La restauración y el cambio si es posible.

1 de Pedro 2:11 “Amados, os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma”. 3 de San Juan 1: 2 “Amado/a yo deseo que tú seas prosperado/a en todas las cosas, y que tengas salud, así como tu alma esta en prosperidad.”

Restauración Introducción Hay millones de personas encarceladas en la prisión de las drogas, el alcohol, el tabaco, el sexo etc... El apetito se ha pervertido hacia alimentos malsanos, bebidas y comidas embriagantes o estimulantes. Como es claro, esta situación no puede crear un reavivamiento de las facultades espirituales o morales, ni tampoco una reforma completa, ya que el hombre o la mujer sumido en el vicio, cualquiera que sea, por sí mismo no puede vencer.

Restauración Las adicciones se adquieren de forma gradual: Etapa I – “ Cambio Interno” La persona se tiene un gran dolor interior y se automedica a través del uso de drogas. Como consecuencia la persona siente un alivio pasajero a este dolor, pero cuando el efecto se va busca más droga para volver a experimentar el alivio. Se crea la adicción y el proceso de tolerancia a la droga aumenta necesitanto cada día mayor cantidad de droga para sentir el efecto experimentado al principio de su adicción.

Restauración La persona se vuelve egocéntrica, sólo piensa en la droga Y su consumo diario. Sus relaciones estan basadas en la manipulación para adquirir su droga. Cuando se da cuenta que no puede controlar o manipular a toda persona que está a su alrededor para obtener lo que necesita, se siente rechazado (a) y traicionado (a), su autoestima se debilita hasta que va aumentando el miedo de compartir y conectarse con otras personas de forma sana.

Restauración La personalidad narcisista adictiva se rinde porque no puede manipular a todo el mundo para conseguir lo que quiere y es entonces donde surge la personalidad adictiva ritualista. La persona se dedica a concentrarse en todos los rituales asociados al uso y consumo de su droga sin importarle ningún tipo de relación con nadie, sólo su droga.

Restauración Etapa II - “Cambio en el estilo de vida” En esta etapa la personalidad adictiva ya ha tomado todo el control de la persona y comienzan a surgir los problemas familiares, laborales y sociales. Los rituales adictivos se estabilizan y el adicto asume una posición de víctima de las circunstancias.

Restauración Etapa III - “ La vida presenta una pesada carta” La persona comienza a odiar al adicto que hay dentro de ellos. Quieren cambiar pero no saben como. Experimentan sentimientos de soledad, muestran conductas violentas y agresivas y tienen dependencia emocional. Surge conducta suicida y existe mucho dolor por su dependencia a la droga.

Restauración El abusar de nuestro cuerpo con cualquier vicio o hábito perjudicial implica debilitar la mente y el espíritu. De esta manera, el carácter se va desarrollando con imperfecciones y se debilitará. Por eso es que Sátanas encamina sus tentaciones al debilitamiento y a la degradación de las facultades físicas. Así también triunfará en el aspecto mental y moral. Al llevar nuestro cuerpo a la complacencia pecaminosa de nuestros gustos y excesos, nos hará más débiles para discernir entre el bien y el mal, y así nos retendrá en la cárcel del pecado.

Restauración “ Si nuestros hábitos físicos no son correctos, nuestras facultades mentales y morales no pueden ser fuertes, porque hay una estrecha relación entre lo físico y lo moral ” Quien ha cedido y sigue cediendo ante la provocación y la dulzura de un vicio, quien lo sigue acariciando secretamente, va perdiendo poco a poco su dominio propio: va haciéndose esclavo de sus vicios y es entonces cuando las pasiones y el apetito lo gobiernan. El cuerpo es el Rey y la razón y la mente son subyugadas.

Restauración Intemperancia (comer, beber y vestir) Errores de Pensamiento Malas Acciones Vicios

Restauración A pesar de nuestros malos hábitos Dios quiere restaurarnos y llevarnos a vivir una vida más completa y sana.

Restauración Si queremos cambiar debemos entender que … sólo Dios puede darnos la alternativa que necesitamos.

Restauración No dedicar mucho tiempo a lamentarse por su problema o debilidad.

Restauración “ Mirad a mí, sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más”. Isaías 45:22 “ Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado”. Hebreos 12: 12 y 13

Restauración 2. No se autocastigue

Restauración “ Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el padre, a Jesucristo el justo”. 1 San Juan 2:1

Restauración “Aunque seamos vencidos por el enemigo, no somos desechados ni abandonados por Dios.” El intercede por nosotros ante el padre. “ Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo, según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”. Hebreos 4: 15 y 16

Restauración 3. No se aleje de Cristo y de su iglesia.

