La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

Las cartas llamadas “católicas” Lic. Claudia Mendoza /// 2013.

Presentaciones similares


Presentación del tema: "Las cartas llamadas “católicas” Lic. Claudia Mendoza /// 2013."— Transcripción de la presentación:

1 Las cartas llamadas “católicas” Lic. Claudia Mendoza /// 2013

2 Además de la colección de cartas “paulinas”, en el canon del Nuevo Testamento se encuentra un segundo ¿grupo? ¿de cartas?, designadas por el nombre de sus (supuestos) autores: Santiago, Pedro, Juan y Judas

3 No aparecieron simultáneamente –como las del “corpus paulinum”– sino que cada una tuvo su propio itinerario hasta llegar a ser incluida en el canon

4 Por lo que sabemos, parece que el primero en mencionar las siete cartas y llamarlas “católicas” fue Eusebio de Cesarea

5 Al referir los datos que posee acerca de Santiago el hermano de Jesús, finaliza diciendo…

6 II 23 24 “Todo esto es lo que se cuenta acerca de Jacobo, de quien se dice ser la primera de las epístolas llamadas católicas. II 23 25 Sin embargo, hay que tener en cuenta que se la considera como no auténtica, porque, entre los antiguos, no hubo muchos que la mencionaran…

7 [II 23 25] ni esta carta ni la llamada carta de Judas, la cual se encuentra también entre las cartas que reciben el nombre de católicas. Sin embargo sabemos que estas dos cartas se leen públicamente en las Iglesias lo mismo que las otras”

8 Hacia el año 360, el canon 59 del Concilio de Laodicea…

9 … enumera estas cartas, agrupándolas a todas bajo el título común de e)pistolai\ kaqolikai (“epistolai katholikai”)

10 El nombre de “católicas” parece significar aquí el carácter relativamente “universal”, “general” del contenido de las mismas

11 Es decir, el hecho de no tener como destinatarios a una comunidad determinada, específica, sino a un grupo genérico, indeterminado de cristianos

12 Pero en realidad, si se entiende la denominación de “católicas” de esta manera, sólo le cabría esta designación a Santiago, Judas y 2 Pedro –ya que sus presuntos destinatarios son claramente colectivos–

13 …ya que 1 Pedro, 2 y 3 Juan tienen indicaciones de destinatarios bastante determinadas

14 Y 1 Juan, aunque no tiene destinatario alguno, muestra estar escrita a causa de una problemática muy concreta de su comunidad

15 En una primera impresión parecen estar doctrinalmente enfrentadas al “corpus paulinum”

16 O al menos, proceder de una atmósfera en la que ciertas formas de “paulinismo” estarían generando inconvenientes pastorales y/o doctrinales

17 De hecho parecen estar atribuidas a “los notables” de la Iglesia de Jerusalén, mencionados en Gálatas 2,9 a propósito del primer gran conflicto con Pablo y su entorno

18 Gálatas 2,9 “...y reconociendo la gracia que me había sido concedida, Santiago, Cefas y Juan, que eran considerados como columnas, nos tendieron la mano en señal de comunión a mí y a Bernabé: nosotros nos iríamos a los gentiles y ellos a los circuncisos...”

19 ¿Por qué razón? ¿Se estarían enfrentando a un “paulinismo” degenerado o mal entendido… –marcado por un fuerte “antinomismo”–

20 … que podía llevar a la conclusión de que hay que desentenderse del “mundo”, que no son salvíficamente relevantes las “buenas obras”?

21 Si bien en Pablo no hay divorcio entre fe y vida, no hay disociación entre el don del evangelio y sus exigencias, está atestiguado que no han faltado quiénes interpretaron así su enseñanza…

22 … sobre todo cuando el “corpus paulinum” ya estaba configurado y se comenzaba a difundir –haciéndose accesible a muchos– y a citar como “Escritura” –así claramente lo atestigua 2 Pedro–

23 Con ello comenzaban también las distorsiones, las interpretaciones erradas y parciales de la enseñanza paulina Ver 2 Pedro 3,15-16

24 2 Pedro 3,15-16 3,15 La paciencia de nuestro Señor juzgadla como salvación, como os lo escribió también Pablo, nuestro querido hermano, según la sabiduría que le fue otorgada. 3,16 Lo escribe también en todas las cartas cuando habla en ellas de esto. Aunque hay en ellas cosas difíciles de entender, que los ignorantes y los débiles interpretan torcidamente –como también las demás Escrituras– para su propia perdición.

