: Freud entonces la instaba activamente, a hacer un esfuerzo y hablar de lo que le iba surgiendo los síntomas fueron disminuyendo, y aún desapareciendo, a medida que Freud relacionaba las asociaciones y la aparición de los dolores, con sentimientos y deseos que la paciente había tenido, y de los que inconscientemente se defendía porque le resultaban angustiosos. Las conversiones le evitaban el contacto emocional, y por tanto, la aparición de la angustia durante las vacaciones con la madre, las hermanas y los cuñados, en un momento en que la hermana, que no se sentía bien, descansaba, el cuñado más apreciado acompañó a Isabel en un paseo. Al recordarlo en sesión, mencionó el contraste entre la felicidad conyugal de su hermana, y su soledad días después, en un momento en que sintió el deseo ser “tan feliz como su hermana”: los dolores se intensificaron. En las sesiones, repetía “lo sola que estaba” (en alemán, la misma palabra significa “estar” y “estar de pie”) lamentaba “no haber podido avanzar” en el proyecto de que la familia recobrara su antigua felicidad, y el sentimiento de impotencia que tenía por ello durante una sesión, Isabel escuchó la voz de un hombre y creyó que se trataba de su cuñado que venía a buscarla: los dolores se intensificaron considerablemente
Isabel de R. VI poco después, esa hermana, que estaba aún embarazada, falleció por una enfermedad cardíaca algo más adelante, yendo a la casa de ella, Isabel tuvo un pensamiento fugaz: el cuñado era ahora un hombre libre, y podría casarse con ella este deseo suyo demoró en ser expresado; Freud pensó que Isabel lo sentía desde el principio, y, efectivamente, lo confirmó al poco tiempo Isabel no se animaba a decirlo, por el rechazo enérgico de dicho sentimiento, que la angustiaba, haciéndola sentirse muy culpable la defensa contra las ideas que le provocaban una angustia insoportable, derivó en dolores en las piernas, y en la dificultad en caminar. Si caminaba, sentía dolor. Se reflejaba así, la angustia frente al deseo de “avanzar en un proyecto (que se prohibía inconscientemente)”, en que sentía no poder avanzar por impotencia, reflejo ésta de la prohibición inconciente tanto los sentimientos concientes como los deseos inconcientes de Isabel fueron extensamente analizados; el tratamiento avanzó hasta lograr lo que Freud consideró una curación completa años más tarde, Freud supo que Isabel se había podido casar
Evolución de las ideas de Freud I numerosos autores habían hablado del inconciente, ya desde el siglo anterior. Pero Freud dio al concepto un sentido totalmente novedoso la experiencia del tratamiento de Isabel de R. fue, para Freud, un terreno valiosísimo, fuente de observaciones que pudo hacer gracias a intuiciones geniales. En 1892 publicó algunas ideas, que fueron dando forma a la teoría la propuesta de un “aparato” (psíquico) tiene relación con la manera de pensar de la época. También Freud pensó, durante bastante tiempo, que estaba produciendo algo nuevo, pero que formaría parte de las ciencias naturales dio una importancia fundamental a la capacidad de registro del aparato psíquico. Son huellas de los estímulos a que está expuesto, provenientes tanto del exterior, como del interior del cuerpo y del psiquismo mismo. Las experiencias no se inscriben como en una hoja en blanco, sino modificadas subjetivamente. Hoy se conocen las bases moleculares y neuronales de todos estos procesos desarrolló su teoría sobre dos ejes: 1) cuantitativo, la dinámica de la energía, y 2) cualitativo, el eje del sentido o significado
Evolución de las ideas de Freud II -a lo largo de cuarenta años de trabajo, fue modificando sus teorías y proponiendo otras cada vez más complejas, con ideas provenientes de la experiencia clínica y de su propia capacidad para elaborar hipótesis abstractas, con las que fue dando sustento al conjunto -comenzó describiendo dos instancias psíquicas, el inconciente y la conciencia (más el preconciente). Años más tarde, propuso entender al psiquismo como formado por tres instancias, con funcionamientos diferentes: Ello, Yo y Superyo. Las iremos viendo por partes, así como los dos ejes sobre los cuales desarrolló el pensamiento psicoanalítico Conceptos de energía, pulsión y deseo: - energía: Freud concibió el aparato psíquico funcionando en base a una energía proveniente del sustrato orgánico del cuerpo, igual que todos los organismos vivos - pulsión: es el nombre de esa energía, cuando es el origen de un movimiento psíquico (pulsión es “impulso”, tenemos problemas de traducción del alemán). Fuente de la pulsión: todas las células del cuerpo son fuentes pulsionales - deseo: tiene una raíz pulsional, y además, vehiculiza huellas de una experiencia infantil de placer, que le dan sentido. Es decir, resulta de impactar, la pulsión en los registros de las huellas de las experiencias vividas. Se dirige hacia un objeto en particular, deseado.
