Ella se hace responsable del mundo y lo toma en sus manos. Hagámonos responsables de nosotros mismos y del mundo que nos rodea. Amémonos, ayudémonos, sembremos la paz y cumplamos los mandamientos del Señor.

Dios nos llama a ser como María: hombres y mujeres “en pie”, libres, responsables, listos y listas, en guardia, vigilantes, disponibles para lo mejor. María, junto con todos los hombres, camina hacia Dios, poniendo en práctica la Palabra de su Hijo.

Señal de acogida, de disponibilidad, de entrega. Ella se pone a nuestro servicio. ¿Nos ponemos nosotros en actitud permanente de servicio? Ella se pone a nuestro servicio. ¿Nos ponemos nosotros en actitud permanente de servicio?

Ella se inclina dispuesta a escucharnos: siempre atenta, mirando a todo lo que llega hacia ella. Su mirada va a lo más profundo del corazón humano. Su rostro tierno y sonriente, nos invita a mantenernos en estado de paz y tranquilidad, acercándonos con frecuencia a la Reconciliación y a la Eucaristía Su rostro tierno y sonriente, nos invita a mantenernos en estado de paz y tranquilidad, acercándonos con frecuencia a la Reconciliación y a la Eucaristía.

Génesis 3,15: “Dios dice a la serpiente: Pondré enemistad entre ti y la mujer, entre su linaje y el tuyo, ella herirá tu cabeza cuando tu la hieras en el talón”

La letra M: Nos habla de María: Mujer, Madre, Modelo… (Doc. Puebla) la Esclava del Señor. La servidora en su Plan amoroso de salvación. Con ella se inicia el Nuevo Testamento. La Cruz unida a la M, significa la unión íntima entre la Madre y el Hijo..Unidas simbolizan la fuerza del amor. Juan 19,27… Al pie de la Cruz estaba su Madre. ¡A Jesús por María!

Ellos nos dicen que: Es tiempo de amarnos mutuamente; de sacrificarnos por amor; amar hasta dar la vida por los otros; sostenernos diaria y mutuamente en el dolor, comprometernos con el dolor ajeno. Unirnos para realizar nuestras metas, los proyectos y la misión. Nos enseñan que amar no es cosa fácil, nos invitan a olvidarnos de nosotros mismos para servir y hacer felices a los otros. Unirnos para realizar nuestras metas, los proyectos y la misión. Nos enseñan que amar no es cosa fácil, nos invitan a olvidarnos de nosotros mismos para servir y hacer felices a los otros. Ambos corazones nos dicen que Jesús y María son amigos que nunca fallan.

12 tribus de Israel, fundamento del Pueblo elegido de Dios. Representa a cada uno de nosotros, portadores del mensaje evangélico. Llamados a ser Luz del mundo en medio de tanta oscuridad y desamor. Como la Madre, saber iluminar nuestro medio ambiente, con la luz de nuestra vida sana y alegre!

Símbolo de las GRACIAS … Ella nos recuerda que estamos hechos para vivir en la Luz. Los rayos que no brillan son las GRACIAS que no le pedimos. Nos muestra el camino y nos orienta hacia su Hijo; la Luz del mundo.

Símbolo de su cuidado maternal; de su protección y defensa. Abrigo en las penas y dificultades de la vida. La ternura de María nos hace sentir como hijos pequeños, “protegidos en el cuenco de su manto”. (Aparecida 265)

En ella, María revela su identidad profunda. Su INMACU- LADA CONCEP- CION. En ella, María revela su identidad profunda. Su INMACU- LADA CONCEP- CION. Su poder de intercesión ante Dios. Ella ruega por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte. Su poder de intercesión ante Dios. Ella ruega por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte.

Fin. Esta fue una sencilla reflexión sobre algunos aspectos de la Virgen de la Medalla… Existe todo un estudio sobre el significado teológico de la Medalla Milagrosa que vale la pena profundizar más adelante! Sor Luzdari Jiménez S. h.c.