Tolerancia: ¿es posible convivir?

Presentación del tema: "Tolerancia: ¿es posible convivir?"— Transcripción de la presentación:

1 Tolerancia: ¿es posible convivir?
No. 16 Tolerancia: ¿es posible convivir? Concepto y límites de la tolerancia

2 Índice Introducción Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?
¿Hasta dónde tolerar? Los límites… Peligro: fanatismo y manipulación Las frases de la tolerancia (o sus “verdades a medias”) Falsa tolerancia • Derechos de los niños • Aborto • Manipulación de embriones • Legalización del matrimonio homosexual

3 Índice VII. ¿Y en lo religioso…? • Laicidad y laicismo no son lo mismo
VIII. Reflexiones Alrededor del mundo Actuar

4 I. Introducción

5 I. Introducción La tolerancia es un valor que hoy se defiende a toda costa y se considera como supremo e incuestionable. Sin embargo, aunque es importante no es el de mayor trascendencia ni el único que debe respetarse.

6 I. Introducción La tolerancia puede ayudar a resolver muchos conflictos y eliminar la violencia[1]. Hay que tener cuidado de promover y aplicar el concepto de manera correcta. No todos entienden lo mismo cuando se habla de tolerancia. [1] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000.

7 I. Introducción La verdadera tolerancia:
Implica respetar que una persona tiene derecho a seguir sus creencias y su conciencia[2]. Implica reconocer que no se debe usar la fuerza para cambiar el modo de pensar de alguien, aún y cuando está en el error[3]. Necesita de unos límites, de la misma manera que la libertad no es ilimitada[4]. [2] Williams, Thomas. Construyendo sobre roca firme. Catholic.net. [3] Ibid. [4] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000.

8 I. Introducción La verdadera tolerancia:
Se fundamenta en el reconocimiento de las libertades y los derechos inalienables de la persona, que a su vez se remiten a la dignidad humana[5]. Tiene como base el amor a la verdad y su búsqueda común, así como una actitud de positiva colaboración con el otro[6]. [5] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000. [6] López Q., Alfonso. “La tolerancia y la búsqueda en común de la verdad”. ConoZe.com.

9 II. Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?

10 II. Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?
¿Qué sí es? Respeto y consideración hacia la diferencia; disposición a admitir en los demás una manera de ser y de obrar distinta a la propia[7]. Es una actitud de aceptación del legítimo pluralismo[8]. Respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias[9]. [7] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000. [8] Ibid. [9] “Tolerancia”. Diccionario de la Real Academia Española.

11 II. Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?
Es tolerante quien[10]: a pesar de creer que está en lo cierto no se cierra en sus convicciones; se abre a la posibilidad de que el otro tenga razón, al menos en parte; escucha la explicación del otro aún y cuando después se mantenga en su posición; respeta al otro, lo estima, lo cree capaz de aportarle algo valioso y buscar con él la verdad. [10] López Q., Alfonso. “La tolerancia y la búsqueda en común de la verdad”. ConoZe.com.

12 II. Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?
¿Qué no es tolerancia? Ejemplos e implicaciones No es tolerar todo Para poder convivir en paz en la sociedad y en la vida se necesita un orden jurídico y moral, de ahí que imponer una ley o hacer respetar la autoridad no es intolerancia[11]. No se puede caer en una actitud relativista. Una actitud de indiferencia ¿Deberíamos ser “tolerantes” y no hacer nada al ver que nuestro mejor amigo se hunde en el alcoholismo? Actuar así nos aleja de nuestro ser humanos. Al confundir tolerancia con indiferencia se corre el riesgo de permitir el mal. Ser neutrales Ser “neutrales” conlleva el peligro de desvincularse de todo y no defender nada. Al impartir una “educación neutra” a niños y jóvenes lo que se hace en realidad es inculcarles el no tener convicciones firmes. Detrás de todo modelo educativo hay implícita o explícitamente un código de ética[12]. Dejar que el otro hable pero no tener disposición a escuchar razones que no sean las propias No existe el diálogo y el debate se convierte más bien en un “monólogo en paralelo” o “por turnos”[13]. [11] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000. [12] Ibid. [13] Ibid.

