Descargar la presentación
La descarga está en progreso. Por favor, espere
1
La historia de un maestro llamado Nicodemo
El Señor Jesús fue visitado secretamente por un personaje conocido e importante en su época, en la ciudad de Jerusalén. Se trataba de un hombre llamado Nicodemo.
2
Dice así el evangelio según San Juan 3:1-4; 3:6-7; 3:9-10; 3:14-18
“Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un principal entre los judíos. Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él. Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?. Respondió Jesús: ... Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo...
3
Respondió Nicodemo y le dijo: ¿Cómo puede hacerse esto
Respondió Nicodemo y le dijo: ¿Cómo puede hacerse esto?. Respondió Jesús y le dijo: ¿Eres Tú maestro de Israel y no sabes esto?... Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.”
4
Ahora bien; Nicodemo, era una persona que vino a Jesús de noche, tal vez por temor de ser visto, por alguien que lo conociera y lo criticara por esta actitud de visitar al Señor, que no era bien visto por algunos grupos, como por ejemplo el de los fariseos, al cual Nicodemo pertenecía. Él era una persona religiosa, y como todo fariseo, iba al templo, conocía muy bien la Biblia que había sido escrita hasta ese momento, (el Antiguo testamento). Los fariseos trataban de cumplir (aunque a su manera) con todas las demandas escritas en la Biblia según ellos la entendían, trataban de llevar una vida ejemplar y por lo tanto eran considerados buenas personas por la gente. Además Nicodemo obviamente, creía que el Señor Jesús existía, ya que estaba frente a él viéndolo, hablándole y creía que Jesús era un enviado de Dios, porque lo reconoció en la conversación.
5
Alguien diría que Nicodemo el día de su muerte seguramente iría al cielo, ya que era un religioso, creía en Dios, iba al templo, conocía la Biblia, era lo que llamaríamos una muy buena persona, que hacía buenas obras, reconocía a Jesús como enviado de Dios y creía en él. Y además era un maestro que enseñaba la religión y la Biblia a otros. Pero, vaya sorpresa la que tuvo Nicodemo, porque el Señor Jesús le enseñó que para ver el reino de Dios (ir al cielo) tenía que nacer de nuevo. De lo contrario, todo lo que Nicodemo era, y todo lo bueno que pudiera haber hecho, no le serviría de nada. Nicodemo confundido, pensaba en un nacimiento humano y en la imposibilidad de que un hombre viejo pudiera volver a estar en el vientre de su madre, para luego volver a nacer.
6
Pero el Señor Jesús no estaba diciendo eso, sino que le estaba hablando de un nacimiento espiritual, de ahí aquello de “lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es”. Nosotros conocemos varios reinos, por ejemplo el reino animal, vegetal, y mineral. Pero para pertenecer a uno de estos reinos, no hay otra forma que no sea el haber nacido en ese reino. Es decir que una paloma obviamente pertenece al reino animal porque ha nacido en ese reino, si en vez de paloma, hubiera nacido como planta, pertenecería al reino vegetal, etc. Los hombres y mujeres hemos nacido con un cuerpo de carne y huesos, hemos nacido como Seres humanos, por lo tanto pertenecemos al reino de la humanidad. Y lo que el Señor Jesús está enseñando es que para pertenecer al reino de Dios e ir al cielo hay que nacer en el reino de Dios, (es decir nacer de nuevo), con un nacimiento, no humano, sino espiritual.
7
Permítame que le haga una pregunta; usted que está leyendo este escrito: ¿Ya nació de nuevo?.
Luego el Señor Jesús hace referencia a un pasaje de la Biblia muy conocido por Nicodemo. Números 21:4-9 allí se da a conocer que el pueblo de Israel, que estaba en el desierto, hablo contra Dios y había serpientes que mordían al pueblo y murió mucho pueblo, y vinieron a Moisés para que él le pidiera a Dios que quitara las serpientes que los mordían, pero si Dios hubiera quitado las víboras, los que ya habían sido mordidos también iban a morir, así que le dijo a Moisés que hiciera una serpiente de bronce y la pusiera en alto en un asta, y cualquiera que fuera mordido por una de estas víboras, tenía que mirar a la serpiente de bronce que estaba en alto y entonces el veneno no le afectaría y podía seguir viviendo.
8
Por supuesto que si alguien mordido, no salía a mirar a la serpiente de bronce, seguramente iba a morir. Así que era cuestión de creerlo y tomar la decisión de hacerlo. Esto es lo que escuchó Nicodemo de boca del Señor Jesús, y la lección es la siguiente: Todos los Seres humanos hemos sido mordidos por la serpiente antigua, que es el diablo; y estamos afectados por el veneno del pecado, y este veneno nos va a llevar a la condenación eterna del infierno, pero si miramos con fe, creyendo la obra que hizo el Señor Jesucristo, levantado en una cruz, para que el veneno del pecado no nos afecte, y podamos vivir eternamente con él en cielo; entonces, todos nuestros pecados son perdonados, tenemos la salvación eterna, y nacemos de nuevo, pero si no lo creemos y no lo aceptamos, el veneno del pecado seguirá en nosotros y seremos separados eternamente de Dios.
9
Si aún no ha tomado esta decisión, ¿Que quiere hacer usted
Si aún no ha tomado esta decisión, ¿Que quiere hacer usted? ¿Nacer de nuevo? o ¿seguir como hasta ahora?. Si quiere nacer de nuevo tiene que recibir a Cristo. Allí en el lugar en que se encuentre hable con Dios y dígale: Señor se que soy un pecador o pecadora, me arrepiento de mis pecados; perdóname. Señor Jesús creo que moriste en la cruz por mis pecados y te recibo ahora como mí Salvador. Amén. Si lo hace creyéndolo de todo corazón, usted nacerá de nuevo y podrá ver el reino de Dios. Así lo enseña Dios en La Biblia. Si lo desea, puede enviar este mensaje a otras personas Escrito y diseñado por Daniel Pappalardo
Presentaciones similares
© 2024 SlidePlayer.es Inc.
All rights reserved.