HERÁCLITO EL OSCURO Heráclito nació en Éfeso (hoy Turquía) aproximadamente en el año 500 antes de Cristo. Su familia ostentaba un cargo de autoridad hereditario, pero Heráclito lo rechazó siendo consistente con sus ideales Se dice que fue un hombre solitario, pero eso no significa que no se haya interesado por la vida en sociedad. Su filosofía nos ha llegado en forma de fragmentos, algunos atribuidos a él y otros por comentarios de autores contemporáneos y posteriores. El tema principal de la filosofía de Heráclito aborda la naturaleza del mundo desde variadas ópticas.

Naturaleza de lo que existe: Elemento original de todo lo que existe (el fuego) Para Heráclito, el fuego era el elemento básico de toda la existencia. Pero no hablaba solo de las cosas materiales, sino también de las cosas inmateriales como el alma y la vida. Consideraba además que la transformación propiciada por el fuego se daba en dos direcciones, hacia arriba y hacia abajo. Hacia arriba en forma de evaporación y hacia abajo en forma de condensación. De esta manera, intentó explicar cómo la materia pasaba de ser aire a ser agua y luego a tierra, para finalizar en fuego, en un constante ciclo de transformaciones.

En el mundo todo se mueve; nada permanece sin cambio Heráclito pensaba que todas las cosas del mundo estaban regidas por una ley o dios común a todas ellas. Dicha Razón Universal (Logos) es el referente mediante el cual se rigen los fenómenos del mundo y también debe ser la guía para el comportamiento humano, es decir, que el comportamiento y el aprendizaje de la persona debe guiarse por la razón. Como substrato y a manera de efecto del LOGOS, todas las cosas están en constante movimiento y cambio, debido al constante combate que existe entre elementos contrarios que en tanto luchan entre sí, buscan un equilibrio natural.

En las cosas (todo es uno y esa unidad incluye la diversidad En los primeros esbozos del concepto que luego se haría aceptado casi generalizadamente, Heráclito habla de la diferencia entre lo real y lo aparente. Como ejemplo refiere la evidente diversidad y multiplicidad de cosas en el mundo, pero que dicha diversidad en realidad es una apariencia, ya que todo es una sola cosa. Que a pesar del evidentemente caótico acontecer, detrás existe una armonía oculta del cosmos. Otro ejemplo de lo aparente lo da en su ya famosa frase: “En los mismos ríos ingresamos y no ingresamos, estamos y no estamos”*. Con esto, Heráclito da a entender que si bien entramos al mismo río, en realidad no es el mismo porque el agua de su afluente ya no es la misma. * Fragmentos 49a

Comparativo de la postura de Heráclito frente a la Escuela Eleática El concepto de Heráclito expresado en su frase antes citada: “En los mismos ríos ingresamos y no ingresamos, estamos y no estamos”, representó para Parménides y sus discípulos de la Escuela Eleática un total absurdo. Mientras que aquel decía: estamos y no estamos; éstos respondieron básicamente: o estamos o no estamos, pero no podemos estar y no estar al mismo tiempo. Mientras que los eleáticos consideraban que el ser era limitado y carente de antecedentes, para Heráclito el ser todo lo abarcaba y además tenía relación temporal y espacial con todo lo demás.