13 II. Aclarando: ¿qué es y qué no la tolerancia?
Los seres humanos necesitamos complementar nuestros esfuerzos y perspectivas. La tolerancia implica el respeto a la diversidad, pero ésta deja de ser legítima cuando entra en conflicto con el bien común o con los derechos de los demás[14]. Esta forma de entender la tolerancia sólo es posible si se jerarquizan de forma correcta los valores: los más trascendentes son los que deberían guiar nuestra conducta[15]. [14] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000. [15] López Q., Alfonso. “La tolerancia y la búsqueda en común de la verdad”. ConoZe.com.

14 III. ¿Hasta dónde tolerar? Los límites…
No mentir llamando bueno a lo que no es. Hay que evaluar cada situación, pues en pro de la tolerancia se puede llegar a ser cómplice del mal o justificarlo. Buscar la verdad. No hay que encerrarse en los propios criterios, sino intercambiar opiniones hasta encontrar la mejor comprensión de un asunto. Hay que tolerar para respetar la libertad de los demás siempre y cuando no se haga un mal y no se violen los derechos fundamentales de otras personas[16]. [16] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000.

15 IV. Peligro: fanatismo y manipulación

16 IV. Peligro: fanatismo y manipulación
Estas actitudes se deben evitar para construir una sociedad donde exista una cultura de verdadera tolerancia.

17 IV. Peligro: fanatismo y manipulación
Fundamentalismo o fanatismo Es defender con tenacidad y apasionamiento creencias u opiniones, sobre todo religiosas y políticas[17]. Para defender lo que para él es bueno el fanático condena y hasta maltrata a los “malos” (los que piensan diferente a él). Pero OJO: no se debe buscar un fin bueno a través de medios inmorales[18]. [17] “Fanático”. Diccionario de la Real Academia Española. [18] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000.

18 IV. Peligro: fanatismo y manipulación
Lo contrario a la tolerancia es la manipulación, pues ésta no busca la verdad sino dominar a través del engaño. La manipulación tiende a impedir que las personas piensen por cuenta propia, juega con las ideas y las palabras, cambia los significados, en resumen, resta libertad interior a las personas[19]. [19] López Q., Alfonso. “La tolerancia y la búsqueda en común de la verdad”. ConoZe.com.

19 IV. Peligro: fanatismo y manipulación
¿Cómo se manipula? Algunas técnicas para manipular[20]: La dialéctica Manipulación del lenguaje Divinizar conceptos Repetición de ideas [20] Garza M., Luis. La batalla por el alma del mundo. Catholic.net. López Q., Alfonso. “La manipulación a través del lenguaje (Parte 4)”. Catholic.net.

20 V. Las frases de la tolerancia (o sus “verdades a medias”)

21 “Nadie tiene derecho a imponer a los demás su propio concepto de moral”
Análisis Si un policía mete a la cárcel a todos los que se pasen un semáforo en rojo, alguien dirá que no es justo. Pero el policía podría argumentar “no me puedes imponer tu concepto de justicia”. En realidad todos actuamos en base a valores absolutos. Sólo si existe un concepto de justicia universalmente aceptado se podrá acudir a él para juzgar injusto el encarcelamiento sólo por haberse pasado un rojo. Al relativizar los valores, surge el problema de no saber ya qué está bien y qué está mal.

22 “Toda opinión es digna de respeto”
Análisis Todas las personas son dignas de respeto, mas no ocurre lo mismo con las opiniones[21]. Tal vez algunas tengan que ser rechazadas por no poseer fundamento o por ser falsas. Las ideas dignas de respeto lo serán por su apego a la verdad. Muchos podrán tener una parte de la verdad y sus aportes pueden enriquecernos. Pero eso no significa que la verdad se componga de las distintas opiniones o que no haya una sola verdad universal sobre el bien y el mal. Hay que aprender a pensar; debatir y analizar las distintas ideas hasta descubrir de qué lado está la verdad[22]. [21] Williams, Thomas. Construyendo sobre roca firme. Catholic.net. [22] Aguiló, Alfonso. La Tolerancia. Madrid: Ediciones Palabra, S.A., 2000.

23 “Todas las opiniones valen”
Análisis Si alguien opina que la pintura “Guernica” de Pablo Picasso no es una obra de arte pero un experto en dicha materia afirma lo contrario, ¿valen lo mismo ambas opiniones? No se es intolerante si se toma más en cuenta la opinión del experto. Una opinión es respetable o “valdrá más” si está debidamente fundamentada o apegada a la razón.

