Comentarios de Anthony Burgess, en Vindiciae Legis: A Vindication of the Moral Law & Covenants (Una vindicación de la ley moral y de los pactos), sobre la “ley escrita en los corazones” referida en Romanos 2:14-15
El libroVindiciae Legis: A Vindication of the Moral Law & Covenants (Una vindicación de la ley moral y los pac-tos) de Anthony Burgess es crucial para la interpretación de la doctrina de la Ley de Dios en la Confesión de fe de Westminster (CFW). Burgess fue miembro de la Asam-blea de Westminster (AW) y del comité redactor del Cap. 19 de la CFW sobre la Ley de Dios. Las conferencias que luego fueron publicadas como libro fueron dictadas en una iglesia en Londres inmediatamente antes y durante el periodo en que la AW discutió dicho Cap. 19 de la CFW. En su introducción a la edición facsimilar electró-nica (Reformation Heritage Books, 2011), Stephen J. Casselli escribe: “Vindiciae Legis provee una explicación exegética y teológica consonante con la enseñanza del Cap. XIX de la Confesión de fe de Westminster.”
CONFERENCIA VI: ROMANOS 2:14, 15 - 1 - ¿Cómo manifiestan [los hombres] esta ley escrita en sus corazones? …primero externamente, de dos ma-neras: 1. Haciendo buenas y saludables leyes para go-bernar por ellas a los hombres; y 2. Mediante su prác-tica, al menos algunos de ellos, conforme con aquellas leyes. Y en segundo lugar internamente, mediante sus conciencias, en el consuelo o temor que tengan ahí… Hay una ley de la naturaleza escrita en los corazones de los hombres… Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 60. Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster sobre la Ley de Dios. Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VI: ROMANOS 2:14, 15 - 2 - [La naturaleza de la ley escrita en los corazones con-siste] en aquellas nociones comunes y máximas, las cuales están implantadas en los corazones de todos los hombres: y hay algunas de ellas especulativas, que hay un Dios; y algunas prácticas, que el bien de-be abrazarse, y el mal evitado: y por lo tanto Aquino dijo bien, que lo que los principios de la ciencia son en las cosas de demostración, lo mismo son estas re-glas de la naturaleza en lo práctico: por lo tanto no podemos dar ninguna razón de ellos… Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 62 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VI: ROMANOS 2:14, 15 - 3 - [La Ley de la Naturaleza] fue perfectamente implantada en el corazón de Adán, pero nosotros tenemos solamente al-gunos fragmentos, y una mera sombra de ella en nosotros. La totalidad de la Ley de la Naturaleza, como nos instruía perfectamente la voluntad de Dios, fue comunicada a él: y también Dios… dio, además de esa ley de la naturaleza, u-na ley positiva para probar su obediencia; empero la otra no puede negarse que estaba en él, viendo que fue hecho a i-magen de Dios, en justicia, y santidad, y de otra manera A-dán habría estado destituido de la luz de la razón y sin con-ciencia. Por lo tanto es una cosa muy imprudente en Soci-nio negar que Adán tenía tal ley o precepto… Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 62 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VII: ROMANOS 2:14 - 1 - La doctrina ya deducida de estas palabras es que, los gentiles tienen una ley de la naturaleza escrita en sus corazones; la cual ley consiste en parte en luz y conocimiento de principios especulativos, y parte en práctica y obediencia a principios prácticos… Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 67 Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster sobre la Ley de Dios Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VII: ROMANOS 2:14 - 2 - La luz de la naturaleza es un remanente de la imagen de Dios …Primordialmente consistía en justi-cia y verdadera santidad; empero secundariamente tam-bién comprendía los poderes y facultades de un alma razonable… Y esta última parte permanece. Es cierto, esta luz de la naturaleza comparada con aquella de la fe, es como una luciérnaga al sol; empero alguna luz e irra-diación tiene… la cual el apóstol llama (Rom. 1) verdad; le otorgó ese nombre, detienen con injusticia la verdad. