La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

RAFAEL CANOGAR E s p a c i o s d e l a p i n t u r a.

Presentaciones similares


Presentación del tema: "RAFAEL CANOGAR E s p a c i o s d e l a p i n t u r a."— Transcripción de la presentación:

1 RAFAEL CANOGAR E s p a c i o s d e l a p i n t u r a

2 CANOGAR, DE REGRESO “Despídeme ya a mi querida patria, pues mi ánimo desea regresar” Odisea La historia de la imaginación humana está poblada de regresos imposibles. El de Gilgamesh, el de Odiseo, el de Alonso Quijano, el de Leopold Bloom, el de Ethan Edwards en Centauros del desierto; miles de otros. La imposibilidad que todos ello emblematizan no es tanto cuestión física o metafísica como biográfica: aunque consigamos volver al punto de partida, aunque aprendiésemos a revertir el tiempo, no podemos ni podríamos borrar la experiencia transcurrida; el olvido sólo restituye el lienzo en crudo de cada vida al precio de la enfermedad y la devastación. De ahí que, en quien es consciente de todo ello, la voluntad de regresar sea siempre, a la vez, otra forma de seguir adelante, de no estarse quieto, de prohibirse la inercia o la inmovilidad Cabe recordar todo esto ante la sorprendente e intensa obra que Rafael Canogar trae a Gijón en su regreso posible este, y cumplido- a Van Dyck, cuatro años después de su primera individual en la galería. Y hay que precisar que lo que sorprende en ella no es la intensidad –eso, como el espíritu viajero, ha sido una costumbre en cada una de las muchas búsquedas de este artista genéticamente inquieto- sino el modo en que el pintor ha resuelto su regreso a los territorios desde los que emprendió su viaje, hace medio siglo Y subrayo: pintor. Como él mismo deja bien claro en el expresivo texto que se incluye en este mismo catálogo, la pintura de la que Canogar partió resulta ser también la Itaca adonde desea retornar este artista, como Odiseo, errante y de multiforme ingenio. Puede que haya en su declaración una comprensible nostalgia de los orígenes, y que también se deje leer entre líneas un cierto hastío de los mestizajes, rupturas genéricas, expansiones y coyundas que el arte de vanguardia -y Canogar con él, en el tramo histórico en que le ha correspondido – ha ensayado durante el último siglo y pico.

3 En ese periodo, bajo el signo de la ansiedad exploratoria, la pintura ha salido de sí misma en busca de las tres dimensiones de lo escultórico o lo escenográfico; se ha dejado invadir por los objetos del mundo externo y acoplar prótesis y extensiones; ha disipado su aura y se ha multiplicado como cualquier otro icono de consumo; se ha evaporado o ha implosionado hasta reducirse a la inmaterialidad del concepto. Y, en algunos o quizá en todos esos procesos –me parece que es lo que quiere recordarnos Canogar- ha dejado de ser pintura y rehusado las conquistas que su generación ganó para el arte español del siglo XX. Aunque lo que en realidad cuenta para el caso, al margen de manifiestos escritos e interpretaciones posibles, es el modo en que la obra misma de Canogar declara en su propio idioma semejante voluntad de retorno al ámbito ganado trabajosamente a partir de la revolución impresionista: un territorio soberano de cualidades plásticas, formas puras, sensaciones y emociones cifradas en la materialidad autorreferencial y autosuficiente de la pintura y sus propiedades. Claro que el que vuelve lo hace cargado con las vivencias del periplo. Y quien sabe eso, como es el caso, sabe también que todo regreso es quimérico porque nuestras experiencias no sólo nos cambian, sino que cambian el pasado y nos harían unos extraños en él. Si bien es cierto que Rafael Canogar quiere hoy por hoy pintar y solo pintar, no lo es menos que su forma de hacerlo evidencia rasgos completamente inéditos en su trayectoria; rasgos que denuncian su atención hacia los distintos modos en que es posible volver a la pintura a principios del siglo XXI. No se trata, pues, de intentar un nostálgico e impostado reencuentro con el informalismo y el subsuelo profundamente español de El Paso; con las derivaciones de la abstracción lírica de raíz americana; la figuración urgida por las presiones de la historia; la radicalidad de la pintura del support-surfaces, o la mezcla de expresionismo y constructivismo con las que Canogar tensó sus cuadros en los calientes ochenta. Se trata de un reencuentro con la pintura en sí desde posiciones nuevas. Una nueva ocupación del suelo disponible de la pintura. Y un recordatorio (seguramente también un auto-recordatorio) de que ese suelo sigue ahí, abierto, autónomo, disponible para el pintor.

