La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

Tendencias y prácticas innovadoras en inclusión social. Perspectiva internacional.

Presentaciones similares


Presentación del tema: "Tendencias y prácticas innovadoras en inclusión social. Perspectiva internacional."— Transcripción de la presentación:

1 Tendencias y prácticas innovadoras en inclusión social. Perspectiva internacional

2 ¿Cómo identificar prácticas innovadoras? ¿Innovación como cambio o innovación como mejora? Las tendencias que se están produciendo no representan necesariamente una mejora, pero sí definen la dirección que globalmente están adoptando las políticas para la inclusión en nuestro entorno. En esta ponencia se presentan las que a mi juicio son las principales ideas fuerza que se están imponiendo en las políticas de inclusión, y su traducción a prestaciones o programas concretos; Aunque la propia selección implica un primer posicionamiento, no se va a hablar tanto de las tendencias, políticas o prácticas que se consideran positivas como, fundamentalmente, de las que se consideran más relevantes e influyentes, identificando sus luces y sombras.

3 ¿Cómo identificar prácticas innovadoras? Muchas de las innovaciones o novedades implican un cuestionamiento de las políticas sociales tradicionales y, desde ese punto de vista, una regresión. Se trata de una selección subjetiva y cualquiera puede pensar que ni son todas las que están ni están todas las que son. Se ha evitado también centrar la exposición en la explicación detallada de experiencias muy concretas, si no, más bien, en la identificación de las tendencias centrales y en su plasmación en programas o cambios concretos, tanto en el ámbito de las prestaciones económicas como de los programas de intervención. Más información en siis.net

4 Innovar: adaptarse a un cambio de época Crisis económica: reducción de la capacidad de gasto de las administraciones, incremento de las necesidades sociales y crisis del modelo de intervención pública, en nombre de la austeridad y la contención del déficit. Estancamiento o retroceso en las políticas sociales clásicas y, sobre todo, en otras políticas apenas esbozadas en tiempos de crecimiento (dependencia, rentas mínimas, servicios sociales, igualdad de género, infancia, etc.). Agotamiento de un modelo productivo low cost: bajos tipos de interés, bajos salarios, bajos impuestos… Poca atención a un modelo productivo basado en la sociedad del conocimiento; Incremento de la desigualdad, la pobreza y la exclusión, y, sobre todo, del precariado. Creciente cuestionamiento social de diversas políticas sociales, especialmente en el ámbito de la pobreza y la exclusión. Desarrollo de las tecnologías y de la sociedad de la información.

5 Retos para la innovación en inclusión Sostenibilidad económica y social de las políticas de inclusión; Eficacia y eficiencia, vinculando costes y resultados (hacer más con menos). Adaptación a los nuevos itinerarios vitales y a la diversidad de la población en cuanto a modelos familiares, trayectorias laborales, orígenes culturales…, y a sus demandas de autodeterminación, elección y control. Alcanzar un equilibrio razonable entre universalidad y selectividad; entre equidad intergeneracional y equidad intrageneracional. Desarrollar servicios y enfoques preventivos, en lugar de los orientados a la compensación o la rehabilitación.

6 Seis enfoques innovadores (o, cuando menos, dominantes) en el ámbito de las políticas sociales

7 Seis enfoques dominantes El modelo de inversión social El paradigma de la activación o la inclusión activa; Las demandas de autodeterminación, individualización, elección y control El papel del patrimonio en la superación de la pobreza El redescubrimiento de las redes sociales, el voluntariado y los vínculos comunitarios; El reto de la eficiencia y de la práctica basada en la evidencia.

8 1. La inversión social Un lema: “Preparar mejor que reparar”; Un lema alternativo: “Las mujeres y los niños primero”; Pretende reconciliar la protección social con la eficiencia económica y con los cambios socioeconómicos que se han producido desde los años 90: economía globalizada, sociedad del conocimiento, flexibilidad de las relaciones laborales… Se plantea también para dar respuesta a los nuevos riesgos sociales (frente a los viejos riesgos) y apuesta fundamentalmente por políticas que capacitan (frente a políticas que sólo o prioritariamente protegen); Énfasis en la prevención, en las políticas de apoyo a las familias, en la educación y el desarrollo de capital humano, la conciliación, la atención a la infancia y la inclusión laboral.