Restauración “ Muchos vencidos por la tentación se sienten humillados por sus caídas, y les parece inútil acercarse a Dios; pero este pensamiento es del enemigo. Cuando se ha pecado y nos sentimos incapaces de orar, es entonces cuando más debemos hacerlo.” Ministerio de Curación pag. 136

Restauración “ Tú, enemiga mía, no te alegres de mí, porque aunque caí, me levantaré; aunque more en tinieblas, Jehová será mi luz”. Miqueas 7: 8

Restauración No abandone su lucha contra el pecado. Equivocarse vs. Abandonar “ Los malos hábitos no se vencen con un único esfuerzo. El yo sólo se puede dominar después de largos y arduos combates. No espere vencer todas sus tentaciones al primer intento. De hecho, no espere vencerlas sin una lucha larga y severa”. (4 Testimonio pág # 605)

Restauración “ Cuando Cristo se veía fieramente asediado por la tentación, no comía. Se entregaba a Dios y gracias a su ferviente oración y perfecta sumisión a la voluntad de su Padre salía vencedor. Jesus pedía fuerzas a su padre con fervor. Jesucristo demostró que la oración es esencial para recibir fuerzas con que contender contra las potestades de las tinieblas y hacer la obra que se nos ha encomendado”. “Nuestra propia fuerza es debilidad, pero la que Dios concede es poderosa, y hará más que vencedor a todo aquel que la obtenga”. Testimonios para la Iglesia, Tomo 2, pág. 183

Restauración 5. Crea que aunque usted pecó todavía sigue siendo justo, porque está en la plataforma de la justificación por la fe.

Restauración ¿ Qué es la justificación por la fe ? El acto soberano de Dios por el cual, por pura gracia y a base de su pacto, declara aceptos ante Él a quienes creen en su hijo.

Restauración ¿ Qué hacer ?

Restauración Admita humildemente que ha pecado y presente su vició o hábito perjudicial al Señor. “El sana a los quebrantados de corazón y venda sus heridas”. Salmo 147: 3 “ Porque el Señor es muy misericordioso y compasivo”. Santiago 5: 11 Su amoroso corazón se conmueve por nuestras tristezas.

Restauración “ Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago”. Romanos 7: 15 Dios ve y Dios sabe …… “ Las relaciones entre Dios y cada persona son tan claras y plenas como si no hubiese otra alma por la cual hubiera dado a su Hijo amado” El Camino a Cristo, EGW.

Restauración Pida perdón a Dios y reclame su ayuda El único remedio contra el vicio es la gracia y el poder de Cristo. De nada sirven las buenas intenciones que se toman confiando en la propia fuerza. La victoria sobre el vicio, cualquiera que sea, la hizo posible Cristo por su vida impecable en la tierra. “ Cristo vino para hacernos participantes de la naturaleza divina, y su vida es una afirmación de que la humanidad, en combinación con la divinidad, no peca” Temperanacia, pág. #95 “ Si alguno tiene sed, venga a mí y beba” Juan 7:37

Restauración Las tentaciones a la complacencia del apetito tienen un poder que puede ser vencido solamente por la ayuda que Dios puede impartir. Para cambiar es necesario el poder divino y la aceptación de ese poder en mi vida. Pero eso requiere un rendir de nuestra voluntad al Señor. Dios le dio al hombre la capacidad de ELEGIR y DECIDIR. “El desear lo bueno y lo puro es justo; pero si no hacemos más que desear, de nada sirve. Muchos se arruinarán mientras esperan y desean vencer sus malas inclinaciones. No someten su voluntad a Dios. NO ESCOGEN SERVIRLE. Temperancia, pág. #100.

Restauración “ La voluntad no es el gusto o la inclinación, sino la elección, el poder de decidir, el poder real que obra en los seres humanos para obedecer a Dios o desobedecerle”. Temperancia, pp. 100.

