Si eres libre, eres responsable

Objetivos de la exposición Concienciarnos de ser más responsables con nosotros mismos y con los demás. Ayudarnos a mejorar nuestra capacidad de responsabilidad Poder entender el verdadero significado de comprometerse a hacer algo Conocer más acerca de los tipos de responsabilidad que hay

La responsabilidad; ser responsable e irresponsable La responsabilidad es un valor que está en la conciencia de una persona y que consiste en cumplir con el deber de asumir las consecuencias de nuestros actos. Una persona responsable es aquella que actúa conscientemente, teniendo en cuenta las consecuencias , y cumple con los deberes respecto de uno mismo o de los demás. Una persona irresponsable es quien sabe lo que hace pero actúa de manera compulsiva y sin prever las consecuencias.

Responsabilidad psicológica y ética La responsabilidad psicológica es aquella en la que somos responsables de las cosas que hacemos consciente y libremente. La responsabilidad ética es el cumplimiento y el conocimiento de los propios deberes y obligaciones. Cada uno es responsable de cumplir sus propios deberes.

Responsabilidad por acción y por omisión En la responsabilidad por acción, uno es responsable de las cosas que ha hecho y afrontar las consecuencias de sus actos. En la responsabilidad por omisión somos responsables de algo que no hayamos hecho si estábamos obligados a ello. Aquí tenemos una obligación moral que debemos cumplir.

Responsabilidad individual y colectiva La responsabilidad individual es en la que nuestras obligaciones son personales debido a nuestra propia acción y debemos de cumplirlas por nuestra cuenta. La responsabilidad colectiva se da en las situaciones que dependen de actos de muchas personas. Hay ciertos deberes que no solo implican a una persona y que se debe de colaborar todos juntos para cumplirlo.

¿De qué somos responsables? Somos responsables de varios aspectos: • De nosotros mismos: no debemos hacer nada que nos perjudique o nos ponga en peligro. • De las personas que nos rodean: nuestro comportamiento o nuestra forma de actuar no debe afectar a los demás ni a su dignidad. • De nuestro entorno: debemos tratar bien y cuidar las cosas y los objetos que hay a nuestro alrededor, tanto los que son nuestros como los que no.

La responsabilidad en casa En nuestra casa, debemos: • Ser amables con nuestra familia: no gritarles o insultarles y tratarles con el respeto que se merecen. • Cuidar los objetos de la casa, no romperlos ni malgastarlos. • Ayudar en las tareas domésticas, especialmente las que nos asignan y debemos realizar.

La responsabilidad en el colegio En nuestro colegio o instituto y en nuestros estudios también somos responsables de varias cosas: • Debemos tratar bien a nuestros compañeros y no pelearnos con ellos. Además, debemos tratar siempre a los demás como nos gustaría que nos trataran a nosotros. • Somos responsables de los muebles y objetos que hay en la clase, por lo que no debemos estropearlos. • Tenemos que comportarnos bien en clase y hacer los deberes y estudiar al llegar a casa.

La responsabilidad en la ciudad Mientras paseamos por la calle o vamos en coche, también somos responsables de ciertos aspectos en la ciudad: • Debemos tratar adecuadamente los bienes públicos que hay en la ciudad, ya que los hemos pagado entre todos y por tanto todos tienen derecho a disfrutarlos en buen estado. • Además, debemos respetar y cumplir las leyes y las normas de seguridad establecidas, ya que estas reglas facilitan la convivencia de todos los habitantes de la ciudad y promueven la responsabilidad.

Decálogo del buen ciudadano Un buen ciudadano es todo aquel que: 1- Es respetuoso con todas las personas. 2- Colabora en el gran proyecto común. 3- Respeta los derechos de los demás y cumple sus deberes. 4- Hace buen uso de los bienes y servicios públicos. 5- Cuida su entorno y el medio ambiente. 6- Trata bien a los animales. 7- Cumple las leyes establecidas por el poder. 8- Paga sus impuestos. 9- Respeta las normas de circulación. 10- Asume las sanciones que se le imponen en caso de que sean justas, o acude a la justicia en el caso de que no lo sean.

Fin Marta Villalba y Patricia Sanz