25 Además, en el siglo II comienza a sentirse con gran poder la influencia del gnosticismo, con su rechazo de lo temporal, a desentenderse de esta vida

26 Quienes reducen la fe a una gnosis, a una “ciencia” que hay que conocer y no a una forma de vivir, pueden fácilmente tergiversar la enseñanza paulina sobre la fe

27 El lugar que ocupan en el canon y en los manuscritos es diferente en oriente y occidente

28 Mientras que en Oriente las cartas católicas figuraban preferentemente antes que las de Pablo, a continuación de Hechos…

29 –¿como el testimonio de los que fueron los primeros apóstoles y miembros de la comunidad primitiva?–

30 …la Iglesia latina –la Vulgata– coloca las cartas “católicas” al final del canon, inmediatamente antes del Apocalipsis

31 Tampoco ha sido siempre la misma disposición de las diferentes epístolas dentro del “grupo”

32 El orden actual de la Vulgata –Santiago, Pedro, Juan, Judas– viene de la costumbre del siglo IV de las iglesias de Oriente

33 Pero en tiempos más antiguos, las iglesias de Oriente ordenaban estos textos más bien por el orden de precedencia de los autores: Pedro, Juan, Santiago y Judas

34 La llamada “Carta de Santiago”

35 Se trata de una obra muy particular porque prácticamente se compone con exclusividad de exhortaciones religiosas y morales –¡hay 119 imperativos en el texto!– más o menos enlazadas entre sí…

36 …sin desarrollar argumentos –al menos aparentemente– y sin que haya un movimiento de ideas que se vayan desenvolviendo ordenadamente

37 Esquema de presentación  Remitente y (presuntos) destinatarios ¿Qué Santiago? ¿Es pseudoepigráfica?  ¿Un escrito cristiano?  Forma literaria y características estilísticas  Temas principales: Fe-obras // Pobres-Ricos  Fecha y lugar de composición  Conocimiento y difusión

38 ¿Qué Santiago?

39 VIa,kwboj qeou/ kai. kuri,ou VIhsou/ Cristou/ dou/loj tai/j dw,deka fulai/j tai/j evn th/| diaspora/| cai,rein 1,1 Santiago de Dios y del Señor Jesus Cristo siervo, a las doce tribus las en la diáspora saluda

40 El mero nombre del autor no aporta mucha luz sobre su persona, ya que se trata de un nombre muy común en el judaísmo de todos los tiempos

41 Sin embargo, dado que la sola mención de su nombre –sin evocar mayores precisiones o “títulos eclesiásticos” de la índole que sea– es suficiente para darle autoridad al escrito…

42 …habrá que pensar en un personaje muy importante de la Iglesia primitiva de nombre Santiago que no necesite invocar cargos o títulos algunos para imponer su autoridad

43 En el Nuevo Testamento aparecen al menos cinco personajes importantes de nombre “Santiago” (Jacob)

44 -1- Dos figuran siempre en la lista de los “doce” –ver Marcos 3,16-19 // y Hechos 1,13–

45 Santiago, el hijo de Zebedeo muerto mártir entorno al 42 d.C. –cf. Hechos 12,2– Hechos 12,1-2 1 Por aquel tiempo el rey Herodes echó mano a algunos de la Iglesia para maltratarlos. 2 Hizo morir por la espada a Santiago, el hermano de Juan.

46 Santiago, el hijo de Alfeo del que sólo se conoce el nombre

47 - 2- Se mencionan a otros dos “Santiagos”, de los que también sólo se conoce el nombre

48 Santiago “el menor” hijo de una tal “María” que –según Marcos– aparece entre las mujeres al pie de la cruz –ver Marcos 15,40 //; 16,1–

49 Marcos 15,40 40 Había también unas mujeres mirando desde lejos, entre ellas, María Magdalena, María la madre de Santiago el menor y de Joset, y Salomé, 41 que le seguían y le servían cuando estaba en Galilea, y otras muchas que habían subido con él a Jerusalén. Ver Mateo 27,56 55 Había allí muchas mujeres mirando desde lejos, aquellas que habían seguido a Jesús desde Galilea para servirle. 56 Entre ellas estaban María Magdalena María la madre de Santiago y de José, y la madre de los hijos de Zebedeo.