9 1. La inversión social Se trata de un paradigma estrechamente vinculado al de la inclusión activa, si bien más amplio y general; Se presenta en ocasiones como una vía intermedia entre las críticas neoliberales al EB, la tercera vía y las posiciones socialdemócratas clásicas; también como una política de la Europa del Norte, frente al inmovilismo y corporativismo de la Europa del Sur. Pretende en cualquier caso adaptarse a un cambio real, y constituye ya uno de los elementos básicos para la definición de las políticas sociales a nivel de la UE (al menos, en teoría). Pero no implica necesariamente un juego de suma no nula (win win): probablemente la aplicación de este paradigma generará ganadores y perdedores, en la medida en que implica una reorientación del gasto social.

10 1. La inversión social Ganadores: familias con hijos/as, la juventud y la infancia, los trabajadores pobres, las personas activas y/o ocupadas en general. Perdedores: personas mayores, personas que no pueden acceder al mercado de trabajo, y, en general, personas dependientes de rentas de sustitución. Una de las críticas fundamentales que recibe es la relativa al efecto Mateo y su incapacidad para evitar el crecimiento de la pobreza y la desigualdad. Otras críticas: justificación economicista frente a defensa de derechos; excesiva ambigüedad (lo que ha permitido su extensión)… No está demasiado claro que se esté avanzando en la extensión del modelo, aunque los países del Norte han avanzado en mayor medida ¿Es Euskadi un modelo de inversión social?

11 2. La inclusión activa Paradigma hegemónico en el ámbito de las políticas sociales: con una orientación u otra, se aplica en la mayor parte de los países de nuestro entorno y es la base de las políticas sociales de la UE y de los demás organismos internacionales. Existe en ese sentido un consenso político amplio a favor de ese paradigma, aunque no necesariamente un consenso académico o social a su favor. Consiste en vincular la inclusión social a la inclusión laboral y en condicionar las prestaciones económicas al cumplimiento de una serie de compromisos, fundamentalmente orientados a la inclusión laboral: “La mejor política social es facilitar un empleo a quien no lo tiene”. Un componente básico de este paradigma es el orientado a la “rentabilización del empleo” o making work pay y las llamadas in work benefits.

12 2. La inclusión activa Es dudoso que se trate realmente de un modelo radicalmente nuevo, ya que está emparentado con el tratamiento que desde la Edad Media se ha dado a los pobres en edad de trabajar. En España, no puede decirse que suponga una ruptura con un modelo previo más generoso o más amplio. Puede decirse además que el modelo de rentas mínimas tradicionalmente establecido en Euskadi, y basado en el modelo de doble derecho, ha estado muy cercano al paradigma de la activación, si bien es obvio que algunos de los cambios introducidos en los últimos tiempos han orientado aun más el sistema en ese sentido. Los modelos desarrollados en otros países de Europa, incluyendo Francia o los países del Norte, también se han basado al menos parcialmente en estas premisas.

13 2. La inclusión activa No existe un solo modelo de activación, sino enfoques muy diversos, en ocasiones contrapuestos: no se trata por tanto de aceptar o rechazar el concepto de activación, sino de definir qué modelo de activación se debe potenciar. ¿Qué críticas se le han hecho a este paradigma? Mitificación del trabajo remunerado como clave para la inclusión social: inserción laboral a cualquier precio en tiempos de precariedad; Desconsideración de otras fórmulas para la inclusión y de otras actividades socialmente productivas; De la solidaridad al contrato, de los derechos a las obligaciones; Énfasis en la responsabilidad individual y desatención de los condicionantes estructurales: despolitización de la inclusión; Énfasis excesivo en las teorías de la elección racional.

