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EN LA POESÍA RENACENTISTA

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Presentación del tema: "EN LA POESÍA RENACENTISTA"— Transcripción de la presentación:

1 EN LA POESÍA RENACENTISTA
TÓPICOS LITERARIOS EN LA POESÍA RENACENTISTA En relación a la mujer: DESCRIPTIO PUELLAE CARPE DIEM COLLIGO VIRGO ROSAS DONNA ANGELICATA Para la Naturaleza: LOCUS AMOENUS BEATUS ILLE AUREA MEDIOCRITAS En relación al hombre: SAPIENTIA ET FORTITUDO Para la vida: TEMPUS FUGIT Referido a la relaciones hombre y mujer: EL DIOS NIÑO AMOR Para la muerte: UBI SUNT? SOMNIUM IMAGO MORTIS Señala y descubre un ejemplo de cada tópico

2 DESCRIPTIO PUELLAE CARPE DIEM TEMPUS FUGIT COLLIGO, VIRGO, ROSAS
En tanto que de rosa y azucena se muestra la color en vuestro gesto, y que vuestro mirar ardiente, honesto, enciende el corazón y lo refrena, y en tanto que el cabello, que en la vena del oro se escogió, con vuelo presto por el hermoso cuello blanco, enhiesto, el viento mueve, esparce y desordena: coged de vuestra alegre primavera el dulce fruto antes que el tiempo airado cubra de nieve la hermosa cumbre. Marchitará la rosa el viento helado, todo lo mudará la edad ligera por no hacer mudanza en su costumbre. Soneto XXIII , Garcilaso DESCRIPTIO PUELLAE CARPE DIEM TEMPUS FUGIT COLLIGO, VIRGO, ROSAS

3 Divina Elisa, pues agora el cielo con inmortales pies pisas y mides, y su mudanza ves, estando queda, ¿por qué de mí te olvidas y no pides que se apresure el tiempo en que este velo rompa del cuerpo y verme libre pueda,            y en la tercera rueda,            contigo mano a mano,            busquemos otro llano, busquemos otros montes y otros ríos, otros valles floridos y sombríos donde descanse y siempre pueda verte            ante los ojos míos, sin miedo y sobresalto de perderte? Égloga I, Garcilaso de la Vega DONNA ANGELICATA

4 SAPIENTIA ET FORTITUDO
"Entre las armas del sangriento Marte, do apenas hay quien su furor contraste, hurté de tiempo aquesta breve suma, tomando ora la espada, ora la pluma"... Egloga III, Garcilaso

5 Dinámene no menos artificio mostraba en la labor que había tejido, pintando a Apolo en el robusto oficio de la silvestre caza embebecido. Mudar presto le hace el ejercicio la vengativa mano de Cupido, que hizo a Apolo consumirse en lloro después que le enclavó con punta d’oro. Égloga III, Estancia 19, Garcilaso EL DIOS NIÑO AMOR

6 Corrientes aguas puras, cristalinas, árboles que os estáis mirando en ellas, verde prado de fresca sombra lleno, aves que aquí sembráis vuestras querellas, hiedra que por los árboles caminas, torciendo el paso por su verde seno:            yo me vi tan ajeno            del grave mal que siento,            que de puro contento con vuestra soledad me recreaba, donde con dulce sueño reposaba, o con el pensamiento discurría            por donde no hallaba sino memorias llenas d’alegría. Egloga I, Garcilaso LOCUS AMOENUS

7 “¡Qué descansada vida la del que huye el mundanal ruido y sigue la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido! (…)” Oda a la vida retirada, Fray Luis de León BEATUS ILLE

8 AUREA MEDIOCRITAS Aquí la envidia y mentira me tuvieron encerrado. ¡Dichoso el humilde estado del sabio que se retira de aqueste mundo malvado, y, con pobre mesa y casa, en el campo deleitoso, con sólo Dios se compasa y a solas su vida pasa, ni envidiado, ni envidioso! Fray Luis de León ¿Qué vale cuanto vee,  do nace y do se pone, el sol luciente,  lo que el Indio posee,  lo que da el claro Oriente  con todo lo que afana la vil gente?  (…) Dichoso el que se mide,  Felipe, y de la vida el gozo bueno  a sí solo lo pide,  y mira como ajeno  aquello que no está dentro en su seno.  Si resplandece el día,  si Éolo su reino turba, ensaña,  el rostro no varía  y, si la alta montaña  encima le viniere, no le daña. (…) Oda XII, A Felipe Ruiz,Fray Luis de León 

9 ¿Dó están agora aquellos claros ojos que llevaban tras sí, como colgada, mi alma, doquier que ellos se volvían? ¿Dó está la blanca mano delicada, llena de vencimientos y despojos, que de mí mis sentidos l’ofrecían?            Los cabellos que vían            con gran desprecio al oro            como a menor tesoro ¿adónde están, adónde el blanco pecho? ¿Dó la columna qu’el dorado techo con proporción graciosa sostenía? Aquesto todo agora ya s’encierra,            por desventura mía, en la escura, desierta y dura tierra. Égloga I, Garcilaso UBI SUNT?

10 SOMNIUM IMAGO MORTIS Al sueño Imagen espantosa de la muerte, sueño cruel, no turbes más mi pecho, mostrándome cortado el nudo estrecho, consuelo sólo de mi adversa suerte. (…) Lupercio Leonardo de ARGENSOLA


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