La obediencia: Fruto de salvación.

Presentación del tema: "La obediencia: Fruto de salvación."— Transcripción de la presentación:

1 La obediencia: Fruto de salvación.
Mt. 7:13-29.

2 Objetivo Entender que debemos edificar nuestras vidas sobre la única roca sólida que constituye nuestra comunión con Jesucristo y Su Palabra para manifestar el fruto genuino de obediencia para salvación.

3 V. 13 – 14. Jesucristo nuestra única fuente de salvación.
Mateo 7:  Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; 14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan. Cuál es la instrucción de Jesucristo para los suyos? Cómo es la puerta y el camino que lleva a la perdición? Cuántos entran por ella? Cómo es la puerta que nos lleva a la vida? Cuántos son los que la hallan?

4 V. 13 – 14. Jesucristo nuestra única fuente de salvación.
Según Jn. 10:7-9. Quién es la puerta de las ovejas? Juan 10:7-9 7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas. 8 Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas. 9 Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.

5 V. 13 – 14. Jesucristo nuestra única fuente de salvación.
Según Jn. 14:6. Quién es el camino, la verdad y la vida? Juan 14:6  Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Por lo tanto Jesús se constituye en la puerta, el camino y el destino de nuestra salvación.

6 v. 15-20. Cuidémonos de lo falso permaneciendo en lo verdadero.
Mateo 7:  Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. 16 Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? 17 Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. 18 No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. 19 Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. 20 Así que, por sus frutos los conoceréis. Cuál es la instrucción de Jesús en el vers. 15? Cómo vienen a nosotros estos falsos profetas? Qué son en realidad estos falsos profetas? Cómo los conoceremos? Puede un árbol bueno dar fruto malo y viceversa? Qué pasara con el árbol que no da buen fruto?

7 v. 15-20. Cuidémonos de lo falso permaneciendo en lo verdadero.
El Espíritu de verdad nos lleva a la verdad. Jn. 14:16-17, 15:26, 16:13. Permaneciendo en Su Palabra seremos santificados en la verdad (Jn. 17:17) y tendremos el discernimiento para descubrir la falsedad.

8 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
Mateo 7:  No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. 22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad. 24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca

9 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
Mateo 7:  Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina. 28 Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; 29 porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.

10 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
En dónde radica la seguridad para entrar en el reino de los cielos? Cuál fue la declaración de Jesús de aquellos que solo le decían Señor, Señor pero no hacían la voluntad de Dios? Qué entiendes por conocer a Jesucristo y que Jesucristo te conozca a ti?

11 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
Lee. Mt. 16:13-18 y responde. Cuál es la roca sobre la que Jesucristo edificara Su iglesia? Mateo 16:  Viniendo Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? 14 Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas. 15 El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. 17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.

12 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
Mt. 21: A quién se refiere en este pasaje como la piedra que desecharon los edificadores? Mateo 16:  Jesús les dijo: ¿Nunca leísteis en las Escrituras:     La piedra que desecharon los edificadores,     Ha venido a ser cabeza del ángulo.     El Señor ha hecho esto,     Y es cosa maravillosa a nuestros ojos? 43 Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él. 44 Y el que cayere sobre esta piedra será quebrantado; y sobre quien ella cayere, le desmenuzará.

13 v. 21-29. La obediencia: Fruto genuino de salvación.
Cuál es la característica del hombre prudente? Por qué no cayó la casa del hombre prudente pese a todas las adversidades que soporto? Cuál es el destino del hombre insensato que solo escucha pero no hace las Palabras de Jesús? Cuál es el fruto que asegura nuestra salvación? Por tanto no se trata de profetizar, echar fuera demonios y hacer milagros en el nombre de Jesús, sino de tener una relación intima y permanente con Su Palabra que nos habilite a ser no solamente oidores sino también hacedores de la misma. Stgo. 1:21-25.