Fuente Primaria: "Todo el mundo sabe cuán laudable es que el príncipe prefiera siempre la lealtad a la falacia; sin embargo la experiencia de nuestros.

Presentación del tema: "Fuente Primaria: "Todo el mundo sabe cuán laudable es que el príncipe prefiera siempre la lealtad a la falacia; sin embargo la experiencia de nuestros."— Transcripción de la presentación:

1 Fuente Primaria: "Todo el mundo sabe cuán laudable es que el príncipe prefiera siempre la lealtad a la falacia; sin embargo la experiencia de nuestros tiempos prueba que príncipes a quienes se ha visto hacer grandes cosas, tuvieron poco en cuanta la fe jurada, procurando atentamente engañar a los hombres y consiguiendo al fin dominar a los que en su lealtad fiaban". ¿Cómo considera debe actuar el príncipe? A partir de la experiencia tenida, le indica que debe utilizar a veces medios no tan buenos, por el contexto en el que se vive. A su vez muestra una política alejada de la moral de la iglesia. Lo que Maquiavelo busca es habilidad y astucia según las circunstancias. "No debe, pues, un príncipe ser fiel a su promesa cuando esta fidelidad le perjudica y han desaparecido las causas que le hicieron prometerla. Si todos los hombres fueran buenos, no lo sería este precepto; pero como son malos y no serán leales contigo, tú tampoco debes serlo con ellos" Maquiavelo, Nicolás. C. XVIII: Cómo los príncipes deben mantener la palabra. En: CHEVALLIER: Grandes Obras Políticas, desde Maquiavelo hasta nuestros días. P. 508-509.

2 Fuente Secundaria o Bibliográfica: "Y, en fin, ¿qué hay más loable para un príncipe que ser fiel a su palabra y obrar siempre francamente?, Pero, ¿qué vemos en la realidad? Príncipes que han hecho grandes cosas violando su fe, imponiéndose a los hombres por el engaño, y que han acabado por dominar a los que se fundaban en la lealtad. Sobre esta observación desengañada construye Maquiavelo este capítulo XVIII, que le será muy particularmente reprochado, que aparecerá, más que como la esencia, como la "quintaesencia" del maquiavelismo, y que será leído más atentamente que todos los demás por los políticos ávidos de éxitos diplomáticos. CHEVALLIER, Jean-Jacques. Grandes Obras Políticas, desde Maquiavelo hasta nuestros días. Temis, Colombia. Pp. 23.

3 "En los peligros el rey que mira manda con los ojos. Los ojos del príncipe es la más poderosa arma; en los vasallos asistidos de su señor es diferente el ardimiento". "El rey es menester que asista a todo y que abra los ojos, porque los suyos no pierdan la fe". "La vista de los príncipes influye coraje; y el miedo, que sólo precia la salud y pone la honra en la seguridad, suele reprenderse con el respeto". Quevedo, Francisco. La política de Dios, gobierno de Cristo. p. 375. En: 82: "... que al Papa no le toca, al menos por la vida ordinaria, las mas causas de los príncipes, las cuestiones de jurisdicción y de títulos de los reinos ni se puede apelar a él en las causas civiles”. "El papa no tiene más autoridad temporal que en caso de necesidad; pero si el Papa dijera que una ley civil era mala o que algún acto de administración temporal no convenía al buen gobierno de la república y mandare suspenderlo, y el rey se opusiere, a quien habría de someterse... no habría que hacerle caso el juzgar estas cosas al rey le toca, no al Papa, y aunque fuera cierto lo que éste dice, está fuera de su autoridad". Vitoria, Francisco. Derecho Natural y de Gentes. P. 89-90, 92.

4 Fernando de Aragón (1452-1516): Príncipe Moderno.

5 “Maquiavelo, como la mayoría de los renacentistas, entiende que la cultura humana debe independizarse de la religión. El hombre, al margen de la Providencia Divina (dirección de la vida Humana por Dios), está expuesto a la fuerza de las cosas, a las relaciones de causa y efecto basadas en los movimientos de las pasiones, intereses y disponibilidades de individuos y grupos. Son estas circunstancias complejas las que Maquiavelo considera como "fortuna”, entendiéndola como una realidad que debe conocerse y aceptarse, pero que también se puede afrontar, controlar y cambiar”. SÁNCHEZ, José Luis. Maquiavelo y Borguia: Teoría y Práctica para directivos. España 2003. p. 56. “El Príncipe, es decir, el político, el hombre de estado, debe reunir especiales condiciones para acceder al poder y mantenerse en él. Estas condiciones y aptitudes se resumen en su capacidad de aprovechar situaciones y manipular deseos y voluntades de tal modo que sean consideradas como medios, y no como fines en sí, pues el único fin genuino es el poder”. GINER, Salvador. Historia del pensamiento social. Ediciones Ariel. España, 2008. P. 210.

6 Considerando los Apuntes de su Cuaderno: Interprete cuál es la relación entre Estado Moderno y Príncipe. Mínimo 200 palabras o un esquema de una plana.