15 DE MAYO: DÍA INTERNACIONAL DE LAS FAMILIAS
La familia es el lugar donde nacemos y crecemos, encontramos protección y seguridad. Pero este proceso no es el mismo en una familia de un país desarrollado que en uno menos favorecido. Estos padecen más la pobreza, guerras o han quedado destruidas por el VIH. Esto no quiere decir que las familias de países desarrollados no tengan problemas sino que los problemas que sufren son, más bien, emocionales.
15 millones de niños menores de 15 años han perdido un padre o ambos por el SIDA, especialmente en el África subsahariana. Los niños y las niñas tienen derecho a una protección y ayuda especiales en el caso de que no tengan padre ni madre o que éstos no se encuentren con el niño o niña.
Si, por cualquier circunstancia, el niño o la niña vive en un país distinto al de sus padres, tiene derecho a entrar en el país en el que estén sus padres, o a que sus padres se reúnan con el niño o niña.
Ningún niño o niña debe ser separado de sus padres, a menos que sea por su propio bien. Todos los niños tienen derecho a mantener contacto con cualquiera de sus padres fácilmente.
Aunque hoy en día la composición de las familias varía mucho, la familia sigue siendo considerada, universalmente, como la unidad básica de la sociedad. La Organización de las Naciones Unidas reconoce y afirma la importancia de la familia como un lugar privilegiado para la educación.
UNICEF promueve entre las familias la importancia de la lactancia materna y de la vigilancia del crecimiento, y ayuda a aumentar su capacidad de tratar las enfermedades infantiles en el hogar.
La celebración del Día Internacional de las Familias es una oportunidad en todo el mundo para que las familias demuestren su solidaridad y reflexionen sobre cómo mejorar la relación entre todos sus miembros.