La hipertensión arterial es una enfermedad crónica, silenciosa, que puede ser controlada y se caracteriza por la elevación sostenida de la presión sanguínea en más de una medición.
Hipertensión arterial sistémica esencial. Corresponde a la inmensa mayoría de los casos. Hipertensión arterial sistémica secundaria. 1 Puede obedecer a múltiples causas que representan en conjunto un pequeño porcentaje del total. 1 Endocrinológica. parenquimatosa renal: reno vascular. aórtica (vascular). neurogénica. Hipertensión secundaria a coartación aórtica HTA secundaria a endocrinopatías edades del sistema nervioso central.
Algunos de los factores ambientales que contribuyen al desarrollo de la hipertensión arterial incluyen la obesidad, el consumo de alcohol, circunstancias de nacimiento y las profesiones estresantes. Se ha notado que en sociedades económicamente prósperas, estos factores aumentan la incidencia de hipertensión con la edad.
Dolores de cabeza Mareos Visión borrosa Náuseas y vómitos Dolores en el pecho y dificultad para respir
El tratamiento de la hipertensión arterial está asociado a una reducción de la incidencia de derrame cerebral de un 35-40%, de infarto agudo de miocardioentre 20-25% y deinsuficiencia cardíacaen más de un 50%. Se indica tratamiento para la hipertensión a: pacientes con cifras tensionales diastólicas mayores de 90 mm Hg o sistólica mayores de 140 mm Hg en mediciones repetidas; pacientes con una tensión diastólica menor que 89 mm Hg con una tensión sistólica mayor que 160 mm Hg ; pacientes con una tensión diastólica de 85 a 90 mm Hg que tengan diabetes mellitus o con arteroesclerosis vascular demostrada.
Las siguientes condiciones podrían manisfestarse si no toma medidas para controlar su presión alta: Arteriosclerosis (daño a los vasos sanguíneos) Daño al cerebro Insuficiencia cardiaca Daño a los riñones Insuficiencia renal Ataque al corazón o infarto Enfermedad cardiovascular Derrame cerebral Perdida de la vista
Disminuya el nivel de sal en la preparación de sus comidas. Evite, además, los alimentos salados. Reduzca al mínimo las grasas animales de su dieta y hágala rica en verduras, legumbres, fruta y fibra. No fume y evite los ambientes contaminados por humo de tabaco. Invite a la gente de su entorno a dejar de fumar. Modere el consumo de bebidas alcohólicas. No ingiera en exceso bebidas excitantes como el café, el té, etc. Siga fielmente el tratamiento prescrito por su médico y no lo interrumpa sin su conocimiento.