María De Mattias Nació en Vallecorsa el 4 de febrero de Murió en Roma El 20 de agosto de 1866
Gaspar del Bufalo El Dios que Gaspar presenta es el Dios Padre que perdona y tiene entrañas de misericordia con todo ser humano
Director espiritual de María De Mattias 1824 / 1866 Giovanni Mer lini
María entendió que cualquier crucificado, sea cual sea el motivo de su cruz, es alguien sagrado, que reclama nuestra compasión y nuestra solidaridad
Acompañemos a Jesús en todos sus cami- nos: cuando estamos solas, le acompaña- mos en la soledad de Belén; cuando vamos de viaje, le acompañamos por las tierras de Palestina y en el camino del Calvario; cuan- do somos flageladas por las lenguas murmu- radoras, acompañamos a Jesús flagelado; cuando somos crucificadas, acompañamos a Jesús Crucificado… siempre, siempre con Jesús. María De Mattias
El camino indicado por la voluntad de Dios, María lo había encontrado en el vivir con los demás y para los demás, ayudándolos espiritual y materialmente a llevar una vida más humana y digna.
…Tú no escribirás para ti sino para los demás. Al escribir, encuentro mucha dificultad; muchas veces sudo por la repugnancia. Cuando no escribo mi corazón se turba; y cuando lo hago se dilata con paz …Tú no escribirás para ti sino para los demás. Al escribir, encuentro mucha dificultad; muchas veces sudo por la repugnancia. Cuando no escribo mi corazón se turba; y cuando lo hago se dilata con paz María de Mattias María de Mattias
Una de las hermanas había escrito:no tenemos dificultad para identificarnos con el sufrimiento. Esta es la condición humana y nosotras Adoratrices de la Sangre de Cristo, nos hemos identificado fácilmente con el pueblo de Dios que sufre… Sugiero que contemplemos el misterio del sufrimiento a través del Misterio Pascual de Cristo. Él ha resucitado al tercer día y nos ha dado la vida nueva, la vida que debemos expresar con nuestra forma de ser. Si dentro de nosotras no nos reconocemos y no nos identificamos con ésta esperanza, nuestra identificación con el sufrimiento es inútil…, tenemos necesidad de que la esperanza viva en modo operativo en nosotras: esto nos llama a una vida de fe más intensa Shirley Kolmer, asc
Bienaventurados los que lavan sus vestidos en la Sangre del Cordero (Ap 7,14) Bienaventurados los que lavan sus vestidos en la Sangre del Cordero (Ap 7,14) )