4 La forma que tiene Canogar de reinstalarse en ese suelo nativo se basa en la convivencia de dos elementos básicos: espacios monocromáticos, desnudos y fríos, y cremosas franjas de óleo peinado y arrastrado cuyas sensuales y azarosas mezclas de color aparecen dispuestas en horizontal o en vertical ocupando, por lo general, sólo una parte de la superficie. En la mayor parte de las ocasiones, la relación entre estos dos elementos es, respectivamente, la de fondo y figura, medio y presencia; en otras, se reparten el lienzo en un equilibrio tenso o invierten aquellos roles, de manera que la densa expresividad del óleo rastrillado se ve interrumpida a lo ancho del cuadro por vacíos de color uniforme, hiatos de silencio que recuerdan el fuerte componente constructivo de la etapa anterior del artista. Esa dialéctica se lleva a la mínima expresión –y a la máxima tensión, al borde de una espiritualidad casi mística- en los papeles con fondo negro arañados por los espectrales rastros del óleo blanco. Un fondo controlado, sobrio, cuidadosamente reducido a la uniformidad del color; una franja de pasta aplicada sobre él, con gozo y energía casi infantiles, en un largo movimiento de resultados impredecibles: tales son los componentes de la nueva síntesis que Canogar emprende en este tramo de su producción con ademanes que bien podrían evocar los de quien primero prepara disciplinada y rigurosamente el suelo para la siembra y luego, con un amplio gesto, libera y disemina las semillas en la confianza de que prosperará; semillas que en este caso, caen entre los surcos de la pasta del óleo y entre las líneas de una escritura plástica cuyo mensaje se parece bastante a un “he vuelto”; pero un “he vuelto” para edificar algo nuevo sobre el viejo y añorado terruño. Porque, como Rafael Canogar no ignora, toda Itaca está siempre, inevitablemente, en algún inalcanzable lugar del futuro. J. C. Gea Noviembre de 2010

