“Pero es necesario que el obispo sea…” Requisitos negativos

Introducción En esta serie de lecciones nos hemos centrado en los términos usados para describir la obra y el carácter de estos varones. La lección pasada estudiamos los requisitos positivos, es decir, lo que debe ser un anciano; y hoy veremos los negativos, es decir, lo que no debe ser un anciano.

Tenemos dos listados de requisitos ¿Cómo los consideramos? Requisitos para obispos en 1 Timoteo 3:1-7 Requisitos para ancianos en Tito 1:5-9

El patrón de las sanas palabras es armónico (2 Tim. 1:13). Se predica lo mismo en todas partes y en todas las iglesias (1 Cor. 4:17; 7:17). El patrón de las sanas palabras es armónico (2 Tim. 1:13).

Enseñanzas paralelas Cantar Ef. 5:19 Col. 3:16 Cónyuges Ef. 5:22-33 Hijos Ef. 6:1-3 Col. 3:20 Crianza Ef. 6:4 Col. 3:21 Siervos Ef. 6:5-8 Col. 3:22 Patrones Ef. 6:9 Col. 4:1 Ancianos 1 Tim. 3:4 Tito 1:6

Hoy veremos los requisitos negativos, aquello que los ancianos no deben ser. Estos requisitos negativos también son requeridos de todos los cristianos

1 Timoteo 3:1-7 “1Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea. 2Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar; 3no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; 4que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad 5(pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?); 6no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 7También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo” 

Tito 1:5-9 “5Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé; 6el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía. 7Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, 8sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo, 9retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen”

REQUISITOS NEGATIVOS NO DADO AL VINO NO PENDENCIERO No dado al vino (gr. “me paraoinon”): Literalmente, “no al lado del vino”, es decir, libre de la influencia del alcohol. No pendenciero (gr. “me plektes”): Literalmente, “no peleador”, es decir, no violento, agresivo, contencioso. No codicioso de ganancias deshonestas (gr. “me aiscrokerdes”): Literalmente, “no ávido de ganancias vergonzosas”, es decir, que no procura la ganancia sórdida, mal venida. NO DADO AL VINO NO PENDENCIERO NO CODICIOSO DE GANANCIAS DESHONESTAS

REQUISITOS NEGATIVOS NO AVARO NO NEÓFITO… No avaro (gr. “afhilarguros”): Literalmente, “libre del amor al dinero”, es decir, que no sea un desvergonzado codicioso. No un neófito (gr. “me neofutos”): Literalmente, “no una nueva planta”, es decir, no un recién plantado. NO AVARO NO NEÓFITO…

REQUISITOS NEGATIVOS NO SOBERBIO NO IRACUNDO No soberbio (gr. “me audsádes”): Literalmente, “no autocomplaciente”, es decir, no un presuntuoso, contumaz, soberbio, terco, arrogante. No iracundo (gr. “me orgílos”): Literalmente, “no propenso a la ira”, es decir, no irascible, irritable, enojadizo, arrrebatado. NO SOBERBIO NO IRACUNDO

Conclusión Muchas veces en la hermandad se pregunta, “¿es casado?”, “¿tiene hijos fieles?”, sin hacer una mayor consideración del carácter y habilidades. Debiéramos también preguntar, “¿qué clase de persona es él?”, “¿podrá ser capaz de pastorear el rebaño?”.

Plan de Salvación Rom. 10:17, Oír la palabra de Dios. Jn. 8:24, Creer en Cristo. Hech. 2:38, Arrepentimiento. Rom. 10:10, Confesar la fe en Cristo. Mar. 16:16, Bautismo para el perdón de los pecados. Col. 1:21-23, Perseverar en la fe. Hech. 8:22, Arrepentirse si ha caído, rogar el perdón. 1 Jn. 1:9, Confesar el pecado.