6. Del discurso a la propuesta 1. Por qué una propuesta social 2. La propuesta social de la Iglesia 3. El diálogo intercultural 4.El diálogo interreligioso 5. Una lectura teológica de la historia

Del discurso a la propuesta Centesimus annus 57 (también Oadv 42): “Para la Iglesia el mensaje social del evangelio no debe considerarse como una teoría, sino, por encima de todo, un fundamento y estímulo para la acción”. Es necesario definir mejor las líneas de fondo y motivaciones, para que la DSI sea operativa.

1. Por qué una propuesta social ¿En qué medida es necesaria y posible una propuesta social desde el Evangelio hoy? Si se carece de un proyecto común de sociedad cimentado sobre valores éticos comunmente compartidos, ninguna ingeniería política será resolutiva (los fines no son subsumibles en los medios). El fin de la ideologías (totalitarismos) ha dejado vía libre al “relativismo ético”: la eliminación en la convivencia civil de cualquier punto seguro de referencia moral (VS 101). La indigencia social de nuestro tiempo es el vacío de valores y modelos que aunen y tensionen con entusiasmo nuestras sociedades. Tenemos una crisis profunda de esperanza.

2. La “propuesta social” de la Iglesia Tertio millenio adveniente 52: “A la crisis de civilización hay que responder con la civilización del amor, fundada sobre valores universales de paz, solidaridad, justicia y libertad, que encuentran en Cristo su plena realización”. Llegado el fin de la cristiandad (histórica y teológicamente), la Iglesia no duda de que esta propuesta solo podrá realizarla a través de un leal diálogo intercultural e interreligioso. Necesitamos emprender un camino común de encuentro, diálogo y profetismo continuo con todos los hombres de buena voluntad.

Hacia una civilización del amor CDS 575-583 N 578: Dios ofrece la posibilidad real de superar el mal y de alcanzar el bien. N 579: La esperanza cristiana confiere una fuerte determinación al compromiso en el campo social, infundiendo confianza en la posibilidad de construir un mundo mejor,.... Las motivaciones religiosas de este compromiso pueden no ser compartidas; pero, las convicciones morales, que se derivan de ellas, constituyen un punto de encuentro entre los cristianos y todos los hombres de buena voluntad.

3. El diálogo intercultural Es imprescindible el diálogo crítico con la cultura dominante del mundo globalizado (cultura laica). Nos alienta la conciencia de que el hombre es incapaz de adherirse al puro error: detrás de cada error siempre se esconde un alma más grande.Siempre es posible recorrer un camino común hacia la verdad. Cualquier cultura es un esfuerzo de reflexión sobre el misterio del mundo y del hombre... El núcleo de toda cultura está constituido por su aproximación al más grande de los misterios: el misterio de Dios (Juan Pablo II, Discurso ante la ONU 1995). Es la vía abierta por Pacem in terris, Eclesiam suam, y seguida por el magisterio posterior . En el diálogo la Iglesia no solo enseña, sino que escucha y recibe (GS 44 y 92).

Diálogo y criterios en CDS El servicio a la política (565-574) N 569 Democracia, discernimiento y diálogo, criterios fundamentales: Distinción y conexión entre orden legal y orden moral. Fidelidad a la propia identidad y disponibilidad al diálogo con todos. Triple fidelidad en el compromiso social A los valores naturales (respeto de la legítima autonomía de las realidades temporales). A los valores morales implícitos en los problemas sociales y políticos. A los valores sobrenaturales, el espíritu del Evangelio.

4. Diálogo interreligioso Vaticano II, Nostra aetate, necesidad del diálogo y colaboración con los seguidores de otras religiones: “olvidando lo pasado, procuren y promuevan unidos la justicia social, los bienes morales, la paz y la libertad para todos los hombres.” (n 3). Juan Pablo II, Centesimus annus: “las religiones tendrán hoy y mañana una función eminente para la conservación de la paz y para la construcción de una sociedad digna del hombre.” (n 60).

Diálogo ecuménico e interreligioso en CDS Acción pastoral en el ámbito social (521- 540) Promover el diálogo (534-537) 535. La doctrina social es terreno fecundo para el diálogo y la colaboración en el campo ecuménico. 536. En la común tradición del Antiguo Testamento con los hermanos hebreos. 537. La doctrina social se caracteriza por una llamada constante al diálogo entre todos los creyentes de las religiones del mundo... con el espíritu de los Encuentros de oración que se realizaron en Asís (1986 y 2002).

5. Una lectura teológica de la historia Según S. Juan Pablo II, el diálogo intercultural e interreligioso no es simplemente un “método” o una “táctica” pastoral: “Forma parte de la misión evangelizadora de la Iglesia” (RM 55) “La Iglesia no ve contraste entre el anuncio de Cristo y el diálogo interreligioso; por el contrario siente la necesidad de compaginarlos en el marco de su misión ad gentes” (RM 55). Hoy se impone una Nueva Evangelización: vuelven de algún modo los tiempos apostólicos.