5 Levante, 200x200 cm, óleo/lienzo

6 Doblez, 162x120 cm, óleo/DM

7 Tabla, 162x120 cm, óleo/DM

8 Basa, 162x120 cm, óleo/lienzo

9 Bastión, 80x80 cm, óleo/tabla

10 Baluarte, 146x114 cm, óleo/lienzo

11 Bastida, 80x80 cm, óleo/tabla

12 Bolada, 80x80 cm, óleo/tabla

13 Apis, 146x114 cm, óleo/lienzo

14 Umbral, 80x80 cm, óleo/tabla

15 Baranda, 100x81 cm, óleo/lienzo

16 Candela, 162x130 cm, óleo/lienzo

17 Laguna, 80x80 cm, óleo/tabla

18 Fósil, 60x75 cm, óleo y collage de papel hecho a mano sobre DM

19 Monolito, 100x81 cm, óleo y collage de papel hecho a mano sobre tabla

20 Anatomía, 81x100 cm, óleo y collage de papel hecho a mano sobre tabla

21 Bara, 60x79 cm, óleo y collage de papel hecho a mano sobre DM

22 Impresión, 70x100 cm óleo sobre pankaster

23 P-18-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

24 P-19-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

25 P-20-10, 64x83 cm, óleo/pankaster

26 P-21-10, 64x83 cm, óleo/pankaster

27 P-22-10, 64x83 cm, óleo/pankaster

28 P-23-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

29 P-24-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

30 P-25-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

31 P-26-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

32 P-27-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

33 P-28-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

34 P-29-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

35 P-30-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

36 P-31-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

37 P-32-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

38 P-33-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

39 P-34-10, 83x64 cm, óleo/pankaster

40 Cabeza, 44x33x25 cm, bronce patinado

41 Cabeza, 27,7x26x9 cm, bronce patinado

42 Mis nuevas obras, siendo afines estéticamente a mis anteriores obras, tienen una singularidad que quiero resaltar. Pero antes de seguir adelante necesito hacer un breve repaso por lo acontecido por los últimos sesenta años, porque de alguna forma ha condicionado mi trabajo. Yo entiendo que la revolución estética, a la que quiero hacer referencia, y que podríamos datar sobre los años ´50, nos llega gracias a muchas otras aportaciones anteriores, que llevó a la pintura a un espacio fundamental para entender el arte emancipado de muchas servidumbres, y el entendimiento de la pintura como entidad en si misma. Momento donde estaban claramente diferenciadas las diversas formas de crear arte: la pintura, la escultura, el diseño, la música, la fotografía, etc., y otras áreas no tan claramente aceptadas como arte, como por ejemplo la decoración y el espectáculo. Este fue el marco estructural de la pintura de los años ´50, que los artistas de vanguardia desestructuraron poco a poco, paso a paso. Los primeros años de expresionismo abstracto, o informalismo, fueron años fantásticos, con una dimensión de trasgresión e invención, al mismo tiempo que poética profundidad, como pocas veces haya ocurrido en la historia del arte, según mi opinión. Se incorporaron técnicas y dimensiones nuevas, que llevaron al arte a cotas de libertad inimaginables. Pero esa libertad, terminaría siendo una cárcel, y la salida a su crisis fue buscar nuevas fronteras todavía inéditas. Esas nuevas vanguardias derribaron todas las fronteras o límites entre las compartimentadas formas de crear arte hasta entonces. Yo mismo, por necesidades expresivas, necesité abandonar la bidimensionalidad y los materiales de la pintura. Creo innecesario hacer un resumen de la historia del arte, cuyo mapa tenemos todos delante; está claro como el artista ha ido sistemáticamente intercomunicando las diversas formas de creación, así como la incorporación de otras dimensiones como el paisaje o naturaleza con el Land-Art, o el tiempo, con el video-arte; También el concepto “arte igual a vida”, o vida igual al arte de Fluxus, Reflexión que ya estuvo presente en los setenta: recuerdo al argentino Greco, firmando gente por las calles de Madrid como obras de arte, señalándolos con un circulo de tiza alrededor, en la superficie que estuviesen pisando.

43 Hemos vivido un fascinante viaje, lleno de sorpresas, de hallazgos, de intensas vivencias y nuevos lenguajes, que ha hecho nuestro mundo mucho más rico de imágenes, a veces de pureza y otras, no menos intensas, de buscadas impurezas. Recuerdo, años atrás, la presentación de Aguilera Cerni a una exposición mía, con las figuras saliendo, en relieve, de la superficie pictórica. Cerni escribía que como alternativa al cansado o agotado lenguaje de la pintura... “Pues bien, traigo esta nota porque yo ahora quiero reivindicar la pintura, como alternativa de vanguardia, al agotado mundo de la trasgresión, sin otro fin que su propio exceso. Llevar a un perro para que muera de hambre a una galería, o a un moribundo para que termine sus días durante su exposición en una sala de arte es, a mi entender, por muy metafóricas que estas sean, también resultado de agotamientos creativos. Creo que ha tocado el momento de rescatar el espacio de la pintura, recuperar su dimensión poética y metafórica, su capacidad de ilusionarnos, de enamorarnos, de vibrar de nuevo con ese espacio virtual de la pintura, de la buena pintura. Volver unos años atrás- de verdad nunca se vuelve completamente atrás- para retomar el hilo del discurso de la pintura pura, nada más que de la pintura y su capacidad de comunicación, ¡nada más! ¡Y nada menos! Pero quizás no se trate solo de recuperar la pintura, también es la ética, lo trascendente, lo sublime: reinventar la pintura quizás. Rafael Canogar. Septiembre 2009

