INTRODUCCIÓN A LA LITERATURA MEDIEVAL. 1º DE BACHILLERATO CURSO 2012/2013

Observa atentamente la imagen que va a aparecer a continuación

Se trata de un cuadro del pintor sevillano Valdés Leal llamado “In ictu oculi”, título en latín que podemos traducir como “En un abrir y cerrar de ojos”. La obra nos muestra el triunfo de la Muerte, representada como un esqueleto con una guadaña y un ataúd. Observa cómo su figura pisa el globo terráqueo, símbolo de las ambiciones del mundo. Mensaje: nada hay más poderoso que la Muerte, Todo es pasajero.

Observa cómo la Muerte apaga bruscamente la llama de la vida. Observa cómo a sus pies quedan distintos símbolos: una espada y una armadura desvencijada, representación de las armas varios libros (imagen asociada a las letras), entre ellos uno de Arquitectura, disciplina nacida del deseo humano de construir lo que acabará convertido en ruinas con el paso del Tiempo una corona, objeto que simboliza el poder político y terrenal una tiara papal, prenda relacionada con el poder religioso y espiritual (situado en lo más alto)

Esto no es una clase de Historia del Arte, pero hemos usado el cuadro de Valdés Leal porque sirve de introducción visual a la mentalidad propia de la Edad Media, el primer periodo de los tres que (junto a Renacimiento y Barroco) ocuparán nuestras clases de Literatura.

Un periodo en el que la guerra forma parte de la normalidad Un periodo en el que la guerra forma parte de la normalidad. En el caso de lo que hoy llamamos España porque la presencia musulmana (a partir de la invasión del 711) dio lugar a un proceso de Reconquista que concluye con la toma de Granada en el 1492. Además de con los árabes, los cristianos conviven con los judíos . La mezcla social genera influencias culturales.

Un periodo en el que se produce el nacimiento del castellano como lengua de cultura nacida de la evolución del latín. La mayoría de la población (analfabeta) no puede leerlo ni escribirlo. La obras literarias se difunden en principio oralmente gracias a la intervención de los juglares. Los encargados de custodiar el saber escrito serán los miembros de ordenes religiosas, que realizan copias de manuscritos en las bibliotecas de los monasterios (scriptorium). La literatura surge en este contexto con una marcada vocación didáctica, es decir, con el deseo de enseñar.

Un periodo en el que funciona una sociedad de carácter piramidal, con el Rey en la cúspide de los privilegios y una mayoría de población condenada a la servidumbre de señores feudales, a las hambrunas, a las epidemias y a unas condiciones de vida cuya dureza resulta difícil imaginar hoy (la esperanza de vida no superaba los 40 años).

Un periodo en el que una visión teocéntrica de la existencia ordena el planteamiento existencial de los individuos: el mundo terrenal no es más que una difícil travesía hace el destino verdadero del ser humano, la Otra Vida. Todas las acciones mundanas deben ir encaminadas a la salvación del alma para ganarse el derecho a una existencia verdadera. La literatura medieval está llena de referencias religiosas.

La primera gran obra de nuestras letras, el Cantar de Mio Cid, ejemplifica los rasgos de la literatura medieval que han sido apuntados, en tanto que es una obra de guerras (contra los moros) transmitida oralmente, una obra que nos muestra la injusticia cometida por el poder real con el noble vasallo, una obra en la que todo gira en torno a la caída y recuperación del héroe, Rodrigo Díaz, el Cid Campeador.

La obra original se conserva en un manuscrito custodiado en la Biblioteca Nacional. Ese manuscrito es el principio de la literatura en español, ese manuscrito será nuestro punto de partida.