DOMINGO XIII Tiempo Ordinario - C “Los zorros tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza”. BARTHIMEUS, Instituto para el Progreso Humano.

ORACIÓN COLECTA DE LA MISA DEL DOMINGO XIII "Padre de bondad, que por la gracia de la adopción nos has hecho hijos de la luz, concédenos vivir fuera de las tinieblas del error y permanecer siempre en el esplendor de la verdad".  

“Tú, Señor, eres la parte de mi herencia” Salmo (15)

Lc 9, 51-62 “Cuando ya se acercaba el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en un pueblo de Samaria para prepararle alojamiento.

El discípulo es un caminante, tras las huellas de Jesús. Jesús es el Camino. El discípulo es un caminante, tras las huellas de Jesús. Colinas de Samaria

Pero no lo recibieron porque se dirigía a Jerusalén Pero no lo recibieron porque se dirigía a Jerusalén. Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron : Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?

Su fe era despreciada por los judíos de Jerusalén, Los samaritanos eran un pueblo de origen judío, de una zona conquistada por los asirios, 722 a.C. Y habían asimilado costumbres y cultos paganos. Su fe era despreciada por los judíos de Jerusalén, que los consideraban paganos. Construyeron su propio templo en el monte Garizim. No iban al templo de Jerusalén La hostilidad era grande entre los dos pueblos. Por eso la reacción y pregunta de Santiago y Juan, a los que –por su carácter- Jesús había denominado “los hijos del trueno”.

Él se volvió y los regañó. Y se fueron a otro pueblo.

Disgustos y rencores existieron y existirán. Y, como en el caso de Jesús, originan maltratos injustos, que nos molestan. Jesús sabe y enseña que las reacciones al maltrato necesitan ser controladas. Responder a la violencia con violencia puede llevar a tragedias. Responder al abuso con abuso, destruye toda esperanza de paz. Violencia y abuso deben ser combatidos en el corazón humano, en nuestra incapacidad para cuidar y amar al otro.

Mientras iban de camino, le dijo uno : Te seguiré adonde vayas Mientras iban de camino, le dijo uno : Te seguiré adonde vayas. Jesús le respondió : Los zorros tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza. Las interpretaciones siguientes son obtenidas de “La Radicalidad de la Fe”, del Cardenal Carlos María Martini

LIBRES de afectos excesivos y Sabemos que no somos cristianos para alcanzar comodidad y seguridad material Pero no queremos riesgos, ni compromisos a largo plazo, ni esfuerzos prolongados. En cambio, Jesús nos quiere capaces de enfrentar las dificultades de la realidad, capaces de “salir del nido”. LIBRES de afectos excesivos y de apego a las seguridades fuera de Dios.

A otro le dijo : Sígueme. Él respondió : Déjame primero ir a enterrar a mi padre. Le contestó : Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios.

EL SEÑOR QUIERE SER PRIMERO EN NUESTRO CORAZÓN. La familia natural es vital. Pero también somos de la familia de Dios. A Dios no le ponemos condiciones. Jesús es Dios. Por seguir a Jesús se acepta cambiar y dejar todo lo que nos esclaviza a lo pasado. LIBRES de “ir a enterrar al padre” : libres de las costumbres y tradiciones que se opongan a la Palabra de Dios . La imagen del padre representa querer seguir siendo como éramos.

Otro le dijo. Te seguiré, Señor, pero déjame despedirme de mi familia Otro le dijo . Te seguiré, Señor, pero déjame despedirme de mi familia. Jesús le contestó : El que pone la mano en el arado y mira hacia atrás no vale para el reino de Dios.” Palabra de Dios

LIBRES de “mirar para atrás”: No se puede seguir al Señor sufriendo por lo que se ha dejado, pensando que la fe nos ha causado pérdidas. LIBRES de “mirar para atrás”: libres de nosotros mismos, de nuestros amigos, de nuestra historia personal.

¿QUÉ ESTORBA NUESTRO SEGUIMIENTO? El Señor nos hace una llamada de atención. Lo queremos seguir, pero ponemos límites y condiciones a sus enseñanzas. No nos pide renunciar a nuestro buen criterio, pero quiere saber cuánto le creemos. ¿QUÉ ESTORBA NUESTRO SEGUIMIENTO? “NIDO” La confianza en mis afectos y mi comodidad. Porque Dios quiere ser Él mi apoyo y mi seguridad. “PADRE” La confianza en mis ideas y mis costumbres. Y Dios no quiere que me aferre sólo a mi criterio, sino que confíe en Él. “MIRAR ATRÁS” La confianza en mis posesiones y mi pasado. Y Dios quiere que valore la nueva riqueza que Él me da.

Señor, Tú sabes que deseamos seguirte. Ayúdanos a reconocer y controlar los temores y las tentaciones que anidan en nuestro corazón. «Sean misericordiosos, como también su Padre es misericordioso» Lc 6, 36 Barthimeus, Instituto para el Progreso Humano