24 VI. Falsa tolerancia A veces en nombre de la tolerancia se conceden ciertos “derechos” o se legalizan ciertas conductas. En estos casos se practica una tolerancia mal entendida o errónea, porque se atropella la naturaleza de los individuos o los derechos de terceros.

25 VI. Falsa tolerancia Derechos de los niños
¿Eres intolerante con tus hijos si no los dejas hacer lo que quieran? ¿si “coartas su libertad” al controlar su hora de llegada a casa? Hay que ser tolerantes con los hijos y respetar sus derechos siempre que no se antepongan al deber-derecho que tienen los padres de educarlos como ellos juzguen conveniente. Derechos de los niños

26 VI. Falsa tolerancia Derechos de los niños
El derecho que tienen los hijos es el de contar con padres que sean buenos educadores y que sean responsables. No hay que “tolerar” en los hijos conductas que los puedan dañar y llevar a una vida llena de vicios o de problemas que pudieran haberse evitado si sus padres hubieran ejercido con ellos una verdadera tolerancia.

27 VI. Falsa tolerancia Aborto
Hoy se juzga de intolerante a quien se oponga al aborto, pues se dice que es oponerse a los derechos de la mujer. Se olvidan de que el bebé es un ser humano con dignidad y derechos desde la concepción. “Tolerar” el aborto es una falsa tolerancia pues no se respeta la vida de un ser humano indefenso.

28 VI. Falsa tolerancia Manipulación de embriones
En muchas técnicas de fecundación artificial se manipulan, congelan o destruyen embriones. Al hacerlo se violan la dignidad y derechos que les corresponden como seres humanos. ¿Es ético “tolerar” que se sacrifiquen tantas vidas humanas con tal de lograr que nazca una sola? Obtener algo bueno a través de medios ilícitos no es ético.

29 VI. Falsa tolerancia La legalización del matrimonio homosexual
En algunas sociedades se han legalizado los matrimonios entre personas del mismo sexo bajo el argumento de ser incluyentes y “tolerantes” con las personas que tienen esta forma de vida. Pero al hacerlo, ¿no se está siendo intolerante con quien piensa distinto?

30 VI. Falsa tolerancia La legalización del matrimonio homosexual
El matrimonio es por definición y por naturaleza la unión entre un hombre y una mujer. No se debería equiparar las uniones homosexuales al matrimonio. El Estado debe proteger la institución que genera descendencia y la educa para su participación en la sociedad: el matrimonio entre hombre y mujer. Esta protección implica que se respete su constitución y definición

31 VI. Falsa tolerancia Algunos dicen que defender el matrimonio entre hombre y mujer, la familia y la vida como primer derecho del hombre es “políticamente incorrecto” pues impone una visión moral particular. Esto es una falsa tolerancia de aquellos que quieren imponer sus ideas, discriminando y siendo intolerantes con los que defienden la dignidad humana y todas aquellas instituciones que son fundamento de la sociedad.

32 VII. ¿Y en lo religioso…? Uno de los derechos humanos es el de la libertad religiosa. Esto significa que ningún gobierno puede (o no debería) limitar el derecho a creer, a asociarse, a la libertad de expresión de los ministros de culto, poseer bienes o a manifestar su fe, mientras se respete a las demás personas.

33 Laicidad y laicismo no son lo mismo
Laicidad[23]: postura o filosofía que consiste en que el Estado es aconfesional o laico, es decir, que no promueve ni persigue ninguna religión en particular, que los servidores del Estado no están obligados a seguir o a no seguir una confesión religiosa, y que los ciudadanos no serán discriminados por razón de su religión o creencias, ni a favor ni en contra. [23] Peláez, José Ignacio. “Aconfesionalidad, laicidad y laicismo: A propósito de la declaración de la Plataforma para una sociedad laica”. Revista Arbil. No. 68. En:

34 Laicidad y laicismo no son lo mismo
Laicidad: el que un Estado sea laico no significa que se ignora el hecho religioso. En un Estado laico y tolerante con las religiones no debería discriminar y descalificar juicios u opiniones sólo por venir de personas religiosas, y debería dar cabida a la objeción de conciencia.