14 2. La inclusión activa A partir de esas críticas, ¿cómo desarrollar un modelo inclusivo de activación? Un modelo basado en la consideración del empleo como mecanismo esencial de inclusión social, aún en tiempos de precarización laboral. Empleo sí, pero no cualquier empleo. Concepto amplio o relativo de la empleabilidad, y no meramente individual; Reivindicación de la lógica de los derechos y las responsabilidades: “Si se invoca la ciudadanía para la defensa de los derechos, los correspondientes deberes de ciudadanía no pueden ser ignorados” (T.H. Marshall). Concepto de reciprocidad justa (S. White): doble derecho y doble compromiso; Principio de inclusión social: multicausalidad de la exclusión, modificación de las estructuras sociales y apertura a las actividades socialmente valoradas;

15 3. Elección, autodeterminación y control Aunque provienen del ámbito de la discapacidad y la dependencia, los enfoques basados en la individualización de la atención, la elección, la autodeterminación y el control por parte de las personas usuarias están teniendo una gran influencia en el conjunto de las políticas sociales. Responden a dos motivaciones diferentes, no siempre relacionadas: Adaptarse a las presiones económicas, reduciendo el coste de los servicios y la implicación de las administraciones públicas en la provisión directa de servicios, e incrementando al mismo tiempo la competencia entre proveedores. La demanda por parte de un sector de las personas usuarias de un modelo de atención menos rígido, más centrado en la persona, y orientado a la promoción de su autodeterminación y libre elección. Reivindicación del derecho a vivir de forma independiente y del empoderamiento, frente a modelos basados en la rigidez, el paternalismo y la preeminencia del criterio profesional y los modelos institucionales.

16 3. Elección, autodeterminación y control Se trata de un modelo estrechamente relacionado con el modelo social de la discapacidad, contrapuesto al modelo médico, que incide en el origen social de la discapacidad, debido a la inadaptación del entorno a las necesidades de todas las personas. Se identifica, por una parte, con la figura del asistente personal y, en nuestro entorno, con la prestación económica para la asistencia personal del sistema de atención a la dependencia. En los países de nuestro entorno (Reino Unido, Holanda, Suecia…) esta corriente se ha articulado en torno a los llamados sistemas de pago directo y a los presupuestos individuales. Su extensión es todavía muy limitada, incluso en los países donde más se ha extendido.

17 3. Elección, autodeterminación y control Ventajas: Responden a una demanda real de una parte de los usuarios y a una necesidad real de incrementar la individualización de la atención y de empoderar a las personas usuarias; Introducen una mayor flexibilidad en la atribución de servicios; Facilitan el mantenimiento en el entorno habitual y reducen el peso de la atención institucional; Riesgos: No todas las personas tienen la posibilidad de planificar, controlar o gestionar la atención que requieren; Facilita un empeoramiento de las condiciones de trabajo y atomiza la fuerza de trabajo; No siempre hay control suficiente por parte de las administraciones respecto a la cualificación de los profesionales o a la calidad de los servicios. ¿En qué medida estos modelos son aplicables al ámbito de la inclusión social?

18 4. Recapitalización de los pobres Como alternativa, o complemento, de los enfoques tradicionales (garantía de ingresos y provisión de servicios), en los países anglosajones se está desarrollando en los últimos años un tercer enfoque. El asset based welfare, que se puede traducir como bienestar basado en el patrimonio, práctica de medidas concretas para el fomento del ahorro y del acceso a bienes materiales entre la población con menores ingresos. Para sus promotores, disponer de un capital económico, inmobiliario o de cualquier otro tipo constituye una de las mejores defensas contra la pobreza y una de las mejores herramientas para salir de ella. Cameron dijo que, además de recapitalizar a los bancos, hay que recapitalizar a los pobres.

19 4. Recapitalización de los pobres El interés por estas medidas está también relacionado con la constatación de que las principales fuentes de desigualdad están relacionadas con la acumulación de patrimonio (a menudo heredado). A estas razones se añaden otras de tipo psicológico y conductual, de acuerdo con las cuales la disposición de un cierto patrimonio económico provoca un sentimiento de seguridad, de autoestima, de control y de confianza en las propias posibilidades. “Los ingresos sólo permiten mantener el consumo, mientras que el patrimonio cambia la forma en que las personas interactúan con el mundo. Con el patrimonio, las personas empiezan a pensar a largo plazo y a marcase objetivos a largo plazo”.