50 Santiago el padre del apóstol Judas mencionado sólo en Lucas 6,16 y Hechos 1,13 13 Y cuando llegaron subieron a la estancia superior, donde vivían, Pedro, Juan, Santiago y Andrés; Felipe y Tomás; Bartolomé y Mateo; Santiago de Alfeo, Simón el Zelotes y Judas de Santiago.

51 - 3- El otro es el Santiago “hermano de Jesús”

52 Marcos 6,1-3 6,1 Salió de allí y vino a su patria, y sus discípulos le siguen. 6,2 Cuando llegó el sábado se puso a enseñar en la sinagoga. La multitud, al oírle, quedaba maravillada, y decía: «¿De dónde le viene esto? y ¿qué sabiduría es ésta que le ha sido dada? ¿Y esos milagros hechos por sus manos? 6,3 ¿No es éste el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, Joset, Judas y Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre nosotros?» Y se escandalizaban a causa de él”

53 De todos estos “Santiagos”, sólo puede ser el Santiago el hermano del Señor, ya que “el hijo de Zebedeo” había muerto mártir hacia los años 42 o 43 d. C., y de los otros tres sólo se conoce el nombre

54 Sólo el “hermano del Señor” era lo suficientemente conocido y prestigioso en la Iglesia primitiva como para que bastara con sólo invocar su nombre para dar autoridad a un escrito como este

55 Este Santiago –si bien no fue seguidor de Jesús en vida de éste– Ver, por ejemplo, Juan 7,1-5 2 Pero se acercaba la fiesta judía de las Tiendas. 3 Y le dijeron sus hermanos: «Sal de aquí y vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces, 4 pues nadie actúa en secreto cuando quiere ser conocido. Si haces estas cosas, muéstrate al mundo». 5 Es que ni siquiera sus hermanos creían en él.

56 …habría aparecido en la comunidad de Jerusalén tras la muerte y resurrección del Señor Hechos 1,13-14 13 Y cuando llegaron subieron a la estancia superior, donde vivían, Pedro, Juan, Santiago y Andrés; Felipe y Tomás; Bartolomé y Mateo; Santiago de Alfeo, Simón el Zelotes y Judas de Santiago. 14 Todos ellos perseveraban en la oración, con un mismo espíritu en compañía de algunas mujeres, de María, la madre de Jesús, y de sus hermanos.

57 Es el nombrado por Pablo entre los testigos oficiales de la “resurrección” –y distinguiéndolo de los “Doce”–

58 1 Corintios 15,3-8 pare,dwka ga.r u`mi/n evn prw,toij( o] kai. pare,labon( o[ti Cristo.j avpe,qanen u`pe.r tw/n a`martiw/n h`mw/n kata. ta.j grafa.j 3 Porque os transmití, en primer lugar, lo que a mi vez recibí: que Cristo murió por nuestros pecados, según las Escrituras;

59 1 Corintios 15,4.5 kai. o[ti evta,fh kai. o[ti evgh,gertai th/| h`me,ra| th/| tri,th| kata. ta.j grafa.j kai. o[ti w;fqh Khfa/| ei=ta toi/j dw,deka\ 4 que fue sepultado y que resucitó al tercer día, según las Escrituras; 5 que se apareció a Cefas y luego a los Doce;

60 1 Corintios 15,6 e;peita w;fqh evpa,nw pentakosi,oij avdelfoi/j evfa,pax( evx w-n oi` plei,onej me,nousin e[wj a;rti( tine.j de. evkoimh,qhsan\ 6 después se apareció a más de quinientos hermanos una vez, de los cuales la mayor parte permanecen hasta ahora pero algunos se han dormido

61 1 Corintios 15,7 e;peita w;fqh VIakw,bw| ei=ta toi/j avposto,loij pa/sin\ e;scaton de. pa,ntwn w`sperei. tw/| evktrw,mati w;fqh kavmoi 7 Luego se apareció a Santiago; más tarde, a los apóstoles todos 8 Y último de todos como el nacido anormalmente se apareció también a mi