Evolución de las ideas de Freud III antes de nacer, el cerebro registra estímulos. Al nacer, es capaz de registrar sensaciones tanto placenteras como displacenteras. Freud dio una importancia central al elemento placentero o displacentero asociado a los estímulos, tanto externos como internos propuso que la búsqueda de placer y la evitación del displacer, constituye un funcionamiento principal. Se sabe ahora que la sensación de placer responde a la secreción de neurohormonas, como serotonina y endorfinas esa búsqueda es patrimonio del Yo, que se estructuró paulatinamente, sobre la base de las percepciones (veremos luego otros mecanismos de formación del Yo) registros inconcientes: son huellas de las sensaciones experimentadas, así como del objeto y órgano involucrados. Ej.: la experiencia de la mamada se inscribe cerebral y psíquicamente, con marcas ligada a la sensación (si fue placentera o displacentera), el órgano (la boca, toda la zona oral), y al objeto, que al comienzo es el pezón el aparato psíquico está movido (desde el punto de vista de la energía) por deseos inconcientes (las motivaciones), surgidos en las primeras épocas de la vida
Evolución de las ideas de Freud IV en la construcción de su teoría, Freud tomó esquemas prestados de otras ciencias, como la física (concepción del inconciente como fuerzas en conflicto). Propuso los conceptos de carga y descarga del psiquismo, según el modelo de la electricidad, vinculándolos con el placer y el displacer al aumentar la carga (intensidad de la energía), hay una producción de displacer, y en cambio, surge una sensación de placer al disminuir la carga, es decir, con la descarga. También tomó como modelo, en parte, lo que sucede en la relación sexual, en especial el intenso placer de la descarga (el orgasmo) el equilibrio de fuerzas define lo que puede hacerse conciente, y lo que no puede llegar a la conciencia. Los síntomas neuróticos (como las conversiones de Isabel) son entendidos como la evidencia de una falla en el proceso de represión básicamente, a las fuerzas provenientes del inconciente, se opone la fuerza de la represión. Es un esquema dinámico con dos polos: Ello por un lado y Yo por el otro, un conflicto entre deseo (inconciente) y represión
Evolución de las ideas de Freud V la represión es el mecanismo psíquico que rechaza (excluyéndolos de la conciencia), impulsos, deseos, pensamiento, ideas, recuerdos, etc.. No desaparecen del psiquismo: quedan en lo inconciente. Para esta formulación, alcanzan las ideas iniciales, que consideraban los el inconciente y la conciencia. Pero más adelante propuso la la teoría de las tres instancias, más rica y compleja, para explicar la dinámica del psiquismo la percepción es el eje central del Yo; la represión proviene de una interiorización de lo que vino del exterior, principalmente de los padres. El Superyo: una parte diferenciada del Yo a lo largo del desarrollo, a través de la relación con los padres y los educadores, se interiorizan prohibiciones, construidas en base a todas las experiencias de haber tomado contacto con límites. Principalmente, los que los padres impusieron los deseos tiene una base pulsional; en cambio, la represión provino de lo que se interiorizó del exterior la angustia es un afecto. Cuando se plantea un conflicto, tanto entre las instancias como con el mundo exterior, surge la llamada angustia señal, que pone en marcha la represión. Es un monto pequeño de angustia, no necesariamente se tiene conciencia del mismo el conflicto se desarrolla en ambos ejes: fuerzas (intensidades) y sentido y. Al incrementarse la intensidad de las fuerzas, surge el displacer, la angustia.
Evolución de las ideas de Freud VI algunos ejemplos: Isabel se angustiaba frente a sus propios impulsos, porque éstos chocaban entre sí, y con prohibiciones inconcientes la atracción por el joven que la acompañó al salir de la reunión, chocaba contra su devoción al padre: para ella equivalía a abandonarlo, a traicionarlo. Desear al marido de su hermana, chocaba con el amor a su propia hermana en ambos conflictos, su sentido de lo que estaba bien o mal, la hacía fácilmente sentirse culpable. Criticaba sus deseos: la fantasía de satisfacerlos la hacía sentirse “mala”, por desear algo prohibido estos conflictos entre sentimientos y lealtades, hacían que surgiera en ella la angustia que ponía en marcha la represión. En Isabel, el conflicto inconciente era derivado hacia el cuerpo, bajo la forma de parálisis motrices y dolor en otros casos, el proceso represivo puede derivar en que algún contenido, simplemente, no pueda estar en la conciencia, o bien que aparezca, pero disfrazado, en sueños, o bien en síntomas de diverso tipo, como fobias, compulsiones de diverso tipo, ideas obsesivas, etc.
