Los aspectos éticos de la ciencia moderna Notas de la 3ª. unidad

Los antiguos valores y los nuevos cuestionamientos Nunca como ahora se ha hecho tan explícita la estructura ética de la ciencia, y nunca ha sido tan cuestionada, al igual que la propia práctica de la ciencia. Dos corrientes han impulsado a la ciencia desde su aparición como fuerza social. Una, la motivación inconsciente, particularmente desarrollada en algunos individuos, de avanzar hacia lo desconocido, de plantear nuevos problemas; otra, la búsqueda del bienestar derivado de los productos del conocimiento

¿De quién es el conocimiento? En las antiguas culturas teocráticas, el conocimiento y los medios para adquirirlo fueron posesión sacerdotal. La transición de la verdad revelada a la indagación racional ocurrió gradualmente. Los primeros científicos en el siglo XVIII eran profundamente religiosos y sólo aspiraban a comprender con sus indagaciones, la obra divina.

¿De quién es el conocimiento? Conforme el método científico se consolidó como el procedimiento más efectivo para obtener conocimientos, los gobiernos al ser los principales financiadores de la investigación, reivindicaron la propiedad de sus productos; sin embargo, las instituciones en las que se desarrolló de modo más efectivo la búsqueda del conocimiento científico fueron las universidades, cuya autonomía fue respetada por el Estado. Así, el conocimiento mismo devino en bien público y los investigadores adquirieron una elevada presencia social como productores generosos de un insumo importante para la sociedad

¿De quién es el conocimiento? La ética de obtención de conocimientos científicos estableció entre sus normas, la libre circulación de las ideas, y los esfuerzos de gobiernos para coartarla por razones estratégicas, no siempre convincentes, provocaron confrontaciones con universitarios, cuya postura tradicional ha sido la defensa del principio de que el conocimiento científico es propiedad universal.

¿De quién es el conocimiento? En la segunda mitad del siglo XX, con el advenimiento de la sociedad industrial, surgió un nuevo propietario de conocimiento científico: la empresa. El conocimiento científico viene generando actualmente un inmenso caudal de desarrollos tecnológicos en los que se basa el funcionamiento de la sociedad. El valor agregado que el conocimiento confiere a la producción es ya reconocido como la principal fuente de riqueza en la sociedad moderna.

¿De quién es el conocimiento? Buena parte de la investigación ya no se hace en las universidades, sujeta al código ético de una institución de servicio público, sino que se genera en las propias empresas. La vinculación entre universidad y empresas se hace más variada y más íntima. La investigación científica, al tornarse lucrativa, ha experimentado un cambio similar al de la producción industrial. Ha pasado de la pequeña empresa a la gran empresa, o como señala Price, de la pequeña ciencia a la gran ciencia.

El conocimiento genera poder, y éste la corrupción El conocimiento confiere poder → el poder genera corrupción La ciencia genera conocimiento → la ciencia confiere poder La ciencia confiere poder → la ciencia genera corrupción

Producción de conocimientos en una sociedad capitalista Coexistencia de las dos formas de concebir la búsqueda del conocimiento, considerado por una parte como un bien del espíritu, y por otra como producto comercial. La producción de conocimiento tiene un costo, en lo económico y en lo social, que debe ser asumido de acuerdo a los beneficios que genere. Por otra parte, el valor social del conocimiento se ha venido acrecentando al punto de que en la actualidad es ya un lugar común el afirmar que avanzamos hacia una “sociedad del conocimiento”

Aspectos éticos de la producción de conocimientos La producción del conocimiento debe obtenerse al costo social mínimo posible, sin producir daño y es responsabilidad personal del científico obtener el conocimiento sin perjudicar a nadie. Principios: No atropellar el interés de los sujetos de estudio. No atropellar el interés de otros investigadores. No atentar contra los intereses de instituciones participantes. No atentar contra los intereses de la sociedad.

Aspectos éticos en el uso del conocimiento Usos relacionados con la tecnología bélica. Efectos nocivos sobre el ambiente y la salud humana. La biotecnología. Clonación Manipulación genética Manipulación de la conducta Inteligencia artificial

Causas de infracciones a la ética en el trabajo científico La ciencia es una actividad prestigiosa, lucrativa y penetrante. La sociedad es cada vez más exigente e informada. El aseguramiento de la observancia del código ético en la ciencia. Principios concretos: Beneficencia No maleficencia Altruismo

Perspectiva filosófica A partir de Kant se establece una división: las ciencias proceden brindando explicaciones causales (causas y efectos), pero la filosofía, y en particular la ética, ofrecen explicaciones teleológicas (medios y fines). En el siglo XIX, con el surgimiento del pensamiento positivista, la filosofía fue relegada a un segundo plano. El neopositivismo lógico afirmaron que la filosofía debía reducirse al análisis del lenguaje.

Acuerdos de Nüremberg Se estableció la necesidad de establecer criterios para saber en qué casos pueden aceptarse experimentos médicos en las personas. Los principios son los siguientes: El consentimiento voluntario del sujeto humano es absolutamente esencial. El experimento debe realizarse con la finalidad de obtener resultados benéficos para la sociedad. El diseño debe ser diseñado basándose en los resultados obtenidos mediante la experimentación previa con animales y pleno conocimiento de la historia natural de la enfermedad o problema que se estudia.

Acuerdos de Nüremberg El experimento debe conducirse de manera tal que evite todo sufrimiento y daño innecesarios, sean físicos o mentales. Ningún experimento debe realizarse cuando haya una razón para suponer que puede ocurrir la muerte o causarse daño irreparable, salvo, quizá, en aquellos experimentos donde los realizadores del mismo también sirvan como sujetos de experimentación. El grado de riesgo tomado no debe exceder nunca el determinado por la importancia humanitaria del problema que puede ser resuelto por el experimento. Se deben tomar todas las precauciones y tener facilidades óptimas para proteger de la más remota posibilidad de lesión, incapacidad o muerte al sujeto involucrado. El experimento debe ser conducido únicamente por personas científicamente calificadas. Durante el curso del experimento, el sujeto humano debe tener la libertad de poner fin a su participación.