62 En Gálatas 1,18-19 y 2,9 Pablo se refiere a él como alguien con un rol de liderazgo en la Iglesia “madre” de Jerusalén

63 Gálatas 1,18-20 :Epeita meta. e;th tri,a avnh/lqon eivj ~Ieroso,luma i`storh/sai Khfa/n kai. evpe,meina pro.j auvto.n h`me,raj dekape,nte Luego, de allí a tres años, subí a Jerusalén para conocer a Cefas y permanecí con él quince días

64 Gálatas 1,19 e[teron de. tw/n avposto,lwn ouvk ei=don eiv mh. VIa,kwbon to.n avdelfo.n tou/ kuri,ou A otro de los apóstoles no vi, sino a Santiago, el hermano del Señor

65 En Gálatas 2,9, Pablo menciona a Santiago, Cefas y Juan –en ese orden– como los notables de la comunidad madre

66 VApo. de. tw/n dokou,ntwn ei=nai, ti( o`poi/oi, pote h=san ouvde,n moi diafe,rei\ pro,swpon Îo`Ð qeo.j avnqrw,pou ouv lamba,nei& evmoi. ga.r oi` dokou/ntej ouvde.n prosane,qento( 2,6 Y de parte de los que parecían ser algo –qué cosa fueron alguna vez ninguna diferencia tiene para mí: Dios no recibe el rostro de los hombres– a mí pues, los notables nada me agregaron…

67 kai. gno,ntej th.n ca,rin th.n doqei/sa,n moi( VIa,kwboj kai Khfa/j kai. VIwa,nnhj( oi` dokou/ntej stu/loi ei=nai( dexia.j e;dwkan evmoi. kai. Barnaba/| koinwni,aj 2,9 …y conociendo la gracia dada a mi, Santiago, Cefas y Juan, considerados como columnas, nos tendieron la mano a mí y a Bernabé en señal de comunión …

68 Santiago representa una línea bien definida dentro del cristianismo primitivo: la de los judeo-cristianos que siguieron siendo fieles observantes de la Torá

69 No negaban el derecho a la existencia de un cristianismo de origen pagano… –no obligado a la circuncisión ni a cumplir todos los detalles de la Ley–

70 …pero no aceptaban que los judeocristianos tuvieran que adaptarse al modelo de existencia cristiana vivido por los creyentes provenientes del paganismo

71 El así llamado “incidente de Antioquía” muestra a las claras el “lugar teológico” representado por Santiago y la autoridad que gozaba en medios judeo-cristianos

72 {Ote de. h=lqen Khfa/j eivj VAntio,ceian( kata. pro,swpon auvtw/| avnte,sthn(o[ti kategnwsme,noj h=n 2,11 Mas, cuando vino Cefas a Antioquía, cara a cara contra él me opuse, porque era condenable

73 pro. tou/ ga.r evlqei/n tinaj avpo. VIakw,bou meta. tw/n evqnw/n sunh,sqien\ o[te de. h=lqon( u`pe,stellen kai. avfw,rizen e`auto,n fobou,menoj tou.j evk peritomh/jÅ 2,12 Pues antes que llegaran algunos del grupo de Santiago, con los gentiles comía; pero una vez que aquéllos llegaron, se retrocedía y se separaba temiendo a los de circuncisión

74 kai. sunupekri,qhsan auvtw/| Îkai.Ð oi` loipoi. VIoudai/oi( w[ste kai. Barnaba/j sunaph,cqh auvtw/n th/| u`pokri,seiÅ 2,13 Y participaron en su hipocresía los demás judíos, de modo que también Bernabé fue arrastrado por la hipocresía de ellos

75 Según se infiere por Hechos… –se lo vuelve a mencionar como una autoridad de la Iglesia de Jerusalén en Hechos 21,18s–

76 … y según surge de la tradición de la Iglesia…

77 …este Santiago “hermano de Jesús” gobernó la Iglesia de Jerusalén, como una especie de “obispo”

78 La tradición eclesial sobre Santiago el “hermano del Señor”

79 Según cuenta Eusebio de Cesarea, la comunidad de Jerusalén se fue rigiendo más a la forma judía, por sucesión familiar