Evolución de las ideas de Freud VII el yo enfrenta la presión pulsional, las circunstancias externas y su propio superyo: por todo ello, está obligado a condicionar y regular la búsqueda de satisfacción, según el equilibrio que pueda lograr el fin básico de las pulsiones, es el intento de reproducir una experiencia placentera inscripta en su registro inconciente, una satisfacción ya vivida. El Yo tiene la capacidad de orientar ese impulso en un sentido opuesto: no hacia el interior (registros de lo vivido anteriormente), sino hacia el exterior, hacia el mundo, para obtener alguna satisfacción posible (hay otras alternativas) la pulsión admite que su fin sea sustituido por otro (el que el Yo decida, por ejemplo), ya que la energía pulsional puede pasar de una a otra distinta Freud agrupó las pulsiones del modo siguiente: las de Eros o pulsión de vida, abarcando todas las que tienden a la unión, construcción o complejización. Por otro lado, las de destrucción o Tánatos o pulsión de muerte cuando ambas pulsiones, de vida y de muerte, se amalgaman, actúan unidas en proporciones variables. En muchos casos, alguna puede predominar francamente
Evolución de las ideas de Freud VIII el predominio de alguna de las dos pulsiones se evidencia en la forma de la manifestación clínica: se observan tendencias predominantemente constructivas o destructivas; en particular, autodestructivas por eso propone los ejemplos de individuos con un equilibrio de fuerzas inclinado en algún sentido: hacia una inhibición excesiva por represión, o con carencia de ella y una destructividad excesiva Freud atribuye un mínimo de agresión el acto sexual, en la medida en que es necesario retener al objeto para su consumación es necesaria cierta capacidad de destrucción para modificar el mundo externo. En esta línea teórica, las diferencias se establecen en base a las intensidades de las fuerzas, y no por su carácter (erótico y tanático), ya que ambas son parte de la constitución psíquica del ser humano ambas corrientes pulsiones se ponen límite recíprocamente. Una cierta intensidad de pulsión de muerte es indispensable para ponerle un límite a la pulsión erótica o de vida. El superyo, al constituirse, fija un monto de pulsión de muerte
Evolución de las ideas de Freud XIX el exceso de pulsión de muerte, derivará en una tendencia a autocriticarse severamente, sentirse fácilmente culpable, no permitirse satisfacciones placenteras, etc. Pero también, a tener conductas autodestructivas de tipo diverso, hasta el extremo del suicidio la energía de la pulsión de vida puede acumularse: en ese caso, se llama libido. No hay un término equivalente para la pulsión de muerte la libido inviste objetos: tanto a objetos externos a los que ama, como al mismo Yo. Es indispensable para la vida, que se distribuya en ambos campos. La investidura libidinal del propio Yo, se llama narcisismo puede acumularse preferentemente en objetos externos, o en el propio Yo. En este último caso, se habla de patología narcisística el estado de enamoramiento es una situación particular, en que el Yo se desprende de una gran parte de su libido narcisista, y la orienta hacia el objeto, que ha tomado una importancia enorme para él
Evolución de las ideas de Freud X la libido (analizada en el sentido cuantitativo) puede tener una dinámica fluida, con capacidad de desprenderse de un objeto o de una etapa del desarrollo, y ligarse a nuevos objetos y etapas entendida en el eje del sentido o significado, puede entenderse como el interés del Yo, la ligazón o la atracción hacia un objeto, o una etapa del desarrollo pero también puede tener una dinámica de fijación: no hay fluidez, no acepta cambiar de objeto (no se desprende), puede persistir así toda la vida las fijaciones de la libido, pueden derivar en organizaciones sintomáticas patológicas: las neurosis, fóbicas obsesiva, e histérica, pero también en rasgos de personalidad la libido se organiza a lo largo de cinco fases o etapas: oral, anal, fálica, etapa de latencia y genital
Cerebro y psiquismo: algunas características funcionamiento cerebral: no hay divisiones infranqueables entre sus distintas estructuras. Por ejemplo: los centros cerebrales de la alergia y de la inmunidad, están ampliamente interconectados entre ellos y con el sistema límbico todo circuito metabólico del organismo tiene algún nivel de control en el cerebro la división funcional entre organismo y psiquismo está determinada por procesos inconcientes, y es un índice de buen funcionamiento psíquico. Una adecuada capacidad de elaboración mental es esencial para su mantenimiento dicha división funcional puede ser vulnerada por estímulos traumáticos y conflictos de diversa índole.
