Inmunidad de trasplante El trasplante es un tratamiento médico complejo. Permite que órganos, tejidos o células de una persona puedan reemplazar órganos, tejidos o células enfermos de otra persona. En algunos casos esta acción sirve para salvarle la vida, en otros para mejorar la calidad de vida o ambas cosas.
TIPOS DE TRASPLANTES Autotrasplante Cuando el donador y receptor son el mismo individuo. Se utiliza fundamentalmente en caso de tejidos: piel Isotrasplante Cuando donador y receptor son gemelos idénticos. En este caso ambos individuos son genéticamente idénticos y se evita totalmente el problema del rechazo. homotrasplante Cuando donador y receptor son individuos de una misma especie no genéticamente idénticos. Este es el tipo de trasplante más común de células, tejidos y órganos entre humanos. trasplante heterólogo Cuando donador y receptor son de especies distintas. Ejemplo de esto es la utilización de válvulas cardíacas porcinas (válvulas cardíacas de cerdo) en humanos.
Causas El sistema inmunitario de su cuerpo generalmente lo protege de sustancias que pueden ser nocivas tales como microorganismos, toxinas y, algunas veces, células cancerígenas.(antígenos) Cuando una persona recibe un órgano de alguien más durante una cirugía de trasplante, el sistema inmunitario de la persona puede reconocer que es extraño. Esto se debe a que el sistema inmunitario de la persona detecta que los antígenos en las células del órgano son diferentes o no son compatibles. Los órganos que no son compatibles o que no tienen una compatibilidad lo suficientemente cercana pueden desencadenar una reacción a una transfusión de sangre o un rechazo al trasplante. La cotización del tejido garantiza que el órgano o tejido sea lo más parecido posible a los tejidos del receptor. La compatibilidad generalmente no es perfecta. No existen dos personas, exceptuando los gemelos idénticos, que tengan antígenos de tejido idénticos. Los médicos emplean medicamentos para inhibir el sistema inmunitario del receptor. El objetivo es impedir que dicho sistema ataque al órgano recientemente trasplantado cuando la compatibilidad de dicho órgano no es cercana. Si estos medicamentos no se utilizan, el cuerpo casi siempre lanzará una respuesta inmunitaria y destruirá el tejido extraño. Sin embargo, se presentan algunas excepciones. Los trasplantes de córnea en pocas ocasiones sufren un rechazo debido a que esta parte carece de riego sanguíneo. Además, los trasplantes entre gemelos idénticos casi nunca causan rechazo.
Tipo de donante Donante vivo En este caso el donante sigue vivo luego de la donación, que puede ser de un fluido, tejido renovable o células (ejemplo, sangre, piel, médula ósea), de un órgano (ejemplo, riñón) o parte de un órgano que tiene capacidad de regeneración (ejemplo, hígado). Donante cadavérico En este caso el donante es un individuo fallecido en muerte encefálica, en el cual los órganos a trasplantar son mantenidos con vida hasta el trasplante mediante técnicas de ventilación artificial y drogas específicas para ello, que permiten que el corazón siga latiendo e irrigando los órganos a ser trasplantados. Recientemente se han empezado a realizar trasplantes de individuos fallecidos y en paro cardíaco, con la finalidad de aumentar el índice de donantes, pero dado los problemas inherentes a dicha técnica, la mayoría de los donantes cadavéricos son individuos en muerte encefálica. Un solo donante al fallecer puede beneficiar a varios receptores.
Hay tres tipos de rechazo: El rechazo hiperagudo ocurre unos pocos minutos después del trasplante cuando los antígenos son completamente incompatibles. El tejido se debe retirar enseguida para que el receptor no muera. Este tipo de rechazo se observa cuando a un receptor se le da el tipo de sangre equivocado. Por ejemplo, cuando una persona recibe sangre tipo A cuando es tipo B. El rechazo agudo puede ocurrir en cualquier momento desde la primera semana después del trasplante hasta 3 meses después. Todos los receptores tienen algún grado de rechazo agudo. El rechazo crónico puede suceder durante muchos años. La respuesta inmunitaria constante del cuerpo contra el nuevo órgano lentamente daña los tejidos u órgano trasplantados.
El rechazo de a los injertos manifiesta especificidad y memoria La tasa de rechazo de los injertos varia de acuerdo con el tejido en cuestión. En general, los injertos de piel se rechazan con más rapidez que otros, como los de riñón y corazón.
Si un ratón de la cepa A recibe piel de la cepa B, tiene lugar el rechazo primario del injerto, conocido como rechazo de primera intención. La piel se revasculariza en primer lugar entre los tres y siete días; conforme se desarrolla la reacción, el trasplante vascularizado se infiltra con linfocitos, monocitos, neutrófilos y otras células inflamatorias.
Se pone de manifiesto la memoria inmunológica cuando se transfiere un segundo injerto de la cepa B a un ratón de la cepa A que recibió con anterioridad el primero. En este caso se desarrolla con mas prontitud una reacción de rechazo del injerto y éste es completo en plazo de cinco a seis días; esta respuesta secundaria se conoce como rechazo de segunda intención.
