TEMA 3 MADRE DE AMOR

NOS PROPONEMOS LOGRAR COMPRENDER QUE: A MARÍA LE LLAMAMOS MADRE DE AMOR Y MADRE NUESTRA MARÍA ES MEDIADORA ENTRE DIOS Y LA HUMANIDAD COMO MARÍA LOS CRISTIANOS TENEMOS LA RESPONSABILIDAD DE ANUNCIAR EL EVANGELIO

3. MEDIADORA- INTERCESORA 1. SIEMPRE ATENTA 7. MARÍA MISIONERA EN ESTE TEMA VEREMOS 6. MADRE DE LA IGLESIA 2. “NO TIENEN VINO” 5. SIEMPRE PRESENTE 3. MEDIADORA- INTERCESORA 4. MOVIDA POR EL AMOR

SIEMPRE ATENTA MARÍA ES LA CREATURA MÁS CERCANA AL PADRE Y AL HIJO A NOSOTROS NOS CUESTA ENTENDER EL DIÁLOGO ENTRE MARÍA Y JESÚS PERO PARA ELLOS ES SUFICIENTE Y ELOCUENTE. EN LAS BODAS DE CANÁ, MARÍA ES ATENTA A LAS NECESIDADES DE LOS OTROS.

NO TIENEN VINO María es mediadora Ir al encuentro de las necesidades de las personas, significa al mismo tiempo que ella se introduce en la obra de su hijo. María es mediadora Se nos presenta María como portavoz de la voluntad de su hijo La mediación ante su hijo tiene un carácter de intercesión

MEDIADORA – INTERCESORA El hecho de Caná de Galilea, nos ofrece una predicción de la mediación de María orientada a CRISTO y encaminada a la revelación de su poder salvífico. (MR 2) CONCILIO VATICANO II L a función materna de María esta siempre referida a su hijo .

MOVIDA PÒR EL AMOR Da testimonio del amor de DIOS. Movida por el amor se dirige apresuradamente a la casa de ISABEL. Es portadora del evangelio para toda la humanidad. Pone en práctica la palabra que habita en sus entrañas.

SIEMPRE PRESENTE MARÍA está presente en nuestra propia historia. Cuando el SEÑOR proyecta su plan de salvación incluye en él a MARIA como elemento fundamental para realizar su amoroso designio. María está en el contexto de la historia de la salvación.

MADRE DE LA IGLESIA Es ella la que después de Cristo ocupa en la Iglesia el lugar más alto, y mas cercano a cada uno de sus hijos. (LC 54) MARÍA es madre de la iglesia y por tanto madre de todos los que la formamos.

Corre presurosa a llevar a Isabel y a su familia buenas noticias. MARÍA MISIONERA Es la mujer que ayuda a la iglesia a tomar conciencia de su vocación misionera. María anticipa la misión de la iglesia, proclama el poder y la misericordia de Dios. Corre presurosa a llevar a Isabel y a su familia buenas noticias.