El sistema límbico Evolutivamente: estructura muy antigua, presente ya en peces y reptiles Algunas de sus funciones: motivación vinculada con la preservación del organismo y de la especie, memoria, atención, instintos sexuales, emociones (placer, agresividad, miedo), regulación de la conducta y de la personalidad en general Conformado por varias estructuras cerebrales, elabora respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales y externos Por ejemplo, integra información genética y ambiental a través del aprendizaje, así como de nuestro medio interno con el externo, antes de realizar una conducta
Psiquismo y desarrollo neurobiológico en las primeras etapas de la vida, la madurez biológica de algunas estructuras cerebrales es mucho menor en el ser humano que en otros mamíferos. Ej.: la mielina, que rodea a los exones y participa en la conducción nerviosa, comienza su desarrollo en la etapa fetal y lo termina recién al final de la adolescencia la estructura y organización funcional del cerebro, arborización sináptica o citoarquitectura del cerebro, se desarrolla por la combinación entre influjos genéticos e influencia de estímulos ambientales (incluyendo los afectivos). Ambos factores y su particular combinación, explican lo singular de cada cerebro la estructura celular y metabólica de nuestro cerebro tiene la marca de los primeros vínculos emocionales inscripto en lo más profundo de nuestro psiquismo. Los vínculos significativos posteriores también influyen, dejando marcas tanto en el plano psicológico como en el cerebral
Neuroplasticidad, plasticidad neural o plasticidad sináptica es una propiedad de la naturaleza y funcionamiento de las neuronas, en respuesta a la influencia de los estímulos. Hace a la modulación de su percepción, tanto de los que entran como de los que salen estos procesos dejan huellas en el cerebro, a partir de las cuales se va conformando una cosmovisión. Cada cosmovisión modifica a la cosmovisión siguiente, o también, a una neurona plástica (que interviene en este tipo de procesos) el cerebro es un órgano extremadamente dinámico: está en permanente relación con el ambiente, por un lado, y con los hechos psíquicos y los actos del propio sujeto, por otro
Un efecto de la psicoterapia: cambios estructurales en el cerebro Eric Kandel, premio Nobel del año 2000, investigó en el terreno de la biología de los procesos de aprendizaje y de memoria dijo que : “ durante la primera mitad del siglo veinte, el psicoanálisis revolucionó nuestro entendimiento de la vida mental” y que “el psicoanálisis proveyó una notable serie de nuevos insights sobre los procesos mentales inconcientes, el determinismo psíquico, la sexualidad infantil, y tal vez, lo más importante de todo, sobre la irracionalidad de la motivación humana” demostró que la psicoterapia modifica los patrones genéticos, en el nivel del fenotipo
Efectos de la psicoterapia a través de neuroimágenes cuadros depresivos: estudios de neuroimágenes que comparan los cambios cerebrales, productos de la psicoterapia y psicofármacos, muestran que ambos métodos estimulan el desarrollo de la arborización sináptica el incremento de arborización sináptica con la psicoterapia, es más denso, más equilibrado, y más duradero que el correspondiente al tratamiento con psicofármacos exclusivamente todos los centros psiquiátricos de alto nivel recomiendan, como abordaje general, una combinación de ambas terapéuticas. Casi siempre son necesarias en los casos de cierta gravedad diferencias en distintas culturas médicas: proponen que uno u otro abordaje sea aplicado en primer lugar. Las culturas médicas están influenciadas por las culturas del lugar y por los intereses económicos dominantes
Indagación en lo psíquico: la introspección es un método de observación y producción de conocimiento sobre sí mismo propuesto por la Psicología: utiliza básicamente la capacidad reflexiva, para tomar conciencia de los propios estados mentales e indagar en ellos. Dicha capacidad puede desplegarse libremente, o bien estar en parte obstaculizada por conflictos, o se puede carecer totalmente de ella permite bucear en el pasado, como la introspección retrospectiva, o en el propio presente. Es parte fundamental de todo abordaje terapéutica de lo psíquico, del tratamiento psicoanalítico como de otros es fundamental para el aprendizaje de nuestra materia, ya que proponemos una formación que permita operar en el seno de los vínculos con mayor número y complejidad de recursos anímicos
Invitación a investigar en lo psíquico "... ¿por qué no, con calma y paciencia, revisar nuestros propios pensamientos y ver qué son en nosotros, en realidad, estas apariencias?” ( Platón, a. C.) para que el sujeto alcance un conocimiento sobre sus propios estados mentales, es necesario que el psiquismo realice un trabajo, cuyo motor son nuestros impulsos inconcientes. Dicho trabajo es posible solo bajo ciertas condiciones cuando no lo es, las alternativas son: la descarga directa de dichos impulsos, pero con un procesamiento demasiado escaso, (ej.; actos violentos, enfermedades psicosomáticas), o el bloqueo mental el conocimiento sobre el propio estado mental es condición necesaria para modular los estados emocionales, elaborar conflictos y controlar las conductas. A veces se logra esto, por lo menos en cierta medida, y otras veces, no se logra