80 Por eso no es extraño que apareciera un pariente de Jesús… –que no había pertenecido al grupo de “los doce”– …al frente de la misma

81 La extraordinaria importancia de este “Santiago, hermano del Señor” se refleja en las noticias de Hegesipo –ya teñidas de leyenda– que refiere Eusebio de Cesarea…

82 …y en la presencia de esta figura en numerosos apócrifos y escritos judeo-cristianos antiguos

83 Eusebio de Cesarea, citando especialmente a Hegesipo… …se refiere extensamente a los acontecimientos en torno al martirio de Santiago, arrojado desde el pináculo del Templo y apaleado hasta morir en el Libro II c.23 de su “Historia Eclesiástica”

84 También Eusebio destaca su fidelidad como judío observante, ejemplar, lo que le valió el apodo de “justo”

85 Judeocristianismo “herético” Dado que su perfil de judeocristiano riguroso y fiel lo coloca en las antípodas de Pablo, Santiago –junto con Pedro– es uno de los personajes preferidos del judeocristianismo herético Por ejemplo, aparece en los escritos llamados “Pseudoclementinos”

86 Los escritos llamados “Pseudoclementinos” son una colección de textos de origen sirio, fechados en general hacia el siglo III d.C. –atribuidos a Clemente Romano– que, dentro de un marco novelesco, presentan el relato de la vida de Clemente y su familia, su proceso religioso y sus experiencias como discípulo de Pedro, a quien habría acompañado en sus viajes misioneros

87 La obra ha llegado dos recensiones distintas:  Una versión griega, las «Homilías» (una colección de 20 homilías)  Una versión latina, las «Recognitiones» (diez libros; del siglo IV)

88 Por ejemplo, en las Recognitiones I, 66,2-71 se acentúa la antítesis Santiago - Pablo, definiendo a este último como “inimicus homo”: [Tras una brillante predicación de Santiago en el Templo de Jerusalén una gran cantidad de judíos está por convertirse. Entonces interviene Pablo] «Estaban a punto de hacerse bautizar, cuando un cierto hombre enemigo…

89 …entró en aquel mismo momento en el Templo con unos pocos acompañantes y comenzó a gritar y a decir: “¿Qué es lo que estáis haciendo, israelitas? ¿Por qué os dejáis atrapar tan fácilmente ¿Por qué os dejáis conducir tan precipitadamente como hombres bastante funestos y engañados por un mago?

90 Mientras él decía todas estas cosas y Santiago, el obispo, se ponía a refutarlas, él empezó a sublevar al pueblo para que se levantara en contra [...] ¿Por qué os cruzáis de brazos? ¡Oh lentos y perezosos! ¿Por qué con nuestras manos no atacamos a todos esos y los destrozamos?

91 ... empezó la matanza... Gritan todos... corre mucha sangre... y entre tanto, aquel hombre enemigo atacó a Santiago y lo hizo precipitar desde el escalón más alto del Templo; y creyendo que estaba muerto, se abstuvo de seguir golpeándolo».

92 Evangelio apócrifo de Tomás, logion 12 “Los discípulos dijeron a Jesús: Sabemos que te marcharás lejos de nosotros, ¿quién será el mayor de nosotros?”. Jesús les dijo: “Desde aquel sitio donde habéis llegado, iréis a Santiago el justo, por quien fueron hechos los cielos y la tierra”

93 Entre los textos gnósticos de Nag Hammadi se han encontrado:  Una carta apócrifa de Santiago Allí se relata un presunto coloquio entre Santiago y Pedro con el Señor resucitado que habrían tenido durante los 550 días entre la resurrección y la ascensión del Señor  Dos “apocalipsis” llamados de Santiago.

94 San Jerónimo es testigo de que todavía en el siglo V se atribuía la llamada “Carta de Santiago” a “Santiago el hermano del Señor” [aunque se dudaba de su autenticidad]

95 “Santiago, llamado hermano de Jesús [...] escribió sólo una carta, que es una de las siete católicas, pero se dice que fue escrita por otro con su nombre y que, lentamente, con el correr del tiempo, fue obteniendo autoridad” De Viris Illustribus 2, PL XXIII 609

96 ¿Un escrito cristiano?