20 5. Redes sociales y vínculos comunitarios Se observa también un cierto redescubrimiento de los vínculos comunitarios, de la importancia del voluntariado y de los grupos de ayuda mutua. Este redescubrimiento ha venido en parte motivado por la necesidad de dar respuesta a la crisis (bancos de alimentos…) y por la posibilidad de crear plataformas interactivas que vinculan más fácilmente a personas concretas entre sí (bancos de tiempo, voluntariado persona a persona…). Existe también una tendencia creciente a la utilización del voluntariado como mecanismo para la inclusión sociolaboral, abriendo las opciones de voluntariado a personas en situación o riesgo de exclusión. Redescubrimiento de lo micro y del emprendizaje social.

21 5. Redes sociales y vínculos comunitarios Estos movimientos tienen el riesgo de entenderse como iniciativas ideológicamente sesgadas, que facilitan el recorte del Estado del Bienestar y una reprivatización del EB. Es paradigmática en ese sentido la defensa del Gobierno conservador británico de la política de Big society, en contraposición al Big Government: “Trasladar el poder y la capacidad de decisión del Estado hacia los individuos, las comunidades y la administración más cercana al ciudadano”. Implica fundamentalmente la promoción de una ciudadanía activa y del voluntariado, un nuevo énfasis en la acción local y comunitaria, y una apuesta por las redes de ayuda mutua y emprendizaje social. Es un cambio en parte retórico, y sometido a críticas incluso del tercer sector, si bien es todavía pronto para sacar conclusiones y hay elementos dignos de consideración.

22 6.Eficacia y experimentación Una tendencia transversal a todas las anteriores es el énfasis en la medición de los resultados de las intervenciones y en la búsqueda de soluciones coste efectivas. Uno de los enfoques que en ese sentido está adquiriendo un mayor protagonismo es el de la experimentación social, es decir, el desarrollo de pilotajes de amplio alcance que permitan evaluar una intervención antes de su generalización. Un segundo enfoque es el análisis de la relación coste efectividad de las intervenciones, buscando las que permiten mejorar a igual coste o mantener resultados a menor coste. Si bien todos estos enfoques no están exentos de críticas, suponen en general un requisito para la consolidación de las políticas de inclusión.

23 Algunas prácticas innovadoras (o, más bien, novedosas; o, por lo menos, recientes)

24 1. Revenu de solidarité active (RSA) Introducido en 2009, tras una breve experimentación, sustituye al ‘clásico’ RMI e integra otras prestaciones que existían con anterioridad. Responde a dos objetivos o lógicas diferentes: la lógica de la incentivación (a partir de la idea de la trampa de la inactividad) y la lógica de la complementación, frente a la de la sustitución, para adecuarse a la precariedad laboral (bajos salarios, trayectorias laborales inestables, etc.). Responde también a un estado de opinión crecientemente crítico respecto al RMI en parte de la opinión pública francesa e, incluso, entre la población desfavorecida que no accede a la RMI. Implica pasar de la idea de un ingreso mínimo a la idea de una prestación máxima.

25 1. Revenu de solidarité active (RSA) Consiste básicamente en hacer permanente y estructural el sistema de estímulos al empleo: se garantiza una prestación básica para quien carece de ingresos (475, pssh); para quien los tiene, la prestación se va reduciendo a razón de 38 céntimos por cada euro de salario, hasta desaparecer al llegar a un salario determinado (1.200 pssh, 2.200 p2h). Una persona sola con ingresos propios de 500 euros/mes recibe en torno a 285 euros adicionales de prestación. De esa forma, se suaviza el efecto diferencial, se incentiva el acceso al empleo y se compensa económicamente el empleo de bajos salarios. Al mismo tiempo, aglutina en un mismo dispositivo ‘asistidos’ y ‘trabajadores pobres’. También introduce medidas relacionadas con la atención individual, el refuerzo de los servicios de empleo, etc. Se financia con una tasa del 1,1% sobre los ingresos de capital.

26 1. Revenu de solidarité active (RSA) La valoración no es en general buena: Problemas de no acceso, especialmente en lo que se refiere a las personas que deberían acceder al complemento salarial (sólo cubre el 33% de la demanda potencial; tasa general de acceso del 70%); Riesgo de ‘abandonar a su suerte’ a las personas sin ingresos propios; la cuantía básica ha ido perdiendo poder adquisitivo real. Escasa transición del RSA básico al RSA Empleo; pero escasas entradas directas al RSA empleo. Cierta capacidad teórica de incitación al empleo, a pesar de la pérdida de los llamados derechos conexos, que se ve sin embargo claramente neutralizada por el incremento del desempleo. Problemas organizativos, debido a la necesidad de coordinar los servicios locales y de empleo, y a la inestabilidad de los trayectorias laborales, que dificulta la gestión de la ayuda. Competencia ambigua con los sistemas fiscales de protección de los bajos salarios (PPE).

