Ciclo A Decimotercer domingo tiempo ordinario Decimotercer domingo tiempo ordinario 26 de junio de 2005
Salmo 88 Cantaré por siempre el amor de Yahvé, anunciaré tu lealtad de edad en edad. Dije: «Firme está por siempre el amor, en ellos cimentada tu lealtad. Cantaré por siempre el amor de Yahvé.
Dichoso el pueblo que sabe aclamarte, que camina, Yahvé, a la luz de tu rostro, que se alegra todo el día con tu nombre, que vive entusiasmado con tu justicia. Cantaré por siempre el amor de Yahvé.
Pues tú eres su esplendor y su fuerza, con tu ayuda nos haces poderosos; sí, de Yahvé es nuestro escudo, del Santo de Israel nuestro rey. Cantaré por siempre el amor de Yahvé.
ALELUYA 1P 2; 9 Aleluya.aleluya. Vosotros sois linaje elegido, sacerdocio real, nación santa, pueblo adquirido, para anunciar las alabanzas de Aquel que os ha llamado de las tinieblas a su admirable luz. Aleluya.
Magdala. Cerca de Cafarnaún. ( Del santo evangelio según san Mateo ) Mt 10: «El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí. El que no toma su cruz y me sigue detrás no es digno de mí. El que encuentre su vida, la perderá; y el que pierda su vida por mí, la encontrará. «Quien a vosotros recibe, a mí me recibe, y quien me recibe a mí, recibe a Aquel que me ha enviado. «Quien reciba a un profeta por ser profeta, recompensa de profeta recibirá, y quien reciba a un justo por ser justo, recompensa de justo recibirá. «Y todo aquel que dé de beber tan sólo un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños, por ser discípulo, os aseguro que no perderá su recompensa.»
PULSAR INICIO de la WEB PULSAR INICIO de la WEB Salir Padre, por ellos ruego; para que todos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado, -dice el Señor. Jn 17: 20-21