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 67 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VII:ROMANOS 2:14 - 3 - …esta luz de luna o luz tenue es de una triple utilidad: 1. Para las sociedades y los estados públicos, mediante la cual han hecho buenas leyes. Es maravilloso considerar cuán excelentes los paganos han sido en ello… 2. Esta luz de la naturaleza sirve para instigar y provocar a los hombres a muchas buenas acciones y deberes hacia Dios y el hombre… 3. El último uso de esta luz natural es, hacer al hombre inexcusable; pues, viendo que no glorificaron a Dios conforme a su conocimiento, por ello son justamente condenados… Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), pp. 68, 70. Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VII:ROMANOS 2:14 - 4 - No hay nada en teología que contradiga la verdad de la naturaleza, pues es remanente de la imagen de Dios. Esto es difícil de aclarar en muchos puntos de teología; como en la doctrina de la Trinidad, y la doc-trina de la encarnación de Cristo, que parecen para-dójicas a la razón… Empero, viendo que el apóstol llama verdad al conocimiento natural del hombre, y que toda verdad proviene de Dios, cualquiera que sea el camino por el que llegue, no puede por lo tanto ha-ber contradicción entre ello. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 72 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VII: ROMANOS 2:14 - 5 - Aunque la razón y la luz de la naturaleza son necesarios, la ra-zón no es Juez en asuntos de fe. Los luteranos parecen depri-mir demasiado a la razón, y los socinianos exaltarla demasiado; la hacen no solamente un instrumento sino un juez; y así recha-zan los más grandes misterios de la religión… y ciertamente…. podemos por la misma razón probar que la religión cristiana es la verdadera. ¿Pero quién no puede ver cuán incierta es la razón comparada con la fe? … Pero no debemos confundir el instru-mento con el Juez. Las verdades santas son verdades bíblicas, aunque sean forjadas por la razón. Así como el orfebre toma la placa de oro, y la golpea para darle la forma que quiere, su mar-tillo no hace el oro sino solamente le da forma del oro. Así tam-bién la razón no hace divina una verdad, sino solamente la pre-senta y la declara de una manera tal. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), pp. 73-74
CONFERENCIA VII: ROMANOS 2:14 - 6 - La naturaleza es insuficiente para prescribir la ado-ración divina… De ahí que tan a menudo Dios nos prohí-be andar tras nuestras propias imaginaciones y hacer lo que nosotros queramos. El apóstol lo llama “culto arbitrario” [Col. 2:23] cuando en el arbitrio del hombre está su causa… los hombres tienen una tendencia a admirar esto, como lo vemos en los fariseos y papistas; aprecian mucho más sus tradiciones que a las instituciones de Dios. ¿Pero qué dice nuestro Salvador (Luc. 16:15)? Que “lo que los hombres tiene por sublime, delante de Dios es abominación.” Esa palabra es aplicada a ídolos y a la adoración falsa. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 74 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VIII: ROMANOS 2:14 - 1 - …así como hay algunos que menosprecian mucho [la luz de la naturaleza]; también hay otros que la ponen muy en alto. Veamos entonces lo que esta luz puede hacer… Que hay un Dios puede ser conocido por la luz de la naturaleza. … Esto es negado por los socinianos y otros. De hecho, Belarmino acusó de algo así a Calvino, pero lo que los autores protestantes sostienen es que uno puede te-ner conocimiento de que hay un Dios, pero qué es ese Dios, si es uno, y cuáles son sus atributos, no pueden alcanzarlo a-sí… Dicho de otro modo, no hay ateo natural, aunque mu-chos en sus afectos desean que no hubiese Dios. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), pp. 76-77 Reforma Presbiteriana México