27 2. El nuevo Crédito Universal británico Reforma global del sistema, unificando seis prestaciones anteriores (entre ellas, renta mínima, desempleo no contributivo, ayudas a la vivienda y desgravaciones fiscales para bajos salarios). Entra en vigor de forma progresiva en octubre. Pretende simplificar el sistema y responde a la misma lógica de activación que la RSA, aunque su funcionamiento es más complejo. La tasa de imposición es del 65%, es decir, la prestación se reduce en 35 cents. por cada euro ganado, hasta desaparecer con cierto nivel de ingresos. Determinados ingresos no computan, y se aplican ciertos topes. La cuantía básica tiene en cuenta el tamaño familiar, la edad, la discapacidad y la existencia de costes por cuidados infantiles o informales y de vivienda. Claramente orientado a la gestión telemática: internet por defecto Introduce elementos de condicionalidad más estrictos, como la realización de actividades de interés social o voluntariado, dependiendo del perfil de la persona beneficiaria. ¿Garantiza un ingreso mínimo digno?

28 Fiscalidad, RSA y Universal credit Ambos elementos tienen cierta similitud, en su funcionamiento, con el impuesto negativo e incluso con la RB. Sin embargo, se ha optado por descartar la vía fiscal: en el caso británico, el UC elimina el anterior sistema de desgravaciones fiscales reembolsables, base del sistema de compensación a los trabajadores pobres. En Francia, la PPE se ha mantenido, con una reducción del gasto, y una cierta contradicción en la existencia de dos sistemas paralelos. No se ha tenido en cuenta el importante papel que una fiscalidad más progresiva puede jugar en cuanto a la garantía de ingresos de las familias con hijos y/o con bajos salarios y los buenos resultados de los llamados tax credits. En lugar de tratar el problema de los bajos salarios desde un dispositivo general, el fiscal, se ha insertado en un dispositivo sectorial, el de la inclusión laboral o social.

29 3. Presupuestos individuales: Holanda El sistema de atención a la dependencia holandés, financiado vía cotizaciones individuales, asigna a cada persona un presupuesto individual y permite la elección entre el uso de servicios directos concertados o mediante la contratación directa de asistencia personal o domiciliaria, incluyendo el pago a un cuidador/a informal (mediante contrato). El importe de la prestación es el 75% del importe de la atención formal en centros. Los beneficiarios de la prestación suponen el 15% de los beneficiarios del seguro, es decir, el 85% recurre a servicios concertados clásicos. En 2008, el importe medio de la prestación era de 1.400 euros mensuales.

30 4. Presupuestos individuales: UK Los presupuestos individuales constituyen una apuesta central del Gobierno británico en su estrategia de personalización de la atención social. En 2012, en Inglaterra, se calcula que la mitad de los usuarios de servicios comunitarios utilizan estos presupuestos individuales y el Gobierno pretende extenderlos en mayor medida en un futuro próximo. Existen diversas formas de gestión: las más importantes son el pago directo (subvención mediante la que la persona contrata directamente los servicios que precisa; 27%) y los planes gestionados, mediante un equipo profesional que asesora a la persona y elabora un plan de atención en función del presupuesto disponible. Las evaluaciones apuntan algunos resultados positivos, si bien se critica el incremento de la burocracia, la inadecuación de estos fondos a determinados perfiles, privatización, etc.

31 5. Asistencia personal y vida independiente Gipuzkoa constituye un paradigma en el desarrollo de la prestación de asistencia personal y de los modelos de vida independiente. La AP ha sido reclamada por los defensores del modelo de vida independiente como un avance en el reconocimiento de sus derechosderechos Gipuzkoa concentra la práctica totalidad de las PAP del Estado, con más de mil prestaciones en vigor en 2012, la mayoría a personas de más de 65 años. Gasto de 9 millones en 2012, el 20% del gasto foral en SAAD. Al margen de que se trate de una prestación vinculada a la Ley de Dependencia, tiene un recorrido importante en lo que se refiere a las personas con necesidades de apoyo individual intenso (drogodependencias, salud mental…), además de su importancia conceptual, y como nicho de creación de empleo.

