La titulación periodística El título es el señuelo, la “luz” que atrae y fija la huidiza mirada del lector. No olvidemos un hecho psicológicamente comprobado: en más de una ocasión –por no decir que casi siempre- el éxito de un trabajo periodístico depende del título. Lo elementos más comunes son: El balazo, el encabezado o titular principal, además del sumario. En algunas publicaciones utilizan otros recursos, como por ejemplo introducciones, ante-entradas, entre otros.

La titulación periodística No hay reglas inflexibles para titular: depende del trabajo. Hay que leer varias veces el texto, tomarse un tiempo para razonar y escribir varios títulos posibles. Es necesario ser concretos: 12 palabras como máximo. Sin embargo, la extensión depende de: Si es titular principal. Si va a una, dos o tres caídas. Aumentar o disminuir el puntaje u otros atributos de los titulares. Tipos de letra utilizados.

La titulación periodística ¿Qué nos interesa en la titulación? Llevar la idea o hecho principal de nuestra información. Captar la atención del lector mediante títulos llamativos, sin caer en el sensacionalismo. Una adecuada combinación: Contenido del título - tipografía adeacuada, que resalte en la presentación.

Recomendaciones para la titulación El título debe recoger el elemento o elementos más importantes de la noticia, debe ser una síntesis o la sustancia misma de la información. Un título debe ser preferentemente breve: hasta 12 palabras como máximo, pero la naturaleza de su extensión puede depender de diversos factores. Generalmente el título destaca lo que ha pasado, y a veces a quién, dónde o cuándo ha sucedido o sucederá el evento. El o los sumarios despliegan los demás elementos de la noticia. Ayudan a complementar algunos datos que el lector considere como secundarios respecto a lo que se estableció en el encabezado.

Recomendaciones para la titulación Jamás debe decirse en el título algo que no se expresó en el texto de la información. De preferencia debe aparecer en los titulares un verbo respecto al hecho informado. Se recomienda que vaya al principio de los encabezados, pero es necesario darle variedad a la presencia de la información, con títulos gramaticalmente construidos de forma distinta. El encabezamiento orienta e informa al lector. No debe ser bajo ninguna circunstancia ambiguo o de difícil comprensión. En este sentido, sí puede haber titulares curiosos, que dejan cierta incógnita en el lector, pero nunca ue mal informe.

Recomendaciones para la titulación Las características o requisitos que se exigen del titular deben ser los siguientes: Veracidad. Exactitud. Interés. Claridad. Brevedad. Rapidez. Expresión. Completo. En el título principal, balazo o sumario no deben existir repeticiones de palabras o cacofonías.

Recomendaciones para la titulación Deben evitarse los verbos “fáciles” y las palabras de amplio significado. Utilícense palabras concretas y verbos dinámicos y vigorosos. La correcta puntuación merece un especial cuidado en los títulos. Una simple coma mal colocada puede variar el sentido de una frase. No debe abusarse de las comillas, signos de interrogación o admiración. Pueden admitirse limitadamente, pero en otros casos pueden ser innecesarios.

Recomendaciones para la titulación Siempre que sea lógicamente posible se sigue el criterio norteamericano, en preferir los títulos en tiempo presente al pasado. Ello por una sencilla razón: Porque los hechos que hoy se publican, aunque sucedieran ayer o hace unas horas, para el lector están sucediendo en este instante, en el momento de la lectura. Este presente periodístico tiene sentido de un pasado reciente y además es de suponerse que los hechos permanecen (no se han esfumado) en el momento de publicarse una noticia. Encabezados. Funciones: Resumir las noticias. Clasificar la importancia de las noticias. Elemento de diseño en la página. Convence al observador de que se convierta en lector.

Recomendaciones para la titulación Tabloide. 4 de 4 columnas: notas principales. 3 de 4 columnas: nota destacada (secundaria). 2 o 1 de 4 columnas: notas breves, de regular importancia.

Gramática de los encabezados Un, uno, el, los la, etc., los podemos suprimir. Un punto y coma nos puede ayudar para suprimir una palabra o también al dar a conocer dos noticias en un mismo encabezado. Es necesaria la claridad en la redacción de los encabezados. Ejemplos: Terremotos creados por hombres sacuden Atlanta (X). Atlanta sacudida por terremotos creados por el hombre (ok). Se debe tener cuidado al suprimir el sujeto de los encabezados. Ejemplo: Implementará prácticas deportivas (X)

Gramática de los encabezados Tanto las abreviaturas como el uso de las siglas estarán restringidas a las de uso común y que no signifiquen un planteamiento confuso para el lector. No se deben separar silábicamente los encabezados. En encabezados con dos o tres pisos, debemos intentar que cada uno de ellos quede con un número semejante o igual de caracteres. De no ser así, se recomienda que los primeros pisos sean más grandes, con más caracteres que los siguientes, pero con una diferencia que no sobrepase las 2/3 partes en dimensión.

Gramática de los encabezados Se debe limitar la utilización de gerundios, ya que estos representan por lo general una voz pasiva del lenguaje, que es recomendable pasarla a una voz activa. Ejemplo: Esta creciendo la inflación según el PRD (voz pasiva). Crece la inflación según el PRD (voz activa). En algunos casos los verbos ser y estar, como auxiliares pueden ser suprimidos. Algunas preposiciones pueden sustituirse con una coma. Ejemplo: México ante la Olimpiada más exitosa: Vázquez Raña. Sydney, la Olimpiada más exitosa para México.

Gramática de los encabezados Como regla de estilo, los números sólo se escriben con letra del 1 al 10 y los demás con número propiamente en el texto y en los encabezados. Es posible acortar expresiones en los encabezados por cuestiones de espacio. Ejemplos de sustitución de palabras largas por cortas: acaudalado por rico, acumular por reunir o juntar, etc. Así como es necesario que en la nota informativa no se repitan continuamente las expresiones o términos, en los encabezados, de la misma forma, no debe suceder, toda vez que demerita la presentación.

El balazo y el sumario En la elaboración de titulares existen por lo regular dos elementos que complementan al encabezado principal. Estos son el balazo y el sumario. En el caso de los sumarios cumplen con características específicas: Pueden ser los titulares más grandes en cuanto a número de caracteres, pero que quedan de un tamaño regular al utilizar tipografía de tales dimensiones. Pueden hacer referencia a citas textuales, resúmenes informativos del trabajo periodístico, elementos distintos a los que se dijo en el encabezado principal de interés secundario, etc. Existen publicaciones que únicamente utilizan un solo sumario, sin embargo esto no es una regla fija para todos los medios impresos y dependerá del trabajo periodístico o del estilo de la publicación, la necesidad de incluir de dos en adelante.

El balazo y el sumario Respecto al balazo podemos señalar: Para algunos autores también es conocido como pre encabezado o ante encabezado, ya que además de estar previo al titular principal, puede llegar a tener una relación directa con el mismo en términos de coherencia o redacción (como si fuese una sola oración). (b) En otros casos el balazo asume la función de un encabezado secundario, es decir, como si el editor hubiera escogido a éste como una segunda opción de cabeceo del trabajo periodístico, o bien, que proporciona un detalle extra respecto al titular principal.