CONFERENCIA VIII: ROMANOS 2:14 - 2 - Si Dios está tan airado con aquellos que no usan bien la luz de la naturaleza, ¿cuánto más entonces con quienes tampoco usan bien la luz del evangelio? … En un capítulo [Rom. 1] se dice de Dios tres veces que “los entregó,” porque no glorificaron a Dios conforme a la luz de la naturaleza; ¿cuánto más entonces confor-me a la luz del evangelio? “Grave es la ley de la con-ciencia," dijo Séneca, pero más grave es la luz del e-vangelio. La luz del ministerio y la Palabra necesitan ser más perturbadoras para tus caminos pecaminosos. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 83 Reforma Presbiteriana México
Si Dios está tan airado con aquellos que no usan bien la luz de la naturaleza, ¿cuánto más entonces con quienes tampoco usan bien la luz del evangelio? … En un capítulo [Rom. 1] se dice de Dios tres veces que “los entregó,” porque no glorificaron a Dios conforme a la luz de la naturaleza; ¿cuánto más entonces confor-me a la luz del evangelio? “Grave es la ley de la con-ciencia," dijo Séneca, pero más grave es la luz del e-vangelio. La luz del ministerio y la Palabra necesitan ser más perturbadoras para tus caminos pecaminosos. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 83. Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster sobre la Ley de Dios. Reforma Presbiteriana México
La [luz de la] naturaleza es insuficiente para prescribir el culto divino… De ahí que tan a menu-do Dios nos prohíba andar tras nuestras propias imagina-ciones y hacer lo que nosotros queramos. El apóstol lo llama “culto arbitrario” [Col. 2:23] cuando en el arbitrio del hombre está su causa… los hombres tienen una ten-dencia a admirar esto, como lo vemos en los fariseos y pa-pistas; aprecian mucho más sus tradiciones que las insti-tuciones de Dios. ¿Pero qué dice nuestro Salvador (Luc. 16:15)? Que “lo que los hombres tienen por sublime, de-lante de Dios es abominación.” Esa palabra es aplicada a ídolos y a la adoración falsa. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), p. 74. Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster sobre la Ley de Dios. Reforma Presbiteriana México
…así como hay algunos que menosprecian mucho [la luz de la naturaleza]; también hay otros que la ponen muy en alto. Veamos entonces lo que esta luz puede hacer… Que hay un Dios puede ser conocido por la luz de la naturaleza. … Esto es negado por los socinianos y otros. De hecho, Belarmino acusó de algo así a Calvino, pero lo que los autores protestantes sostienen es que uno puede te-ner conocimiento de que hay un Dios, pero qué es ese Dios, si es uno, y cuáles son sus atributos, no pueden alcanzarlo a-sí… Dicho de otro modo, no hay ateo natural, aunque mu-chos en sus afectos desean que no hubiese Dios. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), Conferencia VIII: Rom. 2:14; pp. 76. Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster. Reforma Presbiteriana México
Aunque la razón y la luz de la naturaleza son necesarios, la razón no es Juez en asuntos de fe. Los luteranos parecen rebajar de-masiado a la razón, y los socinianos exaltarla demasiado; la ha-cen no solamente un instrumento sino un juez; y así rechazan los más grandes misterios de la religión… ciertamente… podemos por la misma razón probar que la religión cristiana es la verdade-ra. ¿Pero quién no puede ver cuán incierta es la razón compara-da con la fe? … Pero no debemos confundir el instrumento con el Juez. Las verdades santas son verdades bíblicas, aunque se les dé forma mediante la razón. Así como el orfebre toma la placa de oro, y la golpea para darle la forma que quiere, su martillo no hace el oro sino solamente le da forma al oro. Así también la ra-zón no hace divina una verdad, sino solamente la presenta y la declara de una forma. Anthony Burgess Vindiciae Legis. A Vindication of the Moral Law & the Covenants (1646), Conferencia VII: Rom. 2:14; pp. 73-74. Burgess fue miembro de la Asamblea de Westminster y del comité redactor del Cap. 19 de la Confesión de fe de Westminster sobre la Ley de Dios. Reforma Presbiteriana México