32 6. Cuentas de desarrollo infantil Una plasmación clara del asset based welfare son las cuentas de desarrollo infantil (child development accounts). Consisten en la dotación a los niños o jóvenes de sumas relativamente importantes que se mantienen, revalorizándose, en cuentas de ahorro hasta que se pueden dedicar al fin previsto o hasta que se cumple la mayoría de edad. Además, las aportaciones privadas se igualan por parte de la administración (euro por euro o más, en general con topes). En algunos casos, este tipo de cuentas están específicamente orientadas a cubrir gastos educativos si bien, en otros casos, el uso del dinero acumulado es libre a partir de la mayoría de edad. Se han desarrollado enfoques de este tipo en países como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Singapur o Corea.

33 6. Cuentas de desarrollo infantil Babybonus (Singapur): por un lado, 3.500 euros por nacimiento; por otro, un euro por cada euro ahorrado, con ciertos topes, para gastar en atención infantil o en formación universitaria. En Corea el programa se dirige al 50% de las familias con menores ingresos. Se añade un dólar por cada euro ahorrado, con un tope de 360 dólares mensuales. Se puede gastar después de los 18 en educación, emprendizaje, vivienda y gastos de boda. El Child Trust Fund británico consiste en una aportación de 250 libras en el nacimiento y otro tanto con siete años (el doble en los casos de menores de rentas bajas). Las familias pueden contribuir a esas cuentas con hasta 3.600 libras al año, que desgravan fiscalmente, y el dinero puede ser retirado a partir de los 18 años de edad, destinándose al uso que se estime conveniente. El programa se eliminó en 2011. Se ha propuesto, sin éxito, un fondo de este tipo para toda la UE (J. Le Grand: Euro Baby Bond).

34 7. Cuentas de desarrollo individual Especialmente en USA existen también iniciativas de este tipo dirigidas a la población adulta con pocos recursos. Se trata de iniciativas de pequeño tamaño, normalmente de ámbito estatal o local, con un funcionamiento muy similar a las de las cuentas de desarrollo local, aunque orientados a la población de bajos recursos. La aportación varía de 0,5 a 1 a 8 a 1. El programa Learn&Save, de Canadá, está orientado a facilitar el acceso a la educación de adultos. Añade 3 dólares por cada dólar ahorrado. Sometido a una rigurosa evaluación experimental, la experiencia pone de manifiesto la capacidad de ahorro de las personas pobres, si bien el programa resulta más caro que otras aproximaciones similares, debido a los costes de acompañamiento y gestión.

35 8. Alfabetización financiera Un componente importante de este tipo de programas es el asesoramiento y la formación en cuestiones financieras y de gestión económica. En esa línea, son cada vez más frecuentes los programas de alfabetización financiera. Un ejemplo interesante es la experiencia de MyBnk, que asesora a personas jóvenes en el Reino Unido en relación a cuestiones económicas y financieras y también en relación al emprendizaje empresarial y las microfinanzas. Han participado en la iniciativa más de 25.000 jóvenes.MyBnk Las actividades consisten en la creación y gestión de bancos por parte de las propias personas jóvenes, emulando el mundo real de prestamistas y prestatarios, y trabajan sobre conceptos como tasas de interés, banca ética o financiación responsable.

36 9. Prestaciones mediante tarjetas de prepago También están adquiriendo cierta importancia en algunos países las tarjetas de prepago electrónicas, actualizando la figura de los cupones de alimentos o food stamps norteamericanos. En el Reino Unido se vinculan en parte al Crédito Universal, y a la voluntad de controlar el uso de las prestaciones, restringiendo determinados usos, pero también a facilitar la gestión de los presupuestos individuales. En Italia se ha puesto en marcha una proyecto experimental, en 12 ciudades, mediante la llamada carta acquisti, cargada con entre 230 y 400 euros, para compra de alimentos y material doméstico, dirigidas a familias con hijos/as en situación de pobreza. Condicionada a la participación en un proceso de inserción.carta acquisti