Las células T desempeñan una función clave en el rechazo de los aloinjertos Los linfocitos, no así el Ac, podían transferir inmunidad contra injertos. Estudios posteriores incluyeron a las células T en el rechazo. La respuesta se desencadena principalmente por el reconocimiento de las moleculas presentadoras de antigenos MHC, antigenos leucocitarios humano(HLA) extrañas o antígenos. En el reconocimiento de MHC, los linfocitos T reconocen fuertemente las diferencias de los antigenos HLA. Aproximadamente un 1-2% de los linfocitos T de un ser humano pueden reconocer un solo MHC génico. Es decir, un unico antígeno puede activar un 1-2% de todos los linfocitos T reconocen nada más 1 MHC génico. La suma de reconocimientos incrementa el rechazo. Mas de un 10% implica rechazo, un injerto totalmemnte incompatible.
Tenemos que poner otro conecto Los linfocitos T CD4+ cooperadores se diferencian en celulas efectoras productoras de citocinas que hieren a los injertos a traves de una inflamacion controlada por citocinas, similar a una reaccion de hipersensibilidad retrasada. Los linfocitos T CD8+ reactivos se diferencian en CTLs, que matan celulas nucleadas del injerto que expresa las moleculas alógenas del MHC I. Los CTLs tambien secretan citocinas inflamatorias, que pueden contribuir a la lesion del injerto.
Antígenos del complejo mayor de histocompatibilidad (MHC)
1. CD8(+) citotóxicos que reconocen antígenos en asociación con HLA clase I. 2. CD4(+) que reconocen antígenos en asociación con HLA clase II. El significado biológico del sistema HLA es especialmente relevante en la respuesta inmune del trasplante, debido a que los antígenos extraños (también fragmentos de HLA distintos) son reconocidos por el linfocito T sólo cuando son presentados en asociación con las moléculas de HLA propias. Los antígenos clase II están relacionados con el reconocimiento inicial y los clase I en el donante son los blancos primarios de la respuesta celular. Cuando se efectúa un trasplante se están introduciendo en el receptor células del donante con antígenos de histocompatibilidad distintos a los del receptor. Las células presentadoras de antígenos (CPA) del órgano donado, muy probablemente células dendríticas, presentan sus HLA de clase II junto con los péptidos antigénicos correspondientes y ello es reconocido como extraño por los linfocitos T CD4 + del receptor que continuamente están circulando por el organismo. Hay también evidencia de que las propias CPA del huésped pueden procesar Ags del donante y presentarlo con sus propias moléculas HLA de clase II e incluso de que las células T pueden reconocer directamente los HLA clase I y clase II extraños
Sistema de HLA El "antígeno leucocitario humano" es un conjunto de moléculas implicadas en el reconocimiento inmunológico y en la señalización entre células del sistema inmunitario. Las formas en que son transmitidas de padres a hijos constituyen un sistema también denominado de complejo principal de histocompatibilidad o de la individualidad, el denominado sistema HLA. Existen lugares estratégicos en el sistema HLA que sirven para examinar si una persona puede ser compatible con otra en caso de injerto: HLA-A, HLA- B, HLA-C, HLA-DR y HLA-DQ. El tipo de molécula antígeno presente en A, B, C, DR y DQ es lo que determina la posibilidad de aceptación del tejido de un donante por el organismo de un receptor.
Sistema HLA MadrePadre Haplotipo aHaplotipo bHaplotipo cHaplotipo d Hijos Combinación 1Combinación 2Combinación 3Combinación 4 Genotipo a-cGenotipo a-dGenotipo b-dGenotipo b-c
Compatibilidad tenemos que entnder Para que dos personas sean compatibles los antígenos presentes en cada uno de esos lugares deben ser idénticos o tener ciertas coincidencias. Esto se detecta a través de un análisis de sangre en el que la muestra es sometida a varias técnicas de laboratorio y puede incluir el análisis de ácido desoxirribonucleico (ADN). Si se presta atención a esta gran cantidad de variedades, se puede tener una idea del alto número de combinaciones que son posibles; y, por lo tanto, lo difícil que resulta que ellas sean coincidentes. El ADN se hereda de los padres en una combinación que es peculiar para cada hijo.hereda Es este perfil —o huella genética— el que debe coincidir en los lugares estratégicos para que dos tejidos se acepten. En el sistema HLA, el material genético se transmite de padres a hijos según lo explica el esquema que se muestra a continuación:
PRUEBAS REQUERIDAS PARA EL TRASPLANTE EN HUMANOS Antes de proceder a realizar un trasplante debe valorarse la compatibilidad antigénica entre el receptor y el donante, con la finalidad de optimizar la supervivencia del injerto y minimizar posibles reacciones inmunológicas. De principio tenemos: 1. Determinación del grupo sanguíneo ABO/Rh. 2. Tipificación de los antígenos HLA clase I – clase II. 3. Realización de pruebas cruzadas linfocitarias. 4. Monitoreo y detección de anticuerpos anti–HLA mediante un panel de linfocitos o antígenos HLA purificados.