Restauración Rinda su voluntad a Dios y permita que lo cambie. Al hacer uso de nuestra voluntad nos aliamos con el poder divino, y nos sometemos a Dios, entonces, cambiará nuestra conducta. Recibiremos fuerza de los alto para mantenernos firmes. Mi parte es poner mi voluntad del lado de Cristo. Elegir servirle. Elegir obedecerle. Cuando le rindo mi voluntad, inmediatamente toma posesión de mí y obra en mi para que yo quiera y haga según su beneplácito. Mi naturaleza es sometida al dominio del Espíritu Santo. Y aún mis pensamientos le están sujetos.

Restauración Si no puedo dominar por mi mismo (a) mis impulsos y emociones. Si no puedo dominar mis deseos pecaminosos, de usar droga, alcohol, de ser adúltero, ladrón o mentiroso, puedo si tomar la decisión de ceder mi voluntad a Dios, y así se obrará un cambio total en mi vida.

Recuperación ¿En que etapa del cambio estas tú ? Pre- contemplación – estas contemplando tu problema, te das cuenta de que tienes un problema, pero no estas haciendo nada para resolverlo. Contemplación – contemplas tu problema, sabes que existe ese problema en tu vida pero solo estas considerando el hacer algo al respecto; pero nunca lo haces. Preparación – estas planificando hacer un cambio, se toman algunos pasos hacia el cambio, se trata de cambiar pero no se logra.

Restauración “Nuestra propia fuerza es debilidad

Historia de Bill W. Fundador de los Alcóholicos Anonimos

Restauración – Los 12 pasos- Bill W. Admitimos que somos impotentes ante el alcohol o cualquier otro vicio y que nuestras vidas se han vuelto ingobernables. Llegamos a creer que Dios siendo un poder superior mejor que nosotros mismos puede restaurarnos a la sanidad. Decidimos poner nustras voluntades y nuestras vidas al cuidado de Dios. Hacemos sin miedo un minucioso inventario moral de nosotros mismos.

Restauración Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos y ante otras personas la naturaleza exacta de nuestros defectos. Estamos dispuestos a permitirle a Dios que nos libere de todos estos defectos de carácter. Con humildad le pedimos a Dios que quite nuestras imperfecciones. Hacemos una lista de todas las personas a quienes hemos ofendido y estamos dispuestos a reparar el daño causado.

Restauración Reparamos directamente el daño causado con estas personas, salvo cuando al hacerlo perjudicaría más a los ofendidos. Continuamos haciendo nuestro inventario personal y cuando nos equivocamos lo admitíamos inmediatamente. Buscamos a través de la oración y la meditación mejorar nuestro contacto consciente con Dios, pidiéndole solamente que nos deje saber su voluntad y nos de la fortaleza para cumplirla.

Restauración Habiendo experimentado, a consecuencia de estos pasos, un reavivamiento espiritual, intentamos llevar este mensaje a otros y practicar estos principios en todos nuestros asuntos.

Restauración Dios desea vernos triunfar sobre nuestros vicios y pecados. Unámonos con El, dependamos de El. Y cuando venga el deseo y la tentación elijamos someternos a Cristo.

“Porque separados de mí nada podéis hacer” San Juan 15: 5 Restauración “Porque separados de mí nada podéis hacer” San Juan 15: 5

El cuento de las dos vasijas Un aguador de la India tenia sólo dos grandes vasijas que colgaba en los extremos de un palo y que llevaba sobre los hombros. Una tenía varias grietas por las que se escapaba el agua, de modo que al final de camino sólo conservaba la mitad, mientras que la otra era perfecta y mantenía intacto su contenido.

El cuento de las dos vasijas Esto sucedía diariamente. La vasija sin grietas estaba muy orgullosa de sus logros pues se sabia idónea para los fines par los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba avergonzada de su propia imperfección y de no poder cumplir correctamente su cometido.

El cuento de las dos vasijas Así que al cabo de los años le dijo al aguador: Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir por tu trabajo.

El cuento de las dos vasijas El aguador le contestó: Cuando regresemos a casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino. Así lo hizo la tinaja y, en efecto, vio muchísimas flores hermosas a lo largo de la veredad; pero siguió sintiéndose apenada porque al final sólo guardaba dentro de sí la mitad del agua del principio.

El cuento de las dos vasijas El aguador le dijo entonces: ¿ Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Quise sacar el lado positivo de tus grietas y sembré semillas de flores. Todos los días las has regado y durante dos años yo he podido recogerlas. Si no fueras exactamente como eres, con tu capacidad y tus limitaciones, no hubiera sido posible crear esa belleza.

El cuento de las dos vasijas Todos somos vasijas agrietadas por alguna parte, pero siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.