37 10. Tiendas de ultramarinos sociales Con un enfoque más comunitario, las epiceries sociales francesas facilitan también el acceso de la población en situación de pobreza a productos domésticos y alimenticios. Existen al menos 500 establecimientos de este tipo en Francia, en los que las personas en situación de pobreza acceden a productos de alimentación a un 30% de su valor. Se calcula que atienden a medio millón de personas. Se ofrecen también actividades formativas en torno a la alimentación, higiene, salud, presupuestos familiares, etc. Funcionan en general a partir de una lógica comunitaria, inclusiva y de superación del asistencialismo, que les aleja del modelo clásico de los bancos de alimentos. ¿Cómo funciona una epicerie sociale? ¿Cómo funciona una epicerie sociale?

38 11. Housing first: lo primero es la vivienda El modelo de housing first se basa en la idea de que la clave para iniciar un proceso de inclusión de las personas sin hogar y en situación de exclusión social extrema es el acceso a una vivienda y a unos apoyos personalizados lo antes posible. El acceso a la vivienda se convierte en la base y en el inicio del proceso, y no en su fase final o intermedia, y cuestiona los itinerarios planteados como una escalera. Implica pasar de los recursos temporales e intermedios, de baja intensidad, hacia modelos incondicionales, estables, de alta intensidad y apoyo, en viviendas de pequeño tamaño. Pero Housing first no es housing only. Se trata de un enfoque iniciado en los Estados Unidos pero que se está aplicando progresivamente en Europa (Viena, Goterburgo, Helsinki, Copenague…).

39 11. Housing first: lo primero es la vivienda Acaba de presentarse los resultados de un estudio realizado a escala europea, en el que se comparan los resultados de cinco ciudades piloto con cinco ciudades control. Ratios de 1:4 a 1:11, disponibilidad de apoyo 24 horas, viviendas diseminadas. Tasas de retención elevadas (en ocasiones del 90%). Resultados positivos en cuanto a calidad de vida, consumos y salud mental, menos positivos en cuanto a integración social y laboral. Hay además indicios de que los programas evaluados resultan coste efectivos, en la medida en que, si bien son caros, resultan más baratos que el gasto destinado a estas personas cuando están en la calle. Lisboa: 16 euros por día y usuario en el marco del programa; frente a 18 de una noche en un albergue; las hospitalizaciones psiquiátricas pasan del 58% al 6%.

40 12. Nuevos modelos de financiación En algunos países de está desarrollando lo que llaman impact investing o inversión de impacto, para la financiación de la economía social y solidaria, mediante la que se quiere facilitar la inversión privada en este tipo de entidades, buscando tanto rendimiento económico como impacto social. Una de las fórmulas son los bonos de inversión social: en ese caso, los inversores invierten en actividades innovadoras y experimentales, y reciben de las administraciones públicas el rendimiento pactado sólo y cuando la experiencia se demuestra efectiva, de acuerdo a criterios establecidos previamente (pay for succes). Ej: si reincidencia se reduce al menos 7,5% se paga principal y dividendos, con un max. de 13% anual; si no, se pierde todo. Si bien son iniciativas cada vez más frecuentes en USA, UK o Australia, fomentadas por las administraciones, han sido también objeto de diversas críticas.USA

41 Conclusiones Una buena parte de las tendencias, prácticas y novedades presentadas pueden entenderse como un retroceso en los planteamientos clásicos del Estado del Bienestar: activación, condicionalidad, énfasis en la acumulación del patrimonio, implicación de la empresa privada… De hecho, muchas han sido promovidas por partidos de centro y centro derecha. La mayor parte de ellas incluyen elementos de interés que no deben ser desechados, y responden bien a cambios reales en el contexto socioeconómico, bien a aspiraciones de la ciudadanía o de las personas usuarias. En el contexto actual, la posición de quienes defienden un EB fuerte no debe ser meramente conservadora. Es fundamental asumir los cambios ocurridos y adaptar los servicios a los nuevos contextos sociales. En ese marco, la innovación es esencial y el margen para la innovación enorme.


Descargar ppt "Tendencias y prácticas innovadoras en inclusión social. Perspectiva internacional."

Presentaciones similares


Anuncios Google