H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975 Serie meditativa 03 cepam H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu.

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2 H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975 Serie meditativa 03 cepam H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975 Serie meditativa 03 cepam

3 “Importa mucho distinguir entre identidad y valor. Puédese comprobar científicamente, ya sea a través de encuestas, ya por otros procedimientos, que tal o cual familia religiosa presenta determinada identidad; pero esa comprobación no significa, de por sí, que la identidad sea válida. He ahí un problema por estudiar.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 199) “Importa mucho distinguir entre identidad y valor. Puédese comprobar científicamente, ya sea a través de encuestas, ya por otros procedimientos, que tal o cual familia religiosa presenta determinada identidad; pero esa comprobación no significa, de por sí, que la identidad sea válida. He ahí un problema por estudiar.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 199)

4 “Santos hubo que, por no tener buenos directores, malgastaron años de esfuerzos en llegar a descubrir aquello que para ellos era esencial. Lo mismo pudiera decirse de un Instituto con mediocre orientación. Si otro Instituto, por el contrario, se mueve dentro de una excelente orientación, es porque tuvo el fundador un perfecto sentido de los valores evangélicos y acertó a responder adecuadamente a una necesidad de su tiempo, sin dejarse influir por las desviaciones de la época.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 200) “Santos hubo que, por no tener buenos directores, malgastaron años de esfuerzos en llegar a descubrir aquello que para ellos era esencial. Lo mismo pudiera decirse de un Instituto con mediocre orientación. Si otro Instituto, por el contrario, se mueve dentro de una excelente orientación, es porque tuvo el fundador un perfecto sentido de los valores evangélicos y acertó a responder adecuadamente a una necesidad de su tiempo, sin dejarse influir por las desviaciones de la época.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 200)

5 “Se nos viene repitiendo desde hace más de un siglo que nuestro espíritu radica en «la humildad, sencillez y modestia” aun cuando este último elemento de la trilogía no aparezca en los escritos del P. Champagnat. ¿Qué táctica se ha seguido para inculcarnos todo ello? Puédese, pongo por caso, colorear las hortensias, cuando se sabe colorear debidamente el mantillo. Ese arte maravilloso del horticultor para transformar las plantas presupone un conocimiento perfecto de cada especie. De la misma manera, el botánico que hay en mí necesita conocer a la perfección la planta que tiene entre manos. De ahí el empeño que debo poner en que los elementos culturales de un valor no me impidan discernir claramente el sentido que dicho valor encierra.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 200) “Se nos viene repitiendo desde hace más de un siglo que nuestro espíritu radica en «la humildad, sencillez y modestia” aun cuando este último elemento de la trilogía no aparezca en los escritos del P. Champagnat. ¿Qué táctica se ha seguido para inculcarnos todo ello? Puédese, pongo por caso, colorear las hortensias, cuando se sabe colorear debidamente el mantillo. Ese arte maravilloso del horticultor para transformar las plantas presupone un conocimiento perfecto de cada especie. De la misma manera, el botánico que hay en mí necesita conocer a la perfección la planta que tiene entre manos. De ahí el empeño que debo poner en que los elementos culturales de un valor no me impidan discernir claramente el sentido que dicho valor encierra.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 200)

6 “También nosotros debemos tener en cuenta el entorno «cultural» donde se ha desarrollado nuestra humildad marista. Convengamos, verbigracia, en que dicha virtud pudo, en determinadas épocas, ser un medio práctico para conseguir que un grupo humano aceptase funciones modestas en la pastoral de la Iglesia, sin pretender más alta cualificación, mediante un esquema de legitimación y de adaptación. Existe siempre la tentación de imponer a otros que nos ayuden a realizar nuestros propios planes.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 201) “También nosotros debemos tener en cuenta el entorno «cultural» donde se ha desarrollado nuestra humildad marista. Convengamos, verbigracia, en que dicha virtud pudo, en determinadas épocas, ser un medio práctico para conseguir que un grupo humano aceptase funciones modestas en la pastoral de la Iglesia, sin pretender más alta cualificación, mediante un esquema de legitimación y de adaptación. Existe siempre la tentación de imponer a otros que nos ayuden a realizar nuestros propios planes.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 201)

7 “Es decir, que no hay que tomar el adjetivo por el sustantivo. Lo substancial es la fe, la esperanza y la caridad, la «sequela Christi», la imitación de Jesús. Situar en un primer plano cuestiones de simple devoción es empobrecer a las familias espirituales. Los santos de la orden, las tradiciones de la orden tienen su grandeza, pero no deben colocarse como pantalla del Evangelio.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 203) “Es decir, que no hay que tomar el adjetivo por el sustantivo. Lo substancial es la fe, la esperanza y la caridad, la «sequela Christi», la imitación de Jesús. Situar en un primer plano cuestiones de simple devoción es empobrecer a las familias espirituales. Los santos de la orden, las tradiciones de la orden tienen su grandeza, pero no deben colocarse como pantalla del Evangelio.” (H. Basilio Rueda Guzmán, “El Espíritu del Instituto”, Circular del 25 de diciembre de 1975, Vol. XXVI, N° 3, p. 203)

8 Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida Deja que lo que has leído se hunda lentamente en tu espíritu. Ora al Señor por medio de María para que lo comprendas mejor y lo lleves a la vida