8a Semana Arquidiocesana de Catequesis Miércoles 20 de mayo de 2009
A pesar de la lluvia en algunos puntos de nuestra Ciudad, iniciamos la jornada con mucho entusiasmo y participación.
La sagrada escritura en la estructuración de la vida cristiana
La lectura de la Sagrada Escritura en la Iglesia ha pasado por distintos momentos: desde una lectura frecuente en la comunidad (siglos I-XII); pasando por algunas restricciones debido a su correcta interpretación (siglos XII l XVII); hasta la completa prohibición de su lectura popular (derivada del conflicto con la Reforma protestante: siglos XVI-XX); hasta llegar a una revaloración de su importancia para la vida de la comunidad (Vaticano II-actualidad).
El acceso directo a la Sagrada Escritura se dio a partir del concilio Vaticano II 1962-1965 (Constitución Dei Verbum), donde se retoman los siguientes aspectos: Los estudios bíblicos para llevar a todos los bautizados a ser Apóstoles de la Palabra por tanto acotoles de Cristo pues Él está presente en su Palabra. Directa relación con la Liturgia, que celebrada en la comunidad ofrece el alimento del cuerpo y Sangre de Cristo, y el alimento de su Palabra, que dará normas de vida. Necesidad de acercamiento: Promoviendo la lectura personal y comunitaria, para vivir el diálogo con Dios.
Para un correcto desarrollo de estas áreas las exigencias son: Se tenga fácil acceso a la Sagrada Escritura Que su lectura sea en el seno de la Iglesia y a la luz del Espíritu Santo - Lectura Cristocéntrica y actualizada
¡A ponerle ritmo…!
La sagrada escritura desde la catequesis: en la formación de los catequistas y en la puesta en práctica con los interlocutores
La Palabra de Dios debe ser alimento y norma para cada uno de nosotros. Los catequistas debemos convertirnos en verdaderos lectores y oyentes de la Palabra, de lo contrario, seremos predicadores vacíos.
La catequesis será más auténtica tanto cuanto más lea la Biblia y la interpreta con el corazón de la Iglesia. En la Iglesia: Se cita con mucha frecuencia a la Biblia; Se usa regularmente la Biblia; Se interpreta poco a la Sagrada Escritura; Casi nunca se catequiza con la Sagrada Escritura.
La catequesis será más catequesis en tanto que sea más bíblica. Es necesario que la catequesis propicie una espiritualidad más bíblica, es decir, más cristiana y menos doctrinal. La catequesis será más catequesis en tanto que sea más bíblica. No son nuestros criterios los que transmitimos, sino los de Cristo y su Evangelio. Debemos procurar, como Jesús, la libertad y la felicidad de nuestros hermanos.
Exigencias para la catequesis: 1. Propiciar en nuestros interlocutores un contacto privilegiado con el Jesucristo de los Evangelios. 2. Es indispensable una catequesis que permita y ayude a pensar cristianamente = tomar decisiones personales iluminadas por la Palabra. 3. A la luz de la Sagrada Escritura, evaluar nuestro ministerio. Dejarnos cuestionar por la Palabra (cuidarnos del Poder, de la irresponsabilidad y de la buena reputación).
¡¡Hay que dejarnos empapar y sumergir en la Palabra de Dios!! Al final de la jornada, después de la oración, todos regresamos a casa, no sin un poco de contingencia en la salida debido a la lluvia que nos acompañaría hasta nuestros hogares. ¡¡Hay que dejarnos empapar y sumergir en la Palabra de Dios!!