35 Laicidad y laicismo no son lo mismo
Laicismo: se define como la “doctrina que defiende la independencia del hombre o de la sociedad, y más particularmente del Estado, respecto de cualquier organización o confesión religiosa”[24]. Aunque la definición como tal no implica una actitud de rechazo a la religión, en la práctica el laicismo es una ideología que busca que la religión no aparezca en la vida pública y, de ser posible, en la vida privada de sus ciudadanos[25]. [24]“Laicismo”. Diccionario de la Real Academia Española. [25] Peláez, José Ignacio. “Aconfesionalidad, laicidad y laicismo: A propósito de la declaración de la Plataforma para una sociedad laica”. Revista Arbil. No. 68. En: [1] .

36 VIII. Reflexiones Tolerancia no significa “respeto” del error o del “pecado” sino de la persona que vive en el error o el pecado. Al tolerar el error no se aplica el valor de la tolerancia pues eso implicaría atentar contra el derecho a la verdad, al bien y a la libertad. Tolerar no significa permitir el mal.

37 VIII. Reflexiones La tolerancia hacia las personas es algo lícito y conveniente, no así la aprobación del mal moral o del error: éstos permanecerán siempre como reprobables. La “caridad” aplicada al valor “tolerancia” implica no sólo soportar al que yerra o al que vive en el mal, también implica una preocupación por él e incluso iluminarle para encaminarlo a la verdad y al bien.

38 VIII. Reflexiones Algunos han monopolizado el valor de la tolerancia, se le aleja de su significado real, y se usa para justificar la mentira y el error. Y cuando alguien se atreve, con respeto, a tratar de encauzar hacia la verdad y el bien, o simplemente recordarlos, se le tacha de “intolerante”. Quienes piden tolerancia hacia su modo de ser, pensar o vivir, ¿no estarían en la misma obligación de profesar lo que piden hacia quienes piensan distinto?

39 IX. Alrededor del mundo

40 El exceso de tolerancia en la educación de los hijos[26].
IX. Alrededor del mundo LATINOAMÉRICA El exceso de tolerancia en la educación de los hijos[26]. Debido a una educación tolerante y permisiva que les otorgaron sus padres, se crea una nueva generación: los jóvenes Ni-Ni. Oscilan entre 18 y 30 años, viven en el conformismo y dependencia de sus padres. Ni estudian, ni trabajan, ni tienen sueños, ni esperanza en el futuro. [26]

41 Intolerancia en los medios de comunicación[27]
IX. Alrededor del mundo MÉXICO Intolerancia en los medios de comunicación[27] El conductor Esteban Arce expresó en su programa que la única manera de procrear es a través de hombre y mujer, que eso es lo natural, y que lo demás (refiriéndose a la homosexualidad) no es normal. Sus comentarios causaron ira entre el movimiento homosexual y obligaron a la empresa en la que el conductor trabaja a pedir disculpas; exigían que se le despidiera. ¿Dónde quedó la libertad de expresión?

42 X. Actuar

43 X. Actuar En la familia Educar a los hijos en la verdadera tolerancia, aquella que implica el respeto y diálogo con quien tiene ideas diferentes a las propias, y busca el bien y la verdad. Enseñar a los hijos a pensar y debatir sobre los diferentes temas que se discuten en la actualidad, y a defender sus creencias con fundamentos y razones sólidas. Que los padres se mantengan informados sobre las tendencias de la cultura que afectan negativamente a la familia y al matrimonio como instituciones, y se formen e informen para defenderlas.

44 X. Actuar Sociedad En el debate de temas polémicos, mantener una actitud de respeto y escucha del adversario ideológico. Exigir al gobierno que en las leyes y la educación prevalezca el respeto a los valores de la dignidad humana. Tomar conciencia de la tendencia al relativismo que existe en la cultura y velar por el respeto a los valores universales y los derechos fundamentales de las personas. Evitar descalificar a las personas por sus creencias políticas, religiosas o de cualquier tipo.

45 X. Actuar Medios de comunicación
Ser equitativos y dar espacio y cobertura a noticias que involucren no una sola forma de pensar sino todas las posturas de la sociedad. Formar opinión pública con argumentos fundamentados y apegados a la verdad objetiva y a los valores universales.

46 X. Actuar Gobierno Cuidar que las leyes que promulga respeten los valores de la dignidad humana y los derechos humanos fundamentales. Cuidar de no caer en una actitud de laicismo intolerante.

47 Amatista #107 Colonia Pedregal del Valle C. P
Amatista # Colonia Pedregal del Valle C.P San Pedro Garza García, N.L. México Tel. (81)