44 RAFAEL CANOGAR Toledo, Estudia con el pintor Daniel Vázquez Díaz Miembro fundador del grupo EL PASO Invitado como “Visiting Professor”, por el Milles Colle­ge de California, Oakland, para impartir el curso de arte Artista invitado por la institución “Tamarind Lithography Workshop” de Los Ángeles Invitado por el D.A.A.D. de Berlín como artista resi­dente, Berlín Miembro de la Junta Directiva del Círculo de Bellas Artes de Madrid, Madrid Miembro del Consejo Asesor de la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Madrid Miembro del Patronato del Museo Nacional de Arte Contemporáneo, Madrid Vocal del Consejo de Administración del Patrimonio Nacional, Madrid. PREMIOS Y DISTINCIONES 1969 Paleta de Oro en el festival Internacional de la Pintura, cagnes-Sur-Mer Gran Premio de la Bienal de Sao Paulo, Brasil El «Iberian Daily Sun», le concede el “Sol de Oro” Gran Premio de la Trienal Internacional de la Pintura, So­fía / Premio Nacional de Artes Plásticas, Madrid Chevalier L`Orde des Artes et Lettres, Francia Encomienda de la Orden de Isabel la Católica, Madrid Miembro numerario de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid. Recibe el Premio de Honor Tomislav Krizman del 2.trienal de obra gráfica en Croacia Premio Gerión del Punto de las Artes al Grupo El Paso / Doctor Honoris Causa por la U.N.E.D Medalla de Oro de la Comunidad de Castilla La Man­cha / “Hijo Predilecto de la Ciudad de Toledo” / Premio Fran­cisco Tomás Prieto Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, entregada por SSMM los Reyes el 16 de Septiembre de 2004, en Cáceres / Medalla de Oro de la Feria de Arte Contemporáneo 06 de Sevilla Premio de Cultura de la Comunidad de Madrid Premio extraordinario “Castellano-manchegos del Mun­do”, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha XVII Premio Ignazio Silote per la Cultura, Roma.

45 EXPOSICIONES INDIVIDUALES 1954 Galería Altamira, Madrid
EXPOSICIONES INDIVIDUALES Galería Altamira, Madrid Galería Fernando Fe, Madrid Galería Arnaud, París / Galleria Numero, Florencia “Rafael Canogar, Pinturas”, Sala de Exposiciones del Ateneo Barcelones, del 16 al 29 de marzo de Galleria L’Attico, Roma / Galleria Blu, Milán Galería Aujourd’hui, Bruselas Galleria L’Attico, Roma / Galerie Rive Gauche, París Galerie Aenne Abels, Colonia / “Rafael Canogar”, 353º Mostra Del Naviglio, Galería del Naviglio, Milán del 7-16 marzo 1962 / Galleria Il Cancello, Bolonia Galerie Rive Gauche, París / Galería Biosca, Madrid Galleria L’Attico, Roma Galería Juana Mordó, Madrid / Mills College Art Gallery, Oakland, California.21 nov-17 Dic Mills College Art Gallery, Oakland, California.4 abril -15 mayo / The Young Memorial Museum, San Francisco / Salle Communalli del Palazzo Constanzi, Trieste / Galleria 3, Pesca­ra, Italia Bertha Schaefer Gallery, Nueva York Galería Grises, Bilbao / Galería Juana Mordó, Madrid Silvan Simone Gallery, Los Ángeles / Deson-Zaks Gallery, Chicago / Galleria Senior, Roma / Galerie Withofs, Bruselas / Galleria San Luca, Bolonia Galerie Klang, Colonia / Galerie Poll, Berlín Istituto di Storia dell’Arte de Parma (exp. retrospectiva) / Galería Tolmo, Toledo, España Museo Español de Arte Contemporáneo, Madrid (expo antológica) / Galería Rayuela, Madrid / Silvan Simone Ga­llery, Los Ángeles / Gallería Naviglio, Milán / Gallería Poll, Berlín / Galería Punto, Valencia / Galería Adria, Barcelona / Galería Lúzaro, Bilbao Galería Alcoiart, Altea, España / Galería Juana Mordó, Madrid Galleria Bocchi, Milán / Galería Arte Contacto, Caracas / Galería Bocchi, Parma, Italia / Galerie Poll, Berlín / Galleria Grazia Bosser, Turín / Galería Rayuela, Madrid Musée d’Art Moderne de la Ville de París, París / Sonia Henie Fundation, Oslo / Lund Konstalle, Suecia / Galleria d’Art San Michele, Brescia / Pirkanpohja -75, Nykytaidetta Ähtäris­sä, Finlandia del 17 de mayo al 10 de agosto / Silvan Simone Gallery, Los Ángeles Galería Juana Mordó, Madrid / Galerie Christel, Estocol­mo / Galerie Christel, Finlandia Galerie Nordenhake, Malmo / Galerie Nordenhake-

46 E m a i l: galeria–vandyck@terra.es / F a x : 9 8 5 3 4 5 0 5 3
Menéndez Valdés, 21 33201 – Gijón Tel Casimiro Velasco, 12 33201 – Gijón Tel E m a i l: / F a x : HORARIO: Lunes a sábado: 11:30 a 14:00 h y 17:30 a 21:30 h


Descargar ppt "RAFAEL CANOGAR E s p a c i o s d e l a p i n t u r a."

Presentaciones similares


Anuncios Google