97 Llama la atención que el nombre de Jesús sólo aparece en 1,1 y en 2,1 y, si se pasa por alto esta referencia, el texto no se modifica substancialmente

98 Es decir que estamos frente a una exhortación moral no necesariamente cristiana Perfectamente se podría leer aún hoy en cualquier Sinagoga

99 No dice una sola palabra de la muerte y resurrección de Cristo

100 Como “modelo de paciencia” menciona a los profetas que hablaron en el nombre del Señor y sobre todo ¡a Job! nunca a Jesús

101 u`po,deigma la,bete( avdelfoi,( th/j kakopaqi,aj kai. th/j makroqumi,aj tou.j profh,taj oi] evla,lhsan evn tw/| ovno,mati kuri,ou 5,10 Como modelo tomad, hermanos, de sufrimiento y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor

102 ivdou. makari,zomen tou.j u`pomei,nantaj\ th.n u`pomonh.n VIw.b hvkou,sate kai. to. te,loj kuri,ou ei;dete( o[ti polu,splagcno,j evstin o` ku,rioj kai. oivkti,rmwnÅ 5,11 Mirad cómo proclamamos felices a los que perseveraron. De la paciencia de Job habéis oído y el final del Señor sabéis; porque compasivo es el Señor y misericordioso.

103 En la “parénesis” sólo pone ejemplos del Antiguo Testamento Por ejemplo, ver Santiago 2,8-11 Si cumplís plenamente la Ley regia según la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, obráis bien; 9 pero si tenéis acepción de personas, cometéis pecado y quedáis convictos de transgresión por la Ley. 10 Porque quien observa toda la Ley, pero falta en un solo precepto, se hace reo de todos. 11 Pues el que dijo: No adulteres, dijo también: No mates. Si no adulteras, pero matas, eres transgresor de la Ley.

104 En este sentido y a primera vista Santiago produce la impresión de ser un escrito judío

105 Pero cabe reconocer que hay expresiones que no pueden ser de origen judío:  Santiago 1,18, una frase extraña, pero que los investigadores entienden que hace referencia al bautismo, aunque con una terminología inusual

106 boulhqei.j avpeku,hsen h`ma/j lo,gw| avlhqei,aj eivj to. ei=nai h`ma/j avparch,n tina tw/n auvtou/ ktisma,twn 1,18 Nos engendró por su propia voluntad, con Palabra de verdad, para ser nosotros alguna primicia de sus criaturas

107  Y, sobre todo, el así llamado pasaje “antipaulino” (Santiago 2,14-26) sobre la fe y las obras difícilmente puede concebirse antes de Pablo

108 ¿ En qué consiste el cristianismo de Santiago entonces?

109  Ortopraxis Santiago entiende el cristianismo ante todo como un “obrar”, un “obrar” de acuerdo a las exigencias de la fe. El mero “saber” no define la auténtica verdad de la fe. La fe verdadera consiste siempre en un “hacer” cristiano

110  La ley de Dios Si Dios ha revelado en la ley su voluntad salvífica, el hombre debe encontrar en ella el camino de la vida. En la obediencia a la ley de Dios el hombre realiza su libertad: al liberarse de todas las trampas de un proyecto de vida configurado a partir de los propios deseos. La verdadera libertad tiene carácter obediencial.

111 Tal es así que el autor habla de la “ley de la libertad” 1,25 En cambio el que considera atentamente la Ley perfecta de la libertad y se mantiene firme, no como oyente olvidadizo sino como cumplidor de ella, ése, practicándola, será feliz. 2,12 Hablad y obrad tal como corresponde a los que han de ser juzgados por la Ley de la libertad.

112  La misericordia La misericordia no es un mero sentimiento sino la actitud que descubre la indigencia del necesitado y hace algo para remediarla No actuar significa “obrar sin misericordia”.

113 Una fe que no lleve a obrar con misericordia sería vacía (Santiago 2,17) y en absoluto “salvífica” (Santiago 2,13)

114 Dada la magnitud de la tradición cristiana presente en el texto, podría suponerse que el autor supone en sus lectores el conocimiento de esta tradición y por eso no explicita su origen cristológico


Descargar ppt "Las cartas llamadas “católicas” Lic. Claudia Mendoza /// 2013."

